Bolsa, mercados y cotizaciones
BlackRock avisa del fin de las carteras 60/40: la inflación y los tipos imponen un cambio de régimen
- Los bonos ya no sirven para diversificar la caída de las acciones
- Piden centrar la composición en los enfoques y no en los porcentajes
- El nuevo régimen es de recesión, de inflación pegajosa y de tipos altos
Carlota G. Velloso
Aunque las carteras 60/40 se abandonaron con la caída generalizada del mercado del año pasado, la estrategia de inversión predilecta de muchos ha vuelto con fuerza de la mano de la recuperación. Sin embargo, la mayor gestora de activos del mundo, BlackRock, avisa de que esta fórmula se ha quedado obsoleta y de que no será rentable en los próximos años, avivando el debate sobre el futuro de este tradicional enfoque.
"No vemos la vuelta a un mercado alcista conjunto de acciones y bonos como el que vimos en la Gran Moderación", dicen los analistas de la entidad en su última nota semanal. Se refieren al periodo de estabilidad en el que se han movido la economía y la inflación durante varias décadas, en el que funcionaba el planteamiento de que los bonos servían para diversificar de las acciones. Entonces, la renta fija (con un peso del 40%) sí ayudaba como cobertura a las caídas en la renta variable (con un peso del 60%).
Pero el desplome del mercado de 2022 dio al traste con ello. Los bonos de Estados Unidos registraban pérdidas en torno al 13% cuando el año pasado llegaba a término. Los de larga duración lo hicieron todavía peor, al caer un 30%. De hecho, el S&P 500 terminó el ejercicio en terreno bajista y su mejor cierre fue el del primer día del año, el 3 de enero, sesión de la que no consiguió remontar en todo el ejercicio. En este caso, los bonos solo sirvieron para profundizar las pérdidas, y no para compensarlas, la asunción que se hacía hasta entonces.
"Pensamos que las estrategias con esta distribución a cinco años y más allá construidas con estas antiguas asunciones no reflejan el régimen en el que estamos", señalan desde BlackRock. "Creemos en un nuevo enfoque para componer las carteras", subrayan. La inflación y las subidas de los tipos de interés han sido las que han roto con la cartera 60/40 y han abierto el debate.
La postura de la gestora encabezada por Larry Fink es que no hay que mirar tanto los volúmenes de colocación en un punto u otro, sino que hay que centrarse en el enfoque de la cartera. Su visión es que las estrategias tienen que ser menos generalistas, con más concreción por sectores y seleccionando una a una compañías con flujos de caja sólidos. BlackRock defiende incorporar más "matices" a los análisis y actualizar con mayor frecuencia las inversiones. Es decir, la gestión debe ser más activa.
Poner en práctica un nuevo enfoque
Desde el punto de vista específico, la firma explica cómo llevar esas ideas a la práctica, abordando los tres temas de inversión que consideran centrales: si habrá recesión y cuál será su envergadura, repensar los bonos y vivir con inflación.
Una de las claves es saber calibrar cuánto del ajuste monetario ya se ha descontado en los precios. BlackRock considera que la Reserva Federal (Fed) no se va a detener hasta que los daños económicos sean evidentes y, por ende, tiene una muy baja exposición en acciones de mercados desarrollados. "No están reflejando la recesión que viene", matizan. Descartan la renta variable estadounidense, europea, británica y japonesa y dónde sí ven oportunidades es en la china.
En ese sentido, como los bancos centrales no van a salir al rescate con bajadas de tipos, los analistas de la gestora sí recomiendan los bonos a corto plazo y descartan los de vencimientos más lejanos. "Históricamente, los bonos han sido un refugio ante la recesión. Esta vez no", afirman. La razón es que descartan que vayan a llegar estímulos monetarios en el corto plazo, o un tono más blando, y los tipos permanecerán elevados durante más tiempo que lo que actualmente descuenta el mercado. Sí ven retornos en la deuda soberana a corto plazo estadounidense, pero descartan entrar en bonos a largo plazo, tanto de EEUU, como Europa o Reino Unido. Tampoco aconsejan los bonos de grado especulativo.
Por otra parte, BlackRock también contradice las perspectivas de inflación, que considera optimistas. Los precios elevados, como los tipos, se mantendrán en el tiempo. Por ello, recomiendan bonos indexados a la inflación. Asimismo, los estrategas también descartan el que consideran el ya viejo lema de "comprar las caídas" (buying the dip), también desactualizado.
Sin embargo, no todos los gestores consideran que la cartera 60/40 ha pasado a mejor vida. Goldman Sachs sigue defendiendo esa estrategia, pese a que no funcionara el año pasado. En una nota para clientes, explican que el hecho de que las acciones y los bonos caigan al mismo tiempo es algo que ya ha pasado y que volverá a hacerlo en el futuro, pero que es infrecuente y solo ocurre en ocasiones excepcionales. Pese a ese argumento, BlackRock considera que los tiempos han cambiado y, aunque haya sido una fórmula vencedora hasta la fecha, no servirá en adelante.