Bolsa, mercados y cotizaciones
La inflación en máximos de 2008 no moverá al BCE, hasta diciembre
- La cita de la política monetaria es este jueves 28 de octubre
Daniel Yebra
Madrid,
La institución se mantendrá expectante en su reunión del 28 de octubre pese al pico de inflación por la escalada de la energía, según la tradicional encuesta previa a estas citas de la política monetaria de Bloomberg, que sí prevé un anuncio sobre las compras de deuda en diciembre.
La expectativa de inflación a medio/largo plazo alcanza ya el 2% en la eurozona, justo antes de la reunión sobre política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), y presionada por el incremento global del coste de la energía -80% de la inflación en el caso de España, según calcula Oxford Economics- y en plena crisis de suministro por la escasez de bienes intermedios.
Esta expectativa, que se extrae de la escalada del futuro que cotiza sobre la inflación media de los cinco años siguientes a 2026, no crea ninguna urgencia a la institución que preside Christine Lagarde. Está en línea con su objetivo, que recientemente flexibilizó hablando de una tolerancia a periodos por encima, e incluso debería servir para rebajar las alarmas que encienden previsiones como el incremento interanual del 4,4% esperado para el IPC de España en octubre (el dato oficial se publicará el mismo jueves 28 de octubre, mientras que para Alemania se estima otro 4,4%), el máximo avance para los precios desde la Gran Crisis Financiera de 2008.
"Seguimos esperando que el BCE no suba los tipos [de interés oficiales] hasta 2025, como mínimo [están en el mínimo histórico del 0% mientras el Banco de Inglaterra o la Fed ya se plantean aumentarlos]", afirma con contundencia el equipo de analistas de BofA, en un informe en el que se señala que "no es compatible con la dinámica de la inflación y la orientación futura".
La encuesta previa a la reunión del BCE comparte esta afirmación, al menos hasta 2023, en el que se queda el rango de respuestas, y apunta a que Lagarde no hará ningún anuncio sobre los programas de compras de deuda hasta diciembre.
A grandes rasgos, lo que se espera que modifique entonces es que cuando en marzo de 2022 finalice el programa de adquisiciones de bonos de emergencia, que ha permitido que las condiciones de financiación de estados y empresas no ahoguen la recuperación económica, las compras del programa ordinario se aumenten de los 20.000 millones de euros al mes, hasta cerca de 40.000 millones, por lo que la reducción neta de alrededor de 20.000 millones de euros al mes desde abril.
Esta es la hoja de ruta principal, pero no se pueden descartar otras medidas o nuevas herramientas. En los últimos días, el mercado ha conocido por medio de la prensa que los nuevos planes del BCE pasarían por ampliar la capacidad de adquisición de los bonos emitidos por la Comisión Europea para financiar los fondos de recuperación, Next Generation, con los que se pretende apoyar a los países más golpeados por la pandemia.
Cuatro miembros del Consejo de Gobierno del BCE avanzaron al Financial Times que estarían dispuestos a apoyar la ampliación del límite de compras, por encima del 10%, de la deuda emitida por instituciones europeas. La Comisión Europea tiene previsto movilizar 800.000 millones en los mercados hasta 2026. Este año las emisiones, que ya han empezado, ascenderán a 80.000 millones, con el objetivo de duplicar las colocaciones el próximo año.
Salida del 'halcón' Weidmann
Poco después, Jens Weidmann, que pasará a la historia como el gran halcón alemán del BCE (partidario de una política monetaria más rígida, más preocupada del control de los precios y del déficit) en el periodo de recuperación tras la crisis de deuda de 2011, uno de los momentos críticos para la eurozona y para la institución, anunció su retirada como presidente del Bundesbank y por tanto del BCE, antes de que finalizara su mandato, por "motivos personales".
Sin embargo, no son pocos los analistas que destacan cómo el alemán no se siente nada cómodo con el rumbo que ha encarado el BCE en la salida de la pandemia, y apuntan que esto podría tener que ver con la decisión de salir prematuramente del organismo.
"Oficialmente, la salida de Weidmann se produce por cuestiones personales, pero la última carta que ha escrito al equipo del Bundesbank de algún modo explica que se ha sentido incómodo como miembro del Consejo de Gobierno del BCE durante 10 años de políticas acomodaticias", explica Annalisa Piazza, gestora de renta fija de MFS Investment Management.
Al margen de la política monetaria y de la inflación, la próxima semana estará dominada por los indicadores de confianza (ver gráfico) y por los datos de la evolución del PIB de Estados Unidos (jueves) o España y Alemania (viernes 29 de octubre) en el tercer trimestre.