La blindada vida de Jaime de Marichalar tras su divorcio de la infanta Elena: empresario, con amistades de 'élite', y sin novia

Mucha es la opacidad que blinda la vida de Jaime de Marichalar. A sus 61 años, sigue apartado del mundanal ruido mediático, pese a que su figura siga suscitando interés. Pero, ¿qué ha sido del exmarido de la infanta Elena?

Empecemos por el principio. Su boda con la infanta fue la primera boda real española en casi un siglo. Se dieron el 'sí quiero' en una finca en Sevilla para poco tiempo después mudarse a París, donde Jaime trabajaba como banquero. Allí vivieron alejados de los focos hasta el nacimiento de Froilán. Tres años después, volvieron a la capital y fue entonces cuando el exduque de Lugo comenzó su andadura en la moda.

Fue el 13 de noviembre de 2007, cuando la Casa Real anunció la separación de la infanta Elena y Jaime de Marichalar tras una década de matrimonio. Por aquel entonces, era de sobra sabido que ambos llevaban vidas completamente separadas. El divorcio fue un tanto complicado y tormentoso, al igual que el de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín. Hay quienes señalan al ictus que sufrió en 2001 el hijo del conde de Ripalda como el responsable de su cambio de carácter. Sea como fuere, la relación con la infanta Elena nunca llegó a mejorar.

Con quien sí fraguó una bonita amistad fue con Susana Uribarri, representante de Tamara Falcó. Incluso, se le llegó a relacionar con ella sobre un posible romance. Pero nada mas lejos de la realidad. Lo cierto es, que desde que se divorció de la hija del rey Emérito, no ha vuelto a hacer oficial ninguna relación amorosa.

Lo mismo ocurre con la infanta, de quien tampoco conocemos si ha rececho su vida o no. Eso sí, en 2009 se le relacionó con el jinete Jaime Zuleta, que era en realidad su instructor. Si bien, al poco tiempo, se filtró una instantánea de un beso con el monitor de esquí Carlos Ruiz-Velasco, que instruía a sus hijos, Victoria Federica y Froilán, en aquella época.

Lo que sí está claro es, que el exmarido de la infanta se rodea de buena 'casta'. Entre su círculo más íntimo de amistades, se encuentran los joyeros Rosa Mairal y Esteve Rabat, Ana Gamazo y Juan Abelló, Naty Abascal y Isak Andic, el propietario de Mango. Hubo un tiempo también en que se veía en la intimidad con las hermanas Koplowitz.

En la actualidad, sigue trabajando en el sector lujo con su cargo como consejero de varias firmas del gigante LVHM. No obstante, tiene otras fuentes de ingresos como la dirección de una marca de sastrería a medida y su labor como responsable de relaciones públicas de otra firma dedicada al calzado.