Banca y finanzas
Quién es David Martínez, el "fantasma de Wall Street" y accionista significativo de Sabadell que podría ser clave en la OPA de BBVA
- El mexicano se abstuvo en el consejo donde Sabadell rechazó la opa de BBVA
- El banco catalán denuncia al vasco por revelar que grandes accionistas apoyan la operación
Eva Contreras, Lucía Gómez
El empresario mexicano David Martínez, consejero dominical del banco catalán y máximo accionista individual con un 3,49% de su capital, se abstuvo en el consejo de administración donde Sabadell rechazó la oferta de BBVA para conformar el segundo banco del país, con el argumento de que infravaloraba su proyecto y potencial. La decisión del inversor, apodado el "fantasma de Wall Street" o "inversor fantasma", deja en el aire la incógnita sobre su posición y si podría ser uno de los accionistas que BBVA sondeó, con una respuesta positiva.
Precisamente la revelación, por parte del presidente del grupo vasco, Carlos Torres, de que habían sondeado a grandes inversores de Sabadell y habían recibido "expresiones de interés" por su oferta, ha provocado la denuncia del grupo vasco por parte del catalán a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En un hecho relevante, el grupo presidido por Josep Oliu denunciaba que la información proporcionada "vulneran el artículo 32.1 del Real Decreto 1066/2007, de 27de julio, sobre el régimen de las ofertas públicas de adquisición de valores y, en general, introducen datos incompletos que pueden afectar al mercado".
Torres, junto al consejero delegado Onur Genç, mantuvieron dos encuentros con analistas y medios de comunicación para explicar la lógica de la fusión y las ventajas de configurar el nuevo grupo.
Durante ambos encuentros se mostraron positivos sobre la adhesión que pueda tener una opa, previamente rechazada por el consejo de Sabadell, y deslizaron el interés detectado entre inversores, "algunos bastante importantes en la estructura accionarial de la entidad".
El artículo de la normativa que Sabadell denuncia que BBVA ha incumplido establece que el oferente, en este caso BBVA, los miembros de sus órganos de administración y dirección, "sus accionistas de control, sus asesores, las personas con las que actué concertadamente(...) "se abstendrán de difundir o publicar por cualquier medio cualquier dato o información que no conste en el anuncio previo de la oferta". Apela a la CNMV "en aras de que el mercado cuente con información completa y transparente y se garantice un proceso ordenado y correcto".
El magnate mexicano es el mayor accionista individual de Sabadell a través de su vehículo de inversión Fintech Europe. Desembarcó en su accionariado en 2013, en el marco de una ampliación de capital por cerca de 1.400 millones de euros lanzada por el banco liderado por Oliu para reforzar su solvencia, y donde tomó un 5% de participación, idéntica participación de la que tomó el colombiano Jaime Gilinski que desharía posiciones en 2016. En distintas operaciones, Martínez habría invertido unos 375 millones en la entidad.
Es el único inversor con sillón en el consejo, y le siguen por importancia en participación accionarial varios inversores institucionales como BlackRock, que controla un 3,26% en Sabadell y el 9% en BBVA.
Otros que están en ambos bancos son fondos o vehículos como Norges Bank o Vanguard, que poseen más del 3% del capital. Los accionistas clave de BBVA tienen, de hecho, un 21% de la propiedad del banco catalán.
Sabadell carece de núcleo duro y su capital se encuentra muy fragmentado, ya también cuenta con unos 200.379 minoritarios que poseen casi la mitad del capital. Para que la opa resulte exitosa el grupo vasco necesita que se adhieran a la misma los dueños de, al menos, el 50,01% del capital. Con la comunicación ayer de que seguirá adelante se abre un proceso que podría alargarse entre 6 y 8 meses hasta su ejecución final y donde deberá recabar también diferentes autorizaciones regulatorias.