Banca y finanzas
La gran banca de Wall Street otea la recesión y aumenta provisiones: JP Morgan, Wells Fargo y Citi rinden cuentas
- Las subidas de tipos dan lustre a los beneficios, pero golpean a la economía
- Frente a lo esperado, los depósitos subieron en JP Morgan en el trimestre
Mario Becedas, Raquel Enríquez
Los beneficios aguantan, el deterioro económico se dibuja cada vez más en el horizonte. Ese es el mensaje que arrojan los primeros grandes bancos de Wall Street en el estreno de la temporada de resultados del primer trimestre de 2023. Tanto JP Morgan Chase, Citigroup como Wells Fargo han anunciado en sus cuentas que han aumentado las provisiones -el primero en el último año, los otros dos también en estos tres meses- ante el esperado repunte en los créditos dudosos fruto de la desaceleración económica. Las subidas de tipos que han dado brillo a los beneficios se notarán en Main Street.
Con todavía gran parte de la plana mayor de los grandes bancos de Wall Street pendiente de rendir cuentas la próxima semana (Goldman Sachs, Bank of America -BofA-, Morgan Stanley), las entidades americanas abultan el colchón pensando en la recesión que acecha (otra vez) a la mayor economía del planeta.
El mayor banco de Estados Unidos por activos, JP Morgan Chase, ha informado de que sus previsiones para pérdidas por créditos alcanzaron los 2.275 millones de dólares al cierre del primer trimestre de este año. La cifra es un leve 1% inferior a la del trimestre anterior, pero supera en un 56% las provisiones con las que la entidad contaba hace un año. Y es que, el banco americano incrementó sus reservas en 1.100 millones netos y contabilizó otros 1.100 millones de dólares en cancelaciones netas de préstamos.
"Los nubarrones que hemos estado vigilando durante el último año permanecen en el horizonte, y la agitación del sector bancario se suma a estos riesgos", ha advertido el consejero delegado (CEO) de JP Morgan, Jamie Dimon, en la nota de resultados del banco. No obstante, el directivo afirma que la economía de Estados Unidos "sigue gozando de buena salud en general". Pero la amenaza está ahí.
En el caso de Citigroup, las provisiones al final de marzo se acercaron a los 2.000 millones dólares (1.975 millones en concreto), un 7% más que al término de 2022. Al final del primer trimestre del año pasado la cifra era de 755 millones, muy inferior a la actual. De hecho, esta es la más alta desde 2020, según Bloomberg. Entonces los bancos provisionaron por la crisis del covid. Los expertos esperaban que las provisiones de Citi no alcanzaran los 1.900 millones, según las estimaciones de StreetAccount recogidas por CNBC.
Tanto JP Morgan como Citi han 'aumentado sus víveres' en un periodo en el que, respaldados por las fuertes subidas de los tipos de interés en Estados Unidos, sus ingresos y beneficios han crecido más de lo esperado. De hecho, el primero logró una facturación récord de 38.349 millones de dólares, un 25% más interanual y por encima de los 36.190 anticipados por los analistas de Refinitiv. El beneficio neto escaló a 12.622 millones de dólares (+52% en comparación con el primer trimestre de 2022). Asimismo, Citigroup facturó 21.447 millones frente a los 19.986 millones de dólares anticipados y las ganancias netas avanzaron un 7% respecto a un año antes, hasta 4.606 millones de dólares.
El tercero en discordia, Wells Fargo, aumentó hasta 1.207 millones desde 957 millones en diciembre sus provisiones por eventuales impagos de créditos en reacción "al aumento de los préstamos inmobiliarios comerciales, principalmente préstamos para oficinas, así como un aumento en los préstamos a tarjetas de crédito y vehículos", según explican en su presentación. La cifra global choca con el impacto positivo de 787 millones de dólares de un año antes y supera claramente la media de 919 millones de dólares de las estimaciones de los analistas recopiladas por Bloomberg. Este aprovisionamiento supone un 253% de aumento respecto a marzo de 2022 y un 26% respecto al cierre del año pasado.
Del lado de los beneficios, las subidas de tipos también han propiciado a Wells Fargo una buena cosecha. La entidad obtuvo en el primer trimestre del año obtuvo un beneficio de 4.991 millones de dólares, un 32% más a nivel interanual. La compañía logró entre enero y marzo una facturación acumulada de 20.729 millones de dólares, un 17% más alta. Asimismo, los ingresos netos por intereses aumentaron un 45% hasta los 13.336 millones de dólares respecto al mismo trimestre del año pasado.
Sorpresa en los depósitos
También muy esperado en estos resultados era el apartado de depósitos, muy vigilado tras el colapso de Silicon Valley Bank (SVB) el mes pasado. La previsión era que los mayores bancos estadounidenses revelen que los clientes retiraron decenas de miles de millones en depósitos a principios de 2023, incluso cuando muchos de ellos se llevaron sus depósitos a los grandes bancos en busca de mayor seguridad tras la quiebra de SVB y las dudas derivadas en los bancos regionales.
Los analistas preveían que los depositantes que buscan una mayor rentabilidad en alternativas como los fondos del mercado monetario retiraron casi 100.000 millones de dólares en total de JP Morgan, BofA, Citi y Wells Fargo en los tres primeros meses de 2023, según los datos de consenso recopilados por Bloomberg. Los depósitos suelen ser la fuente de financiación más barata de los bancos, por lo que una reducción podría limitar la concesión de préstamos. Los grandes bancos no han dejado de perder depósitos en los últimos 12 meses, a medida que la Fed ha ido subiendo los tipos.
JP Morgan se ha encargado de tumbar esa tesis. La media de sus depósitos subió un 2% en el primer trimestre del año hasta los 2,377 billones de dólares frente a los 2,34 del último trimestre de 2022. Un repunte inesperado de 37.000 millones que ha sorprendido a los analistas.
Por contra, los depósitos totales de Citi descendieron un 3% entre el último trimestre de 2022 y el primero de 2023 a 1,33 billones de dólares, aunque "prácticamente sin cambios con respecto al mismo periodo" del año pasado, destaca el propio banco en su comunicado de este viernes.
En el primer trimestre, Wells Fargo contabilizaba en su balance depósitos por importe de 1.356,7 billones de dólares, un 2% menos que en el último trimestre de 2022 y un 7% por debajo del nivel del mismo trimestre del año pasado. El banco, que junto a otras grandes entidades financieras del país, contribuyó con 5.000 millones de dólares al rescate de First Republic Bank en marzo para evitar que fuera intervenido por las autoridades en medio de la tormenta financiera desatada por la debacle de SVB y Signature Bank, se felicitó por su actuación.