Bolsa, mercados y cotizaciones

El bono de EEUU en el 3,2% vuelve a encender alarmas en la bolsa

    <i>Foto: Archivo</i>

    Isabel Blanco, Cristina García

    En las últimas semanas, Wall Street había digerido sin problema la nueva escalada que venía protagonizando la deuda estadounidense. En un mes y medio, la rentabilidad del bono a 10 años ha pasado del 2,8 al 3,2%, después de que este miércoles registrase el mayor repunte diario desde que Donald Trump ganó las elecciones presidenciales en EEUU. Pero el jueves la bolsa volvió a tensionarse -el S&P y el Dow Jones se dejaban más de un 1% a media sesión y el Nasdaq, más de un 2%- ante un T-Note que siguió marcando máximos no vistos desde 2011. El susto en renta variable ya se produjo en el mes de febrero, de manera mucho más abrupta, cuando el rendimiento que ofrecía el bono a una década se disparó 40 puntos básicos en solo un mes, acechando la cota del 3%.

    "Tarde o temprano tenía que ocurrir. Seguramente el cambio no se producirá de un día para otro, pero es indudable que a medida que vayan subiendo los intereses que ofrecen los bonos, los inversores optarán por esta clase de activo en detrimento de la bolsa", opina Felipe López-Gálvez, analista de Self Bank.

    Los positivos datos macro publicados en EEUU y un petróleo que sigue al alza están presionando a la inflación y a la renta fija, que sigue amparada por las subidas de tipos de la Reserva Federal (Fed). No obstante, desde Unicorp consideran que "los bonos ya han realizado todo o gran parte del recorrido, descontando los próximos movimientos de la Fed. ¿Puede seguir subiendo la rentabilidad de los bonos? Por supuesto que sí y lo harán si la inflación sigue presionando al alza. Pero la mayor rentabilidad actual de estos bonos compensa claramente el riesgo de subida de los tipos. Lo más probable es que se estabilicen en los niveles actuales".

    Pero no solo la deuda de EEUU está repuntando. En Europa, la rentabilidad del bono alemán a 10 años ha subido casi 11 puntos básicos en solo dos sesiones, hasta el 0,53%, máximos de mayo; en precio, este alza implica una pérdida superior al 1%. El rendimiento de la deuda española a una década también ha tocado máximos no vistos desde mayo, al repuntar hasta el 1,56%, con el contexto de incertidumbre en Italia que ha llevado al bono italiano por encima del 3,4% -el miércoles bajó al 3,3%-.

    Los inversores, de hecho, huyeron de la deuda soberana en el pasado mes de septiembre. Prueba de ello es que los fondos de renta fija pública a largo plazo -donde se incluye deuda europea y global- sufrieron reembolsos netos por valor del 1.551 millones de euros, según datos de Morningstar, lo que supuso la mayor salida de dinero de este tipo de productos desde junio de 2015. El pasado mes de enero, los partícipes ya retiraron casi 1.000 millones, por lo que en el conjunto del año ya solo se registran entradas netas de 96 millones de euros.