Bolsa, mercados y cotizaciones
Es hora de dejar madurar la cartera con el EuroStoxx casi en positivo en 2016
- EuroStoxx, Ibex y FTSE Mib son los únicos índices europeos en negativo
- La cercanía a resistencias indica que ya es tarde para entrar en el mercado
Laura de la Quintana, Cristina García
Las bolsas han anticipado el tradicional rally navideño. De las grandes plazas europeas tan sólo restan Madrid y Milán por ponerse en positivo en el año, y eso que el Ibex 35 está ya a un escaso 1,4% (frente a las pérdidas que acumula el Footsie italiano del 11,2%). La clave pasa por que el EuroStoxx 50 lo consiga. El viernes estuvo al borde de hacerlo, pero finalmente se desinfló al ganar un 0,26%, hasta los 3.258 enteros durante el vencimiento del futuro trimestral, con lo que se encuentra a un 0,3% de lograr superar los 3.267 puntos, niveles de inicio del año.
Desde el pasado 4 de diciembre, cuando se celebró el referéndum en Italia -que acabó con la dimisión de su primer ministro, Matteo Renzi-, los inversores se han lanzado a comprar propiciando una subida casi ininterrumpida para el Ibex 35, que supera ya el 9,6%, hasta los 9.412 puntos del cierre de ayer. El mercado comenzó desde entonces a descontar un futuro rescate del banco italiano Monte dei Paschi di Siena y ayudas a todo el sector que podrían rondar los 100.000 millones con dinero público.
A un paso de poner 2016 en 'verde'
¿Es momento de sumarse a la fiesta y entrar en el mercado? Ahora ya no, porque los "deberes deberían estar hechos a estas alturas del rally", reconoce Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader. "Nosotros aumentamos exposición hasta máximos de mayo de 2015 en las últimas sesiones. Ahora, en resistencias, no es momento de comprar", sentencia el experto, sino más bien de disfrutar de la subida porque el Ibex aún tiene recorrido. La clave pasa por que el selectivo nacional "consolide los 9.360 puntos, lo que podría allanar el camino a que también consiga poner el contador a cero en el año", afirma. Para ello, debe colocarse por encima de los 9.544 puntos, desde los que comenzara 2016. Y tiene para cumplir este objetivo todavía nueve sesiones que restan de año. Según el experto, sólo las correcciones podrían ser utilizadas para mover la cartera.
Las bolsas afrontaron este viernes la última cuádruple hora bruja (vencimiento de opciones y futuros sobre índices y acciones a nivel mundial) del año con más ganancias que fueron particularmente significativas en la bolsa española, al anotarse un 2,6% en la semana, y en el Footsie milanés, que sumó casi un 4%. Desde que los inversores se prepararon para el último (posible) cataclismo de 2016 ante la votación en Italia, los mercados protagonizan una subida vertical que vino a rematar la Reserva Federal estadounidense esta semana. La presidenta del organismo, Janet Yellen, anunció -siguiendo el guión- una subida de 25 puntos básicos en los tipos de interés americanos gracias a una "mayor fortaleza de la economía", tal y como reconoció. El día anterior, el pasado martes, el tecnológico Nasdaq 100 fue la última carta sobre la mesa en darse la vuelta y batir sus propios máximos históricos -hasta entonces en 4.909 puntos-. Con Wall Street en altos nunca antes vistos, en Europa falta el último empujón, siendo el Mib el más alejado de todos ellos. En quince días, el sectorial bancario suma un 10,66%, siendo el segundo más alcista sólo por detrás del automovilístico (que se anota un 10,87%). Esto se traduce en el Ibex en subidas del 20,65% para Bankia, el título más alcista del selectivo en la quincena, que ha recuperado el euro por acción. De hecho, seis de los siete bancos del Ibex se encuentran entre las diez mayores subidas desde entonces.
Deuda americana
Pero más allá de la renta variable, la subida de tipos lanzada por la institución que capitanea Janet Yellen también tuvo consecuencias en el mercado de deuda americana. Abierta la veda para normalizar el precio oficial del dinero y con expectativas de inflación cada vez más elevadas, los inversores han continuado deshaciendo posiciones en los bonos soberanos del país. Al revés que en la bolsa, la rentabilidad de este activo sube cuando su precio cae y la del americano a 10 años ha repuntado en una semana del 2,46 al 2,55%. Lo que se traduce en pérdidas latentes del 0,75%.
Lejos de tratarse de un castigo puntual, el aviso a navegantes es claro: este cambio de tendencia ha llegado para quedarse. "Las subidas de tipos de interés a largo plazo seguirán reduciendo el atractivo de la deuda pública, con rentabilidades nominales en deuda del Tesoro de EEUU negativas. Además el potencial es limitado en deuda empresarial, sobre todo crédito grado de inversión", señalan desde Pictet WM.
La divergencia de políticas aplicadas por los distintos bancos centrales explica que, a diferencia de lo que ha pasado en la deuda americana, en el mercado europeo hubiese compras. Una vez asumido que el BCE pisará el freno de su QE (programa de estímulos), la rentabilidad del bono español a una década bajó del 1,51 al 1,44% en la última semana. Una fotografía que se repite en el resto de referencias de la eurozona: el interés del Bund se redujo del 0,36 al 0,31%; el de Italia, del 2,04 al 1,87% y el de Francia, del 0,81 al 0,76%.