Bolsa, mercados y cotizaciones

El desplome del mercado devuelve la rentabilidad por dividendo del Ibex 35 al 5%

Dreamstime

Violeta N. Quiñonero
Madrid ,

El llamado por la administración Trump como El Día de la liberación parece no estar liberando a los mercados. Desde que el presidente los Estados Unidos anunció de forma oficial su política arancelaria, los mercados bursátiles han sufrido un reguero de sangre. En apenas tres sesiones, el Ibex 35 se dejó más de un 10% de su valor. Pero una situación, por muy oscura que pueda parecer, alberga ciertos resquicios por los que la luz logra hacerse hueco. En el caso del índice nacional, las últimas y fuertes caídas han provocado que su dividendo vuelve a ofrecer más de un 5% de rentabilidad.

Una guerra contra todo el mundo. Esa ha sido, en esencia, la hoja de ruta de la política de Trump, que ha impuesto un arancel mínimo del 10% a cualquier país del mundo. Este porcentaje se agrava hasta el 20% para los países miembros de la UE y hasta el 54% en el caso de China (este lunes, el presidente de EEUU volvió a amenazar con imponer otro impuesto del 50%, sumando un arancel total del 104%). Unas directrices que complican el comercio y las relaciones internacionales y que hacen prever que las economías ralentizarán su crecimiento.

Parecía que los mercados esperaban que Donald Trump se comportase como en su primer mandato, con muchos ladridos, pero pocas mordeduras. Pero el trumpazo ha sido más fuerte de lo esperado y los mercados han cortado de tajo el importante avance que acumulaban. Pese al rebote que se produjo en las bolsas mundiales este martes y en el que el Ibex 35 recuperó un 2,4% de su valor (su mejor sesión desde octubre del 2022), desde que Trump hizo públicos los impuestos, el índice nacional se deja un 9% de su valor y retrocede hasta la zona de los 12.000 puntos (llegó incluso a ceder este nivel el lunes). En las escasas sesiones que acumula abril, sufre pérdidas por valor de 8% y, de cerrarse ahora mismo el mes, este sería su peor saldo mensual desde junio del 2022, en plena crisis energética.

Más allá de estas últimas subidas, sigue existiendo el factor Trump y la incertidumbre y volatilidad que genera en el mercado. "Si bien hemos sostenido durante mucho tiempo que Trump es tanto el hombre de las transacciones como el hombre de los aranceles y podríamos verlo finalmente haciendo acuerdos para suavizar los aranceles individualizados más altos, nuestra opinión es que: los aranceles más altos se implementarán según lo programado y no habrá desgravación arancelaria en el muy corto plazo", opinan desde PIMCO. "No hay que hacerse ilusiones. No es postureo, los aranceles están aquí para quedarse", alertan. En estos momentos de temor, la inversión por dividendos aporta cierto amparo a la sangría bursátil, pues es una forma de asegurarse una mínima rentabilidad del capital invertido.

La atractiva rentabilidad por dividendo que ofrece el Ibex 35 es todo un clásico. No harían falta comparaciones, pero si el retorno del índice nacional se confronta con el del resto de sus pares europeas, este reclamo se vuelve aún mayor. Tras los desplomes, el Ibex 35 ha vuelto a ofrecer un dividendo de un 5% de rentabilidad. Cabe destacar que, aún con los retrocesos de las últimas sesiones, la retribución del índice español alcanza esta rentabilidad aún con su cotización en máximos de 2008 (el atractivo, siempre y cuando se mantenga la retribución estable, es mayor según cae la acción).

La última vez que el Ibex 35 ofreció esta rentabilidad fue el pasado agosto, cuando se produjo uno de los sustos del mercado (tras las intensas caídas que se produjeron en la bolsa japonesa) que llevó al índice nacional a corregir hasta los 10.390 puntos.

A nivel europeo, solo la bolsa italiana supera el rendimiento de su retribución. En el caso de esta útlima plaza, su dividendo incluso supera el 6% de rentabilidad. Cabe destacar que, en su caso, hunde su cotización ya un 3% en el año. Más allá de italiana, la ventaja que saca España por dividendos con respecto a otros mercados del Viejo Continente es más que notable. Saca más de un punto de rendimiento a selectivos como el Cac o paneuropeo EuroStoxx 50 y casi dos puntos a la bolsa alemana, la única que, junto con el Ibex, consigue seguir subiendo en el ejercicio.

La diferencia se amplía incluso más si se traslada la mirada a Wall Street. Allí, y teniendo en cuenta también la intensa huída de inversores que se vive, los dividendos del S&P 500 y el Nasdaq 100 rentan un 1,6% y 1% respectivamente. En este último caso, cabe señalar que las firmas estadounidenses suelen escoger la fórmula de recompra de acciones frente al dividendo como manera de retribuir a sus inversores.

La capacidad de retribuir de las cotizadas españolas, repartiendo sus beneficios con los accionistas a través del dividendo no deja de demostrarse año a año. En 2024, según BME (Bolsa y Mercados españoles) las compañías distribuyeron un total de 37.507 millones de euros, un 25% más que en 2023. Así, 2024 fue el mayor ejercicio de retribución, superando incluso el ejercicio de 2019 cuando alcanzaron los 31.705 millones de euros.

Actualmente, el payout (porcentaje de los beneficios que se destina al dividendo) del Ibex 35 para 2025 supera ligeramente el 56%. Así, según el consenso de mercado, el Ibex 35 repartiría este año 584,63 euros por cada acción en forma de dividendos. Esta cuantía es la más alta en más de una década, concretamente desde 2014 cuando la retribución superó los 833 euros.

Y, si algo asegura la inversión en el dividendo del Ibex 35 es un crecimiento en el medio plazo. Para 2026, los expertos fijan la retribución en los 623,45 (un 7% más que este año) y la cifra alcanzaría los 662 euros por acción para 2027. Sobre niveles actuales, la rentabilidad de estos montos se sitúa en el 5,3% y 5,6% respectivamente.

Firmas que rentan más de un 5%

Por nombres propios, hasta 17 compañías de las 35 que recoge el principal índice de la bolsa española ofrecen dividendos con rentabilidades de más del 5%. Entre todas ellas (y en parte como consecuencia de la intensa corrección que acumula su cotización) sobresale la rentabilidad del pago de Repsol, que supera el 10%, la única a doble dígito del índice. La compañía petrolera está sufriendo la fuerte corrección en los precios del petróleo y, desde que Trump anunció los aranceles, su cotización se desploma un 17,5%.

La banca también ocupa un lugar especial en el podium de rentabilidades de los dividendos. Las perspectivas de una economía más debilitada que obligue a los bancos centrales a actuar con bajadas de tipos más rápidas y contundentes también está dañando el comportamiento de la banca. Banco Sabadell cede un 14,2% desde el pasdao 2 de abril, lo mismo que cede Unicaja. Sin embargo, con estos retrocesos, las rentabilidades de sus dividendos superan el 8%. Con más de un 7% de rentabilidad, también se hallan los dividendos de Enagás, BBVA, Logista y Telefónica.