Bolsa, mercados y cotizaciones
Los tres grandes bancos centrales aligeran su balance un 9% a la par que recortan sus tipos en 2024
- Al ritmo actual, el BCE tardaría ocho años en reducir su balance al nivel preCovid
- La Reserva Federal de EEUU es el que retira más dinero del mercado en 2024
- La Fed puede retirar del mercado 2,2 billones de dólares solo con deuda hasta 2030
Sergio Fernández
Los bancos centrales han retirado del mercado miles de millones de dólares, euros y libras esterlinas este 2024. De media este año, el Banco Central Europeo, la Reserva Federal de Estados Unidos y el Banco de Inglaterra han aligerado su balance un 9% mientras recortan sus tipos de interés en pleno proceso de flexibilidad monetaria. Pero aún queda un largo camino para llegar a los niveles de pasivo con el que contaban antes del 2020.
Aunque el Banco Central Europeo (BCE) o la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) no tienen la obligación de recuperar los niveles previos al estallido de la pandemia, el control de la inflación y la estabilidad financiera en la eurozona y Estados Unidos sí exigen continuar con la reducción de deuda del pasivo de los bancos centrales. Porque recuperar la normalidad monetaria con las bajadas de tipos (se considera una política expansiva) tiene que ir de la mano de sanear las cuentas de los bancos centrales (política restrictiva).
El balance del BCE se expandió hasta los 8,83 billones de euros que alcanzó el junio de 2022 principalmente por la compra de deuda soberana de los Estados miembro de la Unión Europea y préstamos de emergencia concedidos. El mandato de Chirstine Lagarde consistió hasta ese momento en dotar de mayor liquidez al mercado con programas como el PEPP o el TLTRO. Hoy el objetivo del BCE sigue siendo el de garantizar el crecimiento de la economía de la eurozona sin perder de vista el control de la inflación. Es decir, seguir recortando los tipos de interés pero dejando vencer esa deuda europea en posesión del banco central para que el euro no pierda valor en el proceso.
En lo que va de 2024, el BCE ha retirado 568.000 millones de euros del mercado. La deuda soberana que compró el Banco Central Europeo con sus programas de compra de activos de emergencia tienen diferentes vencimientos que dilatarán en el tiempo la reducción del pasivo de la institución. Ya en 2024 se ha reducido el mismo un 8,3% frente al 12,8% del 2023. Es decir, aflojó el ritmo en los últimos doce meses en los que llegaron los primeros ajustes a la baja en el precio oficial del euro.
El analista de Bloomberg, David Powell, considera que el BCE aún debería reducir su balance en 4 billones de euros en base al criterio propuesto por el FMI que sugiere estar en un rango de 1,8 a 2 billones de euros en el medio plazo. Solo con el TLTRO (operaciones de financiación a largo plazo con objetivo específico) hay 1,1 billones de euros en juego. "El resto del ajuste deberá provenir de la reducción de las tenencias de bonos del BCE. Al ritmo actual, esto podría llevar ocho años", comentó el experto de Bloomberg.
Este cálculo está basado en que el BCE mantenga su ritmo el año que viene. De media, la institución ha recortado su balance en 2024 en 47.000 millones de euros al mes, casi la mitad que el ritmo del 2023. El miembro del comité de inversiones de Carmignac, Kevin Thozet, espera que el ritmo de reducción del balance oscile en los 40.000 millones de euros al mes en un 2025 que "está llamado a ser otro año récord de oferta de deuda pública con trayectorias de déficit difícil en países como Francia", opinó el experto. Si el BCE buscara igualar su marca a lo visto antes de la pandemia aún haría falta un recorte adicional del 27%, lo mismo acumulado desde el máximo de 2022.
La Fed se mueve con mayor inercia
¿Tiene la Reserva Federal un camino diferente al del BCE? Lo cierto es que no. Aunque es la institución europea la que más saneó su balance desde su máximo de los últimos cinco años, es la Fed la que más dinero sacó del mercado en 2024 en proporción. La institución presidida por Jerome Powell rompió el mes pasado la referencia de los 7 billones de dólares y mantiene un ritmo medio de drenaje de liquidez de 65.000 millones de dólares al mes (785.000 en 2024 a falta de dos semanas para finalizar el ejercicio).
Es decir, la Reserva Federal mantiene el mismo ritmo de recortes mes a mes desde el año pasado, que incluye un repunte en marzo de 2023, cuando se produjo la crisis de Sillicon Valley Bank y que ejemplifica cuán flexible es la política monetaria de un banco central. Si mantuviera este ritmo y quisiera llevar el balance a los 4,19 billones de dólares que tenía antes de la crisis del coronavirus necesitaría otros 44 meses. Es decir, no sería hasta julio de 2028 cuando conseguiría esta meta.
Pero Powell ni tiene por qué llegar a esa cifra ni toda la deuda comprada por la Fed vence de manera progresiva. También puede refinanciar parte de la misma en lugar de liquidarla en su fecha de vencimiento. Con datos a cierre de noviembre, la vida media de la deuda en manos de la Reserva Federal es de 14,6 años hasta su vencimiento.
En lo que respecta a deuda soberana, solo en 2025 vencen 0,7 millones de dólares en bonos soberanos de Estados Unidos, principalmente títulos a tres años que se emitieron en los primeros meses del 2022, cuando los tipos aún estaban por debajo del 2%. La Reserva Federal de Estados Unidos puede reducir su balance en 2,26 billones de dólares solo dejando vencer toda la deuda de EEUU en su haber desde aquí a 2030.
El Banco de Inglaterra (BoE) tampoco tiene un camino diferente, aunque sí un horizonte menos favorable, según el consenso de expertos. "Creemos que el Reino Unido evitará la recesión en 2025, aunque el crecimiento será marcadamente lento y vendrá acompañado de un notable aumento del desempleo. No cabe duda de que el Tesoro está desconcertado por la reacción al Presupuesto, y se rumorea que está considerando 'reprogramar' algunos de los incrementos más significativos en el gasto público planificado", comentó el economista jefe para EMEA de Columbia Threadneedle Investments, Steven Bell.
Si bien la inflación, el crecimiento de la economía británica y el mercado laboral nacional no discurren en la misma línea que en la eurozona o en Estados Unidos, la reducción de balance mantiene un ritmo similar al de sus principales pares.
A falta de dos semanas para cerrar el 2024, el BoE redujo en lo que va de año su balance en un 9,3% hasta los 8,8 billones de libras esterlinas (pasivo total que incluye también valores públicos emitidos en divisa extranjera). Solo en deuda soberana británica, la institución tiene más de 14.800 millones de libras esterlinas, un 17% menos que en su punto álgido.
En otro plano está el Banco de Japón, que está en pleno proceso de endurecimiento de la política monetaria del yen nipón. A cierre de noviembre el balance del BoJ representa el 124,9% del PIB nacional. Los bonos y letras en manos de este banco central ascienden sobre los 3,7 billones de euros al cambio, lo que convierte al Banco de Japón en el banco central que más deuda soberana tiene en su poder solo por detrás de la Fed.