En el tercer aniversario del fallecimiento de Isabel II, la familia real británica concentra la atención mediática. Lo que parecía una jornada marcada por el regreso del príncipe Harry a Reino Unido ha terminado girando en torno a la inesperada reaparición de Kate Middleton, que ha acompañado al príncipe Guillermo en un acto oficial en Sunningdale. El recuerdo de Isabel II, tres años después de su fallecimiento, es un punto de unión para la monarquía y un telón de fondo que deja al descubierto las divisiones familiares.
Mientras Guillermo y Kate reivindican el legado de la soberana a través de actos oficiales cargados de simbolismo, Harry mantiene viva su conexión con causas sociales en el Reino Unido, aunque desde una posición cada vez más externa. En este delicado equilibrio, la sorpresa de la jornada es la figura de Kate Middleton. Su reaparición eclipsa la llegada de Harry y devuelve a la princesa al centro del escenario público en un momento clave para la monarquía británica.

La princesa de Gales, vestida de oscuro en señal de respeto tras la reciente muerte de la duquesa de Kent, se unió a su esposo en una visita a la Federación Nacional del Instituto de la Mujer, la mayor organización femenina del país. El gesto tuvo un profundo simbolismo: Isabel II fue miembro de esta institución desde 1943, cuando tenía apenas 17 años, y llegó a presidir el Instituto de Mujeres de Sandringham desde 2003 hasta su fallecimiento.
Su participación nunca fue meramente protocolaria, ya que acudía regularmente a reuniones y respaldaba con entusiasmo la labor de la organización. La aparición de Kate fue inesperada, dado que la prensa británica había anticipado que sería Guillermo quien acudiría en solitario. La decisión estratégica de los príncipes de Gales situó su agenda oficial en las inmediaciones de Windsor, precisamente el lugar al que también se desplazaba Harry para rendir tributo a su abuela.
El regreso del duque de Sussex a Londres coincidió con esta reaparición pública de su cuñada
El regreso del duque de Sussex a Londres coincidió con esta reaparición pública de su cuñada, lo que inevitablemente generó comparaciones. Harry inició su visita en el Castillo de Windsor, donde reposan los restos de Isabel II, antes de dirigirse a los WellChild Awards, una gala benéfica en la que colabora desde hace 17 años y que apoya a niños con enfermedades graves y a sus familias. Durante el evento, el príncipe debía entregar el premio al "Niño Inspirador" en la categoría de 4 a 6 años y pronunciar un discurso.

Además, estaba previsto que compartiera una recepción privada con los galardonados y sus familias, reforzando su vínculo con causas sociales a pesar de residir en Estados Unidos desde 2020. La agenda de Harry continuará en Nottingham, donde anunciará una donación a Children in Need y visitará el Community Recording Studio, una iniciativa que utiliza la música y el cine para impulsar la inclusión social de jóvenes en situación vulnerable. Para muchos, este viaje supone un regreso a la vida que dejó atrás como miembro activo de la realeza británica.
Pese a la relevancia de los compromisos de Harry, fue Kate Middleton quien se llevó los titulares. La princesa había reducido significativamente sus apariciones públicas en los últimos meses, por lo que su participación junto a Guillermo fue interpretada como un mensaje de fortaleza institucional. La elección de un acto vinculado al legado de Isabel II reforzó la imagen de continuidad que los príncipes de Gales buscan proyectar. Los medios británicos destacaron también la cercanía del lugar elegido, Sunningdale, con la residencia oficial de los Gales en Windsor. Aunque no hubo declaraciones públicas sobre el regreso de Harry, la coincidencia de agendas evidenció la distancia que persiste entre los hermanos.
Relacionados
- Kate Middleton reaparece tras su llamativo cambio de look: de luto y con un nuevo matiz en su melena
- Kate Middleton y el príncipe Guillermo recuerdan a la duquesa de Kent: "Trabajó de forma incansable en beneficio de los demás"
- Sara Carbonero reacciona al cambio radical de Kate Middleton y lamenta el odio: "Se ha abierto un debate sobre si lleva peluca o no"
- Radical cambio de look de Kate Middleton en su vuelta al trabajo: melena rubia extra larga y esas ondas surferas infinitas