Harry y Meghan reaparecen en televisión tras su explosiva entrevista con Oprah Winfrey: "Solo queremos proteger a nuestros hijos"

Tres años después de que hicieran temblar los cimientos de la monarquía británica con una entrevista en la que hablaban de suicidio, racismo y desesperación, Harry de Inglaterra y Meghan Markle vuelven a sentarse juntos frente a las cámaras de televisión. Eso sí, sus palabras, a diferencia de las que confesaron a Oprah Winfrey en marzo de 2021, serán mucho más amables, pues los duques de Sussex han decidido dar voz a una campaña para proteger a los menores de los peligros 2.0.

Vestidos de manera informal (él con camisa blanca y chaqueta, ella con un conjunto en tono maquillaje) y sentados en dos sillas, Harry y Meghan aparecerán el próximo domingo en Sunday Morning, programa de la CBS. El matrimonio protagoniza una distendida charla con la periodista Jane Pauley, a la que recibieron en su propia casa y con la que compartieron su preocupación por los peligros que el mundo virtual supone para los más jóvenes. Su fundación benéfica, Archewell Foundation, abandera este proyecto junto a la organización The Parents Network, que apoya a los padres cuyos hijos han sido afectados por daños "en línea".

El matrimonio habla de sus dos hijos, Archie y Lillibet. No suelen hacerlo pero la ocasión obliga: "Nuestros hijos son pequeños, tienen 3 y 5 años. Son increíbles y lo único que quieres hacer como padre es protegerlos", dice Harry de Inglaterra. "Y como podemos ver lo que está sucediendo en el espacio en línea, sabemos que hay mucho trabajo por hacer allí", resalta. El hijo de Carlos III añade: "Es importante saber cómo ayudar. Los padres deben ser los primeros en responder al problema, porque ni siquiera los mejores 'socorristas' del mundo podrían detectar las señales de un posible suicidio", continuó. "Esa es la parte aterradora de esto".

Hay que recordar que Harry y Meghan confesaron, en aquella famosa y polémica entrevista con Oprah Winfrey, haber vivido muy de cerca el suicidio. Lamentablemente, fue una idea que pasó por la cabeza de la duquesa durante su época más oscura en Buckingham: "Quería quitarme la vida. Pensaba que todo se acabaría y eso era lo que más miedo me daba, que lo veía muy claro", dijo entre lágrimas hace tres años. "Ella estaba destrozada, los dos sufríamos, pero no pensé que llegaría a ese nivel", dijo él.