Empresas y finanzas
El heredero de Carrefour se une en Dia a dos empresarios españoles tras la OPA lanzada por Fridman y alcanzan el 3,25% del capital
- Gregoire Bontoux y los hermanos Gómez-Pablos firman un pacto accionarial
- Se convierten en los terceros accionistas, por detrás de LetterOne y Goldman
- ¿Serán los caballeros blancos que busca la cadena para defenderse de Fridman?
Ana Míguez, Javier Romera, Laura de la Quintana
Ajetreo en el capital de Dia. Tres accionistas institucionales de la cadena de supermercados han anunciado una acuerdo de sindicación (unión de sus acciones) para formar un bloque accionarial del 3,25%. Pero, ¿quiénes son esos inversores? y ¿qué pretenden? Todo ello se produce después de la OPA planteada por el inversor ruso Mikhail Fridman, dueño del 29% de la cadena de supermercados.
En este pacto accionarial destaca Gregoire Bontoux, que a través de su sociedad Naturinvest tiene un 2,94% de Dia. Pero ¿quién es? Gregoire Bontoux es miembro de la familia Bontoux, una rama perteneciente al Clan Halley e histórico accionista de referencia de Carrefour.
Pues bien, Gregoire Bontoux se ha unido a otros accionistas de Dia: los hermanos Pablo y Pedro Gómez-Pablos Calvo (a través de Altocapital) que poseen un 0,221% y un 0,088%, respectivamente, y que se dedican al sector inmobiliario. La suma de todos ellos alcanza el 3,2496% y se convierte en el tercer accionista, por detrás de LetterOne (29%), vehículo inversor de Fridman, y Goldman Sachs (5,3%).
Pero, ¿qué pretenden con esta alianza? A la espera de los detalles, los accionistas han suscrito un acuerdo de sindicación para aunar la dirección de su voto. "Dicho acuerdo supone la constitución de un bloque accionarial subordinado a un proceso de toma de decisiones conjunta representativa de un porcentaje superior al 3% de los derechos de voto de la entidad", han señalado los tres accionistas.
Fuentes del mercado consultadas por elEconomista apuntan que la intención de estos accionistas, que ya han comunicado al consejo el acuerdo, pasa por defenderse de las garras del ruso Fridman, que trae una oferta insuficiente y una ampliación de capital de 500 millones. En particular, estarían buscando apoyos de otros minoritarios de cara a hacer presión e incluso preparar una contraoferta, aunque las mismas fuentes detallan que "es algo muy complicado".
Las cifras de la sociedad de Bontoux tampoco acompañan demasiado. Naturinvest tiene el domicilio fiscal en Luxemburgo, aunque tiene también sede en Madrid. Sus activos a 31 de diciembre de 2017, según las últimas cuentas depositadas en el Registro Mercantil de Luxemburgo, se elevan a poco más de 110.000 euros. Ese año la sociedad registró sin embargo pérdidas por importe de 206.286, arrastra números rojos de ejercicios anteriores de 26,5 millones y tiene deudas por importe de más de 20 millones de euros.
Por su parte, Altocapital Inversiones, la sociedad de Pedro Gómez-Pablos, suma activos de 11,4 millones de euros y un patrimonio neto de 3,7 millones al cierre de 2017, el último año con datos publicados.
Cifras empresariales al margen, el papel de los minoritarios es clave para el futuro de la cadena de supermercados. Estos inversores, que suman un 20% del capital, tienen en su mano evitar, entre otras cosas, que LetterOne pueda sacar de la bolsa española a la compañía.
De hecho, el enfado de los minoritarios es mayúsculo y más con la CNMV. A su juicio el regulador ha mantenido una postura de "inacción" ante los movimientos de Fridman, algo que la institución dirigida por Sebastián Albella niega y apunta que investiga "todos los ángulos". No obstante, la CNMV sí reconoce que por el momento no ve irregularidades en la oferta.
A la espera de confirmar si Bontoux y los hermanos Gómez-Pablos serán el caballero blanco que busca la compañía, Dia guarda la baza de Luis Amaral. El empresario portugués, exdirectivo de Unilever, entrço recientemente en el capital de la cadena de supermercados con alrededor de un 1%
Amaral, que ha mantenido ya relación en el pasado con la compañía española en temas financieros, desembarcó en el accionariado, posicionándose en principio del lado del equipo gestor que encabeza Borja de la Cierva.
El consejo de administración de Dia decidió ayer posponer su opinión sobre la OPA de LetterOne hasta que la misma sea autorizada y se publique el folleto explicativo al tener dudas sobre el aumento de capital por importe de 500 millones de euros propuesto cuando se cierre la operación. Sin embargo, según ha podido saber elEconomista, el consejo de opone al plan de Fridman al no ofrecer garantías.