Elecciones Generales
Lo que Sánchez ha escuchado y va a escuchar en sus reuniones en Moncloa con Casado, Rivera e Iglesias
- Los tres acuden con recelo, pero con cosas que decirle a Sánchez
Mario Becedas
Madrid,
Los encuentros que el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, mantendrá entre este lunes y este martes con los líderes de PP, Ciudadanos y Podemos han causado cierto recelo entre las tres formaciones. Si desde PP y Ciudadanos ven un afán de protagonismo del líder del PSOE tras el 28-A, en Podemos recelan del encuentro al no haberles convocado a ellos primero como socio preferente.
Desde Moncloa, sin embargo, se asegura que las reuniones son una forma de tantear vías de diálogo para asuntos de Estado después de meses con relaciones rotas entre el Gobierno socialista y los partidos a su derecha. En cualquier caso, pese a los recelos, tanto Pablo Casado como Albert Rivera y Pablo Iglesias tienen cosas que decirle a Sánchez.
Casado: ambigüedad calculada
Casado ha sido el primer líder político convocado por Sánchez en Moncloa. El líder del PP ha aceptado la invitación del presidente después de haber acudido una sola vez, el pasado 2 de agosto. Aquel día se evidenció que no habría acuerdos y poco después se rompían las relaciones entre ellos.
En esta ocasión, tras poco más de hora y media de conversación este lunes -en la ocasión anterior fueron tres-, Casado le ha planteado a Sánchez una posible futura colaboración en temas de Estado siempre y cuando el socialista consiga superar una investidura en la que el PP no piensa apoyarle ni con una abstención en la segunda vuelta.
Sin entrar en reproches personales, Casado en una intervención "prudente" y con una ambigüedad calculada ha instado a Sánchez a no apoyarse en los independentistas para ser investido, dejando la puerta abierta a que esa responsabilidad recaiga en Ciudadanos. De la misma manera, el presidente del PP se ha erigido en líder de la oposición asegurándole a Sánchez que la va a ejercer de manera "firme".
Aunque la previsión del PP era que Casado afease a Sánchez su línea fiscal a seguir pidiéndole bajadas de impuestos, el 'popular' tan solo se ha referido a la previsión del Gobierno de subir los impuestos en 26.000 millones esta legislatura afirman que "ésa no es la receta".
Rivera: quiere liderar la oposición
Rivera ha aprovechado la invitación del presidente del Gobierno en funciones a la Moncloa este martes para escenificar su distancia con el jefe del Ejecutivo en una reunión que apenas ha durado 50 minutos y en la que le ha transmitido que no apoyarán su investidura.
Con un tono claramente más beligerante que el empleado por Casado tras su encuentro con Sánchez, Rivera ha comparecido al término de la cita ante los medios para dejar claro que quiere marcar terreno como líder de la oposición y que las "discrepancias" con el PSOE en temas como Cataluña o la fiscalidad son más que severas.
Rivera ha revelado que en la cita ni siquiera ha dado pie a Sánchez a pedirle su apoyo, ya que desde el inicio le ha planteado que, aunque respetan el resultado del 28 de abril, rechazan favorecer su investidura: "Se lo he dicho personalmente y lo sabe toda España".
En este punto, ha incidido en que pretende encabezar una "oposición leal, firme, sin mochilas y sin complejos". "El día que se desmorone el Gobierno de Sánchez tiene que haber una alternativa, más aún con la descomposición del PP", ha enfatizado.
Iglesias: insistirá en un Gobierno mixto
Pablo Iglesias acude también este martes a las 17:00 horas a Moncloa con la mosca detrás de la oreja. En Podemos esperaban que Sánchez los llamara los primeros para empezar a fijar posiciones de acuerdo más allá de la pretensión de los socialistas de dejar correr el reloj hasta después del 26-M para empezar a negociar a fondo.
En todo caso, Iglesias tiene previsto tender la mano a Sánchez para conformar un "Gobierno estable y progresista" incidiendo en que la mejor fórmula es la entrada de Podemos en el Ejecutivo con varios ministerios y segundos niveles. Una solución que no satisface a un PSOE que defiende que si con 84 diputados gobernó en solitario, ahora tiene aún más motivo, y que propone empezar por un acuerdo programático.
Tras el Consejo Ciudadanos Estatal celebrado este lunes, Iglesias se ha reiterado en su pretensión, si bien ha añadido como coda que el gobierno de coalición que reclama será proporcional a los escaños que tiene y que en las negociaciones se dejarán atrás tanto la "arrogancia" como las "líneas rojas".
Aunque en los últimos meses Iglesias ha acudido repetidamente a Moncloa para negociar directamente con Sánchez los Presupuestos que finalmente cayeron, la cita de este martes cobra especial interés, porque será el primer careo entre ambos líderes tras un 28-A que les obliga a entenderse igual que estos meses, pero con distinto reparto de cartas.