Banca y finanzas

César González-Bueno (Sabadell): "Integrar las plataformas BBVA-Sabadell implicará una pérdida de 1.000 millones"

  • El dividendo: "No creo que haya precedentes de un reparto al accionista del 26% de la capitalización en 12 meses"
  • La operación de TSB: "Si no la hubiésemos vendido, habríamos tenido que invertir sustancialmente"
César González-Bueno, consejero delegado de Banc Sabadell. Kike Rincón

Matteo Allievi, Carles Huguet
Barcelona,

Tras más de un año con la opa de BBVA sobre la mesa, César González-Bueno (1960, Madrid) está viviendo un verano intenso. El Sabadell, el banco que pilota, acaba de presentar su nuevo plan estratégico trienal, en el que ha lucido el músculo financiero de su proyecto en solitario, con ambiciosas promesas de rentabilidad y dividendos. A la nueva hoja de ruta se sumarán la próxima semana dos juntas de accionistas clave para aprobar la venta de TSB y el macrodividendo de 2.500 millones relacionado; citas que pueden considerarse como un termómetro para medir el apoyo de sus propietarios ante la oferta no solicitada, a la que decidirán si acudir en septiembre. A la espera de ver su respuesta lanza una advertencia a los inversores: las sinergias han pasado a cero e integrar las plataformas de los dos bancos implicará una pérdida instantánea de 1.000 millones, impidiendo sacar el máximo partido de las cuentas de las entidades y contraviniendo así a la autonomía de gestión impuesta por la resolución del Gobierno.

¿Por qué cree que BBVA ha retrasado el comienzo del canje a septiembre?

El folleto es complicado: hay que armarlo con nuestros resultados, la resolución del Gobierno, la venta de TSB, y sus propios resultados. Hay que rehacerlo completamente respecto a las hipótesis iniciales, que decían que sin fusión las sinergias serían parecidas a las que habían con fusión. Las condiciones del Gobierno son muy claras. La autonomía de gestión, que dice que hay que maximizar los resultados individuales de las dos entidades, no es compatible con las sinergias, que han pasado a cero.

¿Y no se obtendrían con la integración de las plataformas?

Integrar la plataforma del Sabadell en BBVA implicaría una pérdida instantánea de 1.000 millones, porque cuando dejas de utilizar una plataforma la tienes que amortizar. Eso no es maximizar los resultados individuales de cada una de las entidades. Además, los productos específicos del Sabadell desaparecen. No estás cumpliendo el mandato de la autonomía de gestión y sería contravenir lo que establece la resolución del Consejo de Ministros en fase 3.

¿Cree que el Gobierno habría podido imponer condiciones más duras a BBVA?

Podría haber hecho lo que considerase oportuno. Ha considerado que estas medidas eran las razonables, equilibradas, ponderadas. Me atrevo a interpretar que lo que han dicho es: 'Oíga, esto es una situación que supone un cambio muy sustancial. Dejemos un mínimo de tres años funcionando las cosas como funcionan ahora para que el mercado, los clientes y los proveedores se puedan ajustar'. Creo que ha sido mucho más proporcionado que lo que ha hecho el Gobierno italiano.

¿Le ha sorprendido que BBVA no se haya retirado después de la resolución de Moncloa?

Podía retirarse o seguir adelante y ha optado por esta última. Los casos en los que puedes desistir de una opa, que es vinculante, están extraordinariamente tasados. Tiene que haber un evento sustancial. ¿Se podría haber retirado después del dictamen de la CNMC? No, porque la CNMC aceptó la propuesta de BBVA. Por tanto, no hubo causa de desistimiento. ¿Podría haber desistido después de las condiciones del Consejo de Ministros? Podía, pero una de las pruebas de que (esas medidas) no son desorbitadas es que tampoco le parecieron excesivas y no desistió. Es decir, hasta ahora solo ha habido una ocasión para retirarse. Cuando la junta apruebe la venta de TSB, habrá otra.

Desde el comienzo de la opa no se ha actualizado el porcentaje de accionistas minoritarios. ¿Está lejos del 48%?

No, no está lejos. Pero no se va a actualizar.

Zurich ha subido su participación hasta un 4,6%. ¿Es un movimiento para proteger la alianza en bancaseguros?

Las normas de pasividad permiten buscar una contraopa, pero no caballeros blancos que te protejan de que te compren. Zurich hará lo que quiera hacer por las razones que quiera, pero no es en concertación con nosotros. Es de forma independiente.

Amundi también ha aflorado en el capital. ¿Se está preparando el terreno para la formación de un núcleo duro?

Ahora ni se puede, ni se debe, ni se está haciendo. Se podría después, pero no durante el periodo de la opa.

¿Una resolución de Bruselas puede alterar el curso de la opa?

No. A lo largo del tiempo y con un proceso que está muy tasado y que es largo, Bruselas puede forzar a que se revise la legislación española, pero se revisaría a futuro, no con efectos retroactivos. Por lo tanto, desde un punto de vista de esta operación, es absolutamente neutra.

¿El Santander ganó la puja por TSB solo por un tema de precio o hay algún otro elemento que haya inclinado la balanza a su favor?

No, fue un tema de precio y las diferencias no fueron muy grandes.

César González-Bueno, durante la entrevista. Kike Rincón

El plan estratégico no contempla como escenario que la venta de TSB no salga aprobada en la junta. ¿Es algo que dais por sentado?

Lo damos totalmente por sentado. Tiene todas las bendiciones del consejo por unanimidad. Tenemos el voto positivo de los proxy advisors Glass Lewis e ISS, que son fundamentales, y unas delegaciones de votos de nuestros accionistas particulares muy importantes. Va a salir un sí rotundo. Es la mejor operación de los últimos 10 años en el Reino Unido.

¿Os tomáis las votaciones en las juntas casi como un preperíodo de aceptación?

Es gris. Los accionistas que votan a favor no se comprometen a no acudir a la opa, pero lo interpretamos desde luego como un signo positivo.

El objetivo del beneficio para 2027 es superar los 1.600 millones. El año pasado, con TSB el beneficio superó a los 1.800. Hay un pequeño hueco...

Si haces el cálculo hacia atrás con la rentabilidad sobre el patrimonio tangible (RoTE) y con la previsión de capital al final del trienio, sale más cerca de los 1.700 que de los 1.600. Además, los 1.800 contenían extraordinarios por ganar el litigio con Cerberus. Y ese casi 1.700 no los tiene. El resultado será superior sin TSB que con TSB dentro de tres años en ordinarios.

Mirando las métricas semestrales con TSB y sin TSB, las caídas del margen eran más altas sin TSB, así como la morosidad y otros aspectos. Parece que Sabadell es un banco peor sin TSB que con TSB...

La morosidad es una cifra clarísima en la que TSB es mucho mejor, porque es un banco que solo hace hipotecas. Y por lo tanto, esa morosidad es por definición mejor. El RoTE estaba prácticamente en línea ya, pero el caterpillar tiene un plazo finito. Es decir, esos 100 millones acumulativos, 100 en este año, otros 100 por encima el año que viene y otros 100 por encima el año que viene, eso no tiene continuidad. Estratégicamente, si no hubiésemos vendido TSB, hubiésemos tenido que incrementar su tamaño y hubiésemos tenido que invertir sustancialmente. La venta de TSB tenía sentido si la hacíamos muy bien y la hemos hecho muy bien porque un comprador, como el Banco Santander, o como podría haber sido otro, va a extraer de ese banco mucho más valor del que nosotros hubiésemos podido obtener a lo largo del tiempo. Ese es el único criterio para vender. Estábamos preparados para ello, pero no ha sido una venta buscada.

El crecimiento en pymes y en préstamos al consumo estará por encima del mercado, mientras que en hipotecas estará en línea. ¿Es un negocio más competitivo?

Es un mercado que atrae y fideliza clientes, pero no es el que más margen tiene. Por lo tanto, estar en línea con el mercado tiene todo el sentido del mundo. El negocio en pymes, sin embargo, es la joya de la corona. Antes nos dedicábamos más a captar clientes nuevos. En este plan estratégico, profundizaremos en esas relaciones de forma proactiva.

Según los hitos de la estrategia, la transformación está a medias en autónomos y negocios, así como en pagos y tarjetas. ¿Qué pretendéis hacer?

Lo iremos desvelando a medida que lo hagamos. Hemos hecho muchísimo en cuatro años y medio, pero nos quedan cosas por hacer, como afinar en todo el resto de los productos. Tenemos que hacer grandes tarjetas, que den gran servicio a nuestros clientes y que tengan atractivo especial. Estamos dándole vueltas y cuando lo tengamos definido, lo lanzaremos.

¿Lo haréis solos o de la mano de un socio?

Aquí no hace falta socio.

César González-Bueno, durante la entrevista. Kike Rincón

México suma apenas un 4% de los ingresos totales. ¿Es un porcentaje de representación que cambiará a lo largo del trienio?

No necesariamente. Crecerá en línea con el resto de nuestras actividades. Es un negocio estable y no se prevén grandes cambios.

¿Y de allí no vais a salir? ¿Las sinergias con España no son limitadas?

De momento no hay previsiones para salir. Hay mucho cliente español al que servimos en México. Tenemos una especialización en verticales, como el sector hotelero, que hacen que sea un negocio muy valorado. Hay un vínculo tremendo con España, tanto desde la supervisión en temas de riesgos, hasta en productos.

¿Los inversores institucionales no podrían ver como un límite esa falta de diversificación geográfica?

A los inversores institucionales les encanta que tengas foco, porque la distribución y el reparto de riesgo les gusta hacerlo a ellos. Los gestores, por su parte, diversifican para reducir el riesgo. Dentro de la comunidad europea, que ya es de bajo riesgo, España tiene un riesgo aún menor, con lo cual no necesitas esa diversificación. Podemos satisfacer la necesidad de los gestores de no tener un riesgo elevado y al mismo tiempo tener el enfoque clarísimo en un único negocio especializándonos, que es lo que valoran mucho los inversores.

¿Y los particulares?

Los particulares no tienen una gran percepción. La mayoría de nuestros accionistas son clientes y lo que tienen es una vinculación con el banco, que es económica y afectiva y por lo tanto, están encantados de que nos centremos todavía más que cada día hagamos mejor nuestro negocio en España. Yo creo que los 2.500 millones que les vamos a repartir por la venta de TSB les van a agradar enormemente. Es un porcentaje de la capitalización brutal.

¿Hay precedentes de bancos que hayan repartido el 40% de su valor en 3 años?

Creo que es un caso único. Y desde luego, más de un 26% en menos de 12 meses, tampoco hay precedente de eso.

¿No os preocupa?

Estamos en 13,6% de CET1. Santander, BBVA, Bankinter, CaixaBank están más abajo. De los 5 grandes, somos los que tenemos una ratio de capital más alta.

Dice que es el momento de las fusiones transfronterizas. ¿Cuáles son las condiciones para que se den?

La primera, la voluntad de los gestores. Sólo quedaría un presidente y un consejero delegado. Tiene que haber un ejercicio de generosidad que está pendiente.

¿Y Sabadell puede jugar en estas fusiones?

Va a haber dos grandes tipos de bancos en Europa: grandes bancos internacionales y jugadores nacionales significativos. No es lo mismo estar preocupado permanentemente de cuál es la gran operación de M&A que hay en el mundo y estar pensando en tus pymes o en tus hipotecas. Es muy difícil estar jugando a la chica y a la grande. A algunos les debería corresponder jugar en los grandes mercados de capitales y a otros nos corresponderá dar hipotecas, servir a los autónomos y a las pymes.

¿Descarta por completo adquisiciones en España en los próximos tres años?

Es que una adquisición va acompañada de un concepto de opa. No descarto fusiones, con o sin el Sabadell implicado. Creo que queda consolidación por hacer porque la dispersión geográfica y de segmentos que existen en el mercado justifica que haya unas sinergias de ingresos muy potentes, algunas sinergias de costes, pero que no haya abuso de posición dominante desde el punto de vista de competencia.