La CNMC afronta la próxima semana la resolución sobre la opa de BBVA-Sabadell

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) quiere emitir su dictamen sobre la concentración BBVA-Sabadell antes de que finalice el mes. Su intención es aprobarlo el próximo lunes, día 28, y para ello ha fijado una reunión de su Sala de Competencia, según informa Efe, pero también ha puesto en agenda el miércoles, día 30, por si los trabajos no estuviesen completados o no se diesen las condiciones para tomar antes la decisión.

Desde el organismo que lidera Cani Fernández eludieron confirmar fechas concretas, aunque sí despejaron que la CNMC divulgará un comunicado con la resolución cuando tenga lugar y una vez suprimidos los aspectos privados. Cani tiene la potestad de convocar en cualquier momento y el hecho de que vaya el informe a una reunión no presupone su directa aprobación pudiendo, de hecho, abordarse el documento en distintos encuentros.

El calendario va apretado porque el organismo lanzó el test de mercado el pasado día 2 y ha estado recibiendo las respuestas hasta esta semana. Lanzó la consulta a 40 entidades y organizaciones (22 entidades financieras y fintech y 18 organizaciones empresariales y de otra índole) con la pregunta de si los compromisos asumidos por BBVA eran suficientes para evitar los riesgos advertidos en crédito con pymes y en el negocio de TPVs.

Entre las principales garantías ofrecidas por el grupo vasco figura el mantenimiento del circulante a las pymes -crédito a corto plazo- durante tres años, ampliable a cinco si la CNMC lo estimase necesario; y asegurar el crédito total a pymes que se financien solo con ambos bancos o con alguno de ellos.

Quejas por las protecciones

Fueran del test se han quedado organizaciones como la patronal catalana Foment que ayer expresó su confianza en que el organismo vete la opa y sí participan otras como Pimec, que alertó de que los remedies no impedirán una seria merma del crédito a pymes. Entre los consultados figura Sabadell, que habría pedido al organismo ampliar las garantías por estimar que solo cubren a un 5% de sus pymes clientes y al 1% de su financiación. Entre otras demandas, el vallesano habría requerido ampliar la protección a pymes con hasta 100 millones de euros de facturación -la propuesta de BBVA se limita a aquellas con hasta 50 millones-, incluir los autónomos y garantizar la cuota de financiación que alcance o exceda el 20% entre ambos bancos.

La CNMC tenía muy avanzado su estudio desde hace semanas y, a pesar del corto espacio de tiempo transcurrido desde que ha recepcionado las respuestas al test, contempla su aprobación en días tras su análisis y verificar si cabe algún ajuste en compromisos. Su dictamen no será, en todo caso, definitivo hasta el trámite preceptivo del Gobierno.

Próximos pasos

La CNMC dará traslado del informe al Ministerio de Economía, que dispondría de 15 días hábiles para elevarlo o no al Consejo de Ministros, cuyo plazo abarcaría a su vez 30 días naturales para decidir si ajusta los requisitos fijados por Competencia. Ahora bien, el reloj se pararía si el Ejecutivo requiriese algún tipo de información y procedimientos de su análisis, pudiendo prolongar aún el proceso durante meses. Si el gabinete liderado por Carlos Cuerpo no eleva el informe quedaría automáticamente aprobado una vez transcurridos los citados 15 días por silencio administrativo.

BBVA lanzó su opa hace ahora un año -el 9 de mayo de 2024- y desde entonces el Ejecutivo se ha posicionado en contra. No puede prohibir la opa -sí la fusión-, pero sí modular los remedies en el Consejo de Ministros alegando razones, según la ley, "de interés general distintas de la defensa de la competencia". Antes de fijarlas "podrá solicitar informe a la CNMC". El mismo Pedro Sánchez ya ha señalado la importancia de preservar otros intereses como la "cohesión territorial".

El último permiso lo expedirá la Comisión Nacional de los Mercados de Valores (CNMV), que esperará al trámite del Gobierno para aprobar el folleto de la opa para incluir en su redactado cualquier imposición o requerimientos que puedan fijar las diferentes autoridades para que el inversor adopte una decisión lo más informada posible.

Cuando la CNMV apruebe la opa, si no decae por condiciones inasumibles para BBVA, el banco vasco dispondrá de cinco días hábiles para publicar el folleto y fijar el plazo de aceptación. Este no podrá ser inferior a 15 días naturales ni superior a 70, contados a partir del día hábil bursátil siguiente a la publicación del folleto. Si el calendario se sigue retrasando, no es descartable que BBVA opte por esperar a septiembre para abrir la ventanilla a fin de evitar el período estival.

El inversor podrá decidir en el último momento, así como el oferente mejorar su oferta hasta cinco días antes de que se acabe el plazo, si necesita estimular la adhesión. Es una opción que el banco ha rechazado, aunque el mercado aún confía en una subida de precio. Es habitual que en opas hostiles, y sobre todo en el sector bancario, se utilice esa prerrogativa en un intento de animar a los inversores más indecisos. De hecho, el propio BBVA la utilizó cuando quiso reforzar su posición accionarial en la turca Garanti.

Calendario de resultados bancarios

El sprint final de la CNMC, que empezó a estudiar la operación en mayo del año pasado, coincidirá con las fechas de presentaciones de resultados. Las reuniones convocadas por su Sala de Competencia tendrán lugar precisamente el día antes y el día después de que BBVA divulgue sus cuentas -lo hará el martes, día 29-.

Sabadell ha fijado su presentación el 8 de mayo. El desglose de resultados ofrece a ambos bancos la oportunidad de enseñar al mercado y, sobre todo, a los accionistas del vallesano nuevos réditos de sus estrategias. Sabadell se guarda la pildorá de dibujar su hoja de ruta y enseñar su potencial con objetivos hasta 2027 en una presentación posterior e, incluso, de pagar un último dividendo el próximo agosto.