Sanidad

Qué condiciones se tienen que dar para decir adiós a la mascarilla en exteriores

  • El fin del uso del cubrebocas está previsto para el verano
  • Fernando Simón ha dicho que se puede producir a finales de junio
  • Depende de la evolución de la pandemia y el porcentaje de vacunados

elEconomista.es
Madrid ,

El final del uso obligatorio de mascarilla está cerca y será en verano si la evolución epidemiológica sigue siendo como la actual. Sin embargo, la fecha exacta no está clara, mientras los presidentes de Castilla-La Mancha o Galicia se aventuraron a poner fechas, otros son más precavidos. Sin embargo, todo parece indicar que la retirada en exteriores se producirá a comienzos del mes de julio, momento en que se da el pistoletazo de salida a las vacaciones y España tendrá un porcentaje de vacunados con las dos dosis del 50%.

El último en hablar sobre el final del uso de las mascarilla en exteriores ha sido Fernando Simón. El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias ha explicado en rueda de prensa que es "factible" poder relajar el uso de mascarillas en exteriores a mediados o finales de junio y con mucha probabilidad a principios de julio si la evolución epidemiológica y la cobertura vacunal continúan al ritmo actual.

Una incidencia acumulada menor de 150 casos por cada 100.000 habitantes

El epidemiólogo ha indicado, además, que la mascarilla podría no ser necesaria en lugares abiertos al aire libre en los que se pueda mantener la distancia, incluso antes de lograr el 70 % de población inmunizada, algo que el Gobierno augura para mediados de agosto. Lo cierto, el propio Simón había explicado que se podría pensar en medidas de relajación de la pandemia, como es el fin de las mascarillas en exteriores, cuando todas las comunidades autónomas tuvieran una incidencia menor de 150 casos por cada 100.000 habitantes. 

Actualmente, según el último informe del Ministerio de Sanidad, España tiene una incidencia acumulada de 121,75 casos por cada 100.000 habitantes. Es decir, la nación se encuentra en un riesgo medio (entre 50 y 150 casos) y, por tanto, se podría ir retirando la mascarilla. Sin embargo, no todas las comunidades están igual. En concreto, son seis las autonomías que permanecen en riesgo alto: La Rioja (174,3), País Vasco (196,08), Melilla (186,06), Madrid (178,87), Andalucía (172,40), Aragón (164,29). 

A pesar de que todavía hay regiones que no presentan una evolución pandémica lo suficientemente positiva para retirar la mascarilla, Fernando Simón ha explicado en su intervención que se puede valorar la posibilidad de que en unas se elimine y otras no. Así, ha explicado que "lo lógico" es que si las circunstancias lo permiten, se haga a nivel nacional y no como el verano pasado en el que la imposición no era igual en todas las comunidades; eso sí, si la situación epidemiológica es "radicalmente diferente" entre comunidades, "habrá que replanteárselo".

Un tercio de la población con la pauta completa: la vía estadounidense

Estados Unidos tomó la decisión de retirar la mascarilla a todas las personas vacunadas cuando el porcentaje de inmunizados con la pauta completa era de aproximadamente un 33%. Actualmente, en España el número de personas que ya han recibido las dos dosis está en un 19%. Así, se podría producir alguna relajación de medidas cuando se llegase a un tercio de la población.

Cabe mencionar que las autoridades sanitarias nacionales nunca valoraron quitar el cubrebocas solo a vacunados. No obstante, Fernando Simón planteó que en un futuro próximo también se podría pensar en la retirada en interiores para colectivos que estén completamente vacunados como las residencias. 

La mitad de la población con la pauta completa: la vía israelí

El horizonte más probable es que España siga el camino de Israel. El país mediterráneo quitó la mascarilla a la población general en exteriores cuando el porcentaje de inmunizados alcanzó el 50% con la pauta completa. Se espera que nuestro país alcance ese objetivo entre la última semana de junio y la primera de julio. Unas previsión que coinciden con lo apuntado por Fernando Simón y con la entrada en vigor del pasaporte Covid-19, momento en que se espera que el turismo internacional esté a pleno rendimiento. 

Lo que será necesario es la reforma de la ley de nueva normalidad

El último apunte que hizo Fernando Simón en la rueda de prensa del lunes es el cambio que hay que hacer en la ley de la nueva normalidad para permitir ir sin mascarilla en espacios exteriores. "Y eso no se hace en 24 horas", dijo el director del CCAES. Dicha ley, publicada el pasado 30 de marzo en el BOE, es fruto del trabajo parlamentario a partir del real decreto de nueva normalidad que se aprobó en junio de 2020 para tramitarse como proyecto de ley.

Pero durante su trámite parlamentario en el Senado se introdujo una enmienda del PSOE que fijaba la obligatoriedad de la mascarilla incluso manteniendo la distancia de seguridad, cuando hasta entonces se exigía de no ser posible guardar la distancia de 1,5 metros.

Sanidad y comunidades flexibilizaron esta obligatoriedad una semana después en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud y es lo que se ha venido aplicando en algunas autonomías pese a que una lectura literal de la norma sigue imponiendo la mascarilla en exteriores aun cuando hay distancia de seguridad.