Motor

El Gobierno recurre al mecanismo RED para asegurar el empleo de Ford y sus proveedores en Valencia tras descartarlo hace 6 meses

Línea de vehículos de Ford en Almussafes

Ángel C. Álvarez
Valencia,

La industria valenciana del automóvil vuelve seis meses después al punto de inicio. El Gobierno central finalmente ha decidido recurrir al denominado mecanismo RED que contempla la aprobación de expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) especiales para sectores concretos que afrontan una situación de reconversión o graves dificultades tanto a la factoría de Ford en Almussafes como a sus empresas proveedoras locales.

Esta era la solución que habían reclamado desde hace meses tanto la propia multinacional automovilística como los sindicatos de la planta para hacer frente a los próximos dos años en que Almussafes afronta una producción en mínimos hasta la llegada prevista en 2027 de un nuevo vehículo híbrido que se montará en la planta española. Sin embargo, el Ejecutivo de Pedro Sánchez había considerado que la normativa del mecanismo RED creada a raíz de la pandemia podría tener problemas de aplicación.

En su lugar, el Estado se había comprometido con Ford a aplicar una solución singular y a medida con efectos similares, de forma que la compañía del motor no tenga que despedir a los algo más de mil empleados para los que actualmente y hasta 2027 estima que no tiene carga de trabajo. De hecho, la empresa automovilística y el Gobierno cerraron en junio ese compromiso aunque sin concretar las medidas concretas y Ford redujo el ERE aprobado en julio, que supuso la salida definitiva de más de 600 trabajadores pero evitó que otro millar fueran incluidos. De esa forma la factoría mantiene unos 4.300 trabajadores.

Con ese pacto, desde entonces la planta de Almussafes ha aplicado un Erte que se aplica de forma rotatoria por el que trabaja diariamente con un millar de empleados menos, además de reducir jornadas de producción, ya que desde abril sólo monta un coche, el Kuga. A partir de enero estaba previsto que ya se aplicase esa solución singular, con un Erte a medida con ayudas específicas a empresa y trabajadores, además de formación alternativa.

Efecto de la DANA

Sin embargo, la DANA que ha devastado Valencia y a parte del tejido industrial ha retrasado la negociación del sistema y ahora tanto el Ministerio de Industria como el de Trabajo consideran más viable y rápido de aplicar el mecanismo RED, por el hecho de que la riada ha introducido el factor de excepcionalidad que requiere la normativa y en él también se puede incluir además de a Ford a sus proveedores. Hay que tener en cuenta que se estima que por cada puesto en la planta de Ford sus industrias auxiliares generan tres empleos.

Desde el Ministerio de Trabajo, se consideran estos instrumentos son vitales ahora en la Comunidad Valenciana, especialmente tras haber sufrido los efectos de la DANA, para proteger el tejido productivo industrial. De hecho Ford ya se acogió en noviembre a un Erte de "fuerza mayor" por los problemas generados por la catástrofe.

Precisamente la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía social, Yolanda Díaz, y el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, se han reunido hoy con la cúpula de Ford España para desbloquear la situación y despejar este mecanismo, cuyos flecos la empresa también debe cerrar con el comité de empresa y su sindicato mayoritario, UGT. Durante dicho encuentro, Díaz ha mostrado su compromiso de salvar "hasta el último puesto de trabajo", pero ha reclamado que esta apuesta garantice el futuro industrial de la Comunidad Valenciana, han indicado las mismas fuentes.

El mecanismo RED, incluido en la reforma laboral de 2021, es, al igual que los ERTE, una medida de flexibilización y estabilización del empleo y se activa por el Consejo de Ministros para un sector de la economía o por un ciclo temporal determinado. Las medidas que se pueden autorizar a la empresa son la suspensión temporal del contrato de trabajo o la reducción de la jornada de los trabajadores.

Durante estas medidas, los trabajadores reciben protección social y las empresas son exoneradas del pago de cotizaciones de sociales. En la modalidad sectorial del mecanismo RED estas exenciones son del 40% y están condicionadas a la realización de actividades de formación y al mantenimiento del empleo durante los seis meses siguientes a la finalización del mecanismo RED.

Durante la aplicación de las medidas recogidas en el mecanismo RED, salvo excepciones, las empresas desarrollarán acciones formativas para las personas afectadas, para mejorar sus competencias profesionales y su empleabilidad. Precisamente para ese apartado también la Generalitat Valenciana tiene previsto aportar fondos.

Las personas trabajadoras afectadas por un Mecanismo RED percibirán el 70% de la base reguladora durante todo el periodo (hasta un máximo del 225% del Iprem) y tendrán la consideración de colectivo prioritario para el acceso a las iniciativas de formación del sistema de formación profesional para el empleo. Durante la aplicación del mecanismo RED no podrán realizarse horas extraordinarias, nuevas externalizaciones de la actividad, ni nuevas contrataciones, directas o indirectas.