Motor
La incertidumbre del coche eléctrico paraliza planes de inversión de los fabricantes de baterías
- GWM abandonará Europa y su filial Svolt cancela las aperturas de gigafactorías en Alemania
- ACC, la empresa de Stellantis, Mercedes-Benz y Saft, pausan la construcción de las plantas en Alemania e Italia
- Tesla paralizará este mes de junio la producción en su fábrica de Berlín durante cinco días
Ankor Tejero
La transición hacia la movilidad eléctrica en Europa no está cuajando. Los fabricantes de vehículos y baterías se embarcaron en importantes desembolsos a la hora de contar con líneas productivas eléctricas y gigafactorías.
Pero el problema es que la demanda no acompaña al mercado. De esta manera, algunas compañías se han decidido a aplazar algunas inversiones, si no a cancelar los proyectos anunciados o, incluso, abandonar el Viejo Continente.
Es lo que ha sucedido en los últimos días con Great Wall Motors (GWM), su filial de baterías Svolt y ACC, la compañía de baterías en la que participan Stellantis, Mercedes-Benz y Saft, la compañía de TotalEnergies especializada en la producción de baterías.
En el caso de GWM, uno de los principales productores de vehículos chino, este ha decidido reorientar su estrategia en Europa. Tanto la ha reorientado que cesará sus operaciones en Alemania, país donde tiene su centro de operaciones, en agosto de este año. Esta decisión también implica el despido de 100 trabajadores, entre el que se incluye al equipo directivo.
Además, los planes que tenía de llegar a mercados como Austria y Suiza se han cancelado. Así las cosas, la compañía prestará servicios a los mercados de Alemania, Reino Unido e Irlanda desde China.
Lo cierto es que pese a que el mercado del vehículo eléctrico crezca en el Viejo Continente, no lo hace a la velocidad adecuada. En el primer cuatrimestre del año —últimos datos disponibles— se comercializaron un total de 441.992 modelos eléctricos, un 6,4% más en comparación con el mismo periodo del año anterior. No obstante, los principales mercados de la UE (Alemania, Francia, Italia y España) presentan evoluciones muy distintas. En el caso de Alemania, el principal mercado de la UE en la venta y producción de vehículos, las entregas de modelos eléctricos en los cuatro primeros meses del año han caído un 10,8%, hasta situarse en los 111.005 unidades eléctricas. Una caída que se explica por una sentencia del Tribunal Constitucional Federal, el cual declinó transferir 60.000 millones al Fondo para el Clima y la Transformación (KTF). Por su parte, las ventas de eléctricos en Francia crecen un 27,7% hasta abril, mientras que en Italia estas entregas se reducen un 18,8%.
En el caso de España, las ventas de modelos eléctricos hasta mayo se mantienen planas en comparación con los cinco primeros meses del año pasado. En total, se han entregado 23.095 modelos eléctricos.
Pero que la demanda del vehículo eléctrico se esté comportando por debajo de las previsiones que se tenían en un principio también afecta a las inversiones de los fabricantes de baterías.
Es lo que ha sucedido con Svolt, la filial de baterías de GWM. La compañía anunció que cancelaba los planes que tenía a la hora de levantar una gigafactoría de baterías en Lauchhammer (Alemania). Dicha instalación fue adquirida por Svolt a finales de agosto de 2022 a Vestas, donde producía palas para turbinas eólicas.
El presidente de Svolt Europa y vicepresidente de Svolt Energy, Kai-Uwe Wollenhaupt, explicó que "el mercado del automóvil se enfrenta actualmente a fluctuaciones y desafíos considerables en todo el mundo, impulsados principalmente por la transformación hacia la movilidad eléctrica".
En la ecuación también hay que tener en cuenta la investigación que lleva a cabo Bruselas sobre los subsidios que reciben las compañías chinas de vehículos eléctricos. Una situación que permite a estas compañías dañar la producción de los competidores europeos. De hecho, la Comisión Europea se pronunciará al respecto una vez se hayan celebrado las Elecciones europeas del 9 de junio. No obstante, algunos directivos ya contemplan que Europa imponga aranceles a las importaciones de vehículos eléctricos chinos. Precisamente por ello, China ha pedido ayuda a España para que haga lobby en Bruselas a la hora de evitar los posibles aranceles.
Wollenhaupt apuntó que "en Svolt, además del ya bajo nivel de seguridad de planificación en varios puntos, desde la amenaza de aranceles punitivos internacionales hasta las distorsiones del mercado debido a subsidios prolongados y desigualmente distribuidos, ahora también se ha perdido un importante proyecto de cliente".
ACC paraliza sus inversiones
Pero la de Svolt no ha sido la única inversión que ha quedado paralizada en el campo de las baterías. Automotive Cells Company, la compañía de baterías participada por Stellantis (45%), Mercedes-Benz (30%) y Saft (25%), la fililal de baterías de TotalEnergies, también ha cambiado sus planes.
El pasado mes de febrero, ACC levantó en una ronda de financiación 4.400 millones de euros. Con este capital, además de incrementarse las participaciones de cada uno de los miembros de la sociedad, la compañía preveía invertirla en la construcción de una segunda línea de producción en Douvrin (Francia), así como levantar las gigafactorías de Kaiserlautern (Alemania) y Térmoli (Italia). Pues bien, la construcción de estas dos últimas plantas han quedado suspendidas sine die como consecuencia de la desaceleración de la demanda de vehículos eléctricos. A la hora de levantar la gigafactoría de Kaiserlautern, ACC recibió 437 millones de euros en subvenciones del Gobierno federal de Alemania y del estado de Sarre.
La inversión en las tres gigafactorías ascendía hasta los 7.000 millones de euros, al tiempo que esperaba contar con una capacidad de producción de 250 GWh en 2030, lo que les permitiría superar los dos millones de baterías producidas al año. Hasta la fecha, la única gigafactoría que se ha logrado construir es la de Douvrin (Francia). Esta instalación cuenta con una capacidad inicial de producción de 13 GWh, que se prevé que alcance los 40 GWh en 2030.
En diciembre de 2023, ACC entregó las primeras baterías a Stellantis en su gigafábrica de Douvrin (Francia), según estaba previsto. Todo ello tras haber invertido 850 millones de euros.
Tesla suspende la producción en Alemania
Por si esto fuera poco, Tesla detendrá la producción en su planta de Berlín durante cinco días del mes de junio. El motivo que explica semejante decisión es la desaceleración del mercado europeo en las ventas de vehículos eléctricos, así como un descenso en las ventas del Model Y, el vehículo más vendido en todo el mundo durante 2023.
Las ventas de Tesla en la Unión Europea en el primer cuatrimestre del año registran una caída del 4% en comparación con el mismo periodo del año anterior, hasta acumular un total de 77.187 unidades comercializadas. En el caso de España, la compañía capitaneada por Elon Musk ha logrado entre enero y abril arrebatar a Stellantis toda la cuota de mercado en solo un año.