Bolsa, mercados y cotizaciones

Invertir en bolsa española en 2025 ofrece casi 5 puntos más de rentabilidad que el bono del Tesoro

  • El retorno del Ibex 35 alcanza el 8,1% frente al 3,3% que paga el bono a 10 años
  • Es el mercado que ofrece el mayor 'plus' por elegir la renta variable y no la fija
  • En EEUU se da la anómala situación de que el T-Note paga más que la bolsa
Detalle de la fachada del Palacio de la Bolsa de Madrid. Foto: Istock.

María Domínguez

La bolsa española brilla en 2025. El Ibex 35 se revaloriza un 20,3%, más que ninguna otra bolsa europea. Pero, a pesar del acelerón que lleva, este índice bursátil todavía ofrece un retorno del 8,1% de cara a los próximos años. Para aquellos inversores que se estén planteando invertir en el mercado español, la bolsa paga ahora especialmente bien en comparación con los bonos. El Ibex 35 ofrece ese 8,1% anual, mientras que la rentabilidad del bono español a 10 años está en el 3,3%. Por tanto, quien invierta en bolsa española ganaría 4,8 puntos más de rentabilidad cada año que quien opte por comprar bonos del Tesoro. Ese diferencial, de casi 5 puntos, es el más alto de Europa.

Obviamente, quien invierte en Ibex 35 está comprando renta variable, un activo que implica asumir mucho más riesgo que el bono soberano a 10 años. El bono paga un cupón fijo e inamovible de forma anual durante una década, siempre y cuando el inversor lo mantenga a vencimiento (si lo vende antes de los 10 años, puede perder por precio, o ganar). De ahí que esos 4,8 puntos de diferencial se puedan entender como la prima de riesgo de la bolsa española frente al bono español. Le puede interesar: Los 4 valores del Ibex 35 que los expertos recomiendan comprar ahora y que tienen un potencial del 20% o más.

En los últimos años, particularmente desde la crisis de la deuda de la eurozona de 2012, se ha institucionalizado que la prima de riesgo española es el interés que paga el Reino de España por colocar su deuda respecto al que desembolsa un país más seguro, como Alemania. Pero, en realidad, el concepto prima de riesgo se puede aplicar a cualquier activo financiero.

Y ese diferencial que ofrece España al inversor que opte por asumir riesgo es, como decimos, el más alto de Europa actualmente. Italia está ligeramente por debajo de España con 4,7 puntos, mientras que la prima de riesgo se queda, tanto en el caso de Alemania como en el de Francia, en poco más de 3 puntos.

Mención aparte merece Wall Street, que se queda totalmente fuera de esta foto, ya que al otro lado del Atlántico se da desde hace meses la anómala situación de que el bono soberano pague más que la bolsa. El T-Note (bono de EEUU a 10 años) está en el 4,47%, mientras que la rentabilidad que ofrece el S&P 500, el índice estadounidense de referencia, está en el 4,2%. El rendimiento del bono soberano de EEUU se ha tensado en 2025, principalmente por el impacto de la controvertida One Big Beautiful Bill Act. La gran ley fiscal de Trump hace permanentes los recortes fiscales temporales de 2017 y eleva el déficit del país, con lo que los inversores piden más intereses por comprar su deuda. ¿Dónde están las oportunidades en renta fija? El bono americano mantiene potencial mientras los europeos pierden atractivo.

Todos estos rendimientos esperados de las bolsas se han calculado en base a la inversa del PER, el multiplicador de beneficios (Price to Earnings Ratio). La inversa del PER dice al inversor cuánto ganan las empresas por cada euro que él paga por las acciones. El inversor se embolsará esa rentabilidad por dos vías: bien en forma de dividendos, bien a través de la revalorización de las acciones.

"Es importante señalar que, en general, nuestros expertos consideran que los diferenciales de los bonos siguen cotizando con unos niveles que indican complacencia y que, en muchos casos, parece que obvian los riesgos e incertidumbres existentes", advierte Victoria Torre, responsable de oferta digital de Self Bank. Esto, a pesar de factores como los altos riesgos deuda/PIB o los déficit en países como España.

El Ibex 35 sigue barato frente a Europa

El favorable dato de rentabilidad esperada para el Ibex, ese 8,1%, tiene que ver con que, incluso pese a haber subido un 20% este año, el Ibex 35 no cotiza caro. El PER del índice está en las 12,38 veces (se pagan 12,38 euros por cada euro de beneficio esperado), lo que implica que está más barato que cualquier otro gran mercado europeo (exceptuando Italia), y por supuesto mucho más barato que el S&P 500, donde el inversor paga un PER de casi 24 veces. Lo explica Torre: "Un dato a favor del mercado español es su valoración, ya que ese PER cercano a las 12 veces lo sitúa por debajo de otras bolsas, a pesar de sus mejores perspectivas". Lea también: Izertis quiere elevar su free float al 40% tras saltar al Continuo.

La clave está en que el Ibex es un índice tremendamente bancarizado, y que los bancos cotizan a PER bajo, pese a haber subido en bolsa a ritmos de doble dígito en 2025. También las energéticas españolas cotizan con descuento en Europa, explica la experta de Self Bank, "pese a que la rentabilidad y calidad de sus empresas es similar, lo que nos hace pensar en el atractivo relativo tanto del sector financiero español como del energético". En esta entidad consideran que el mercado español "sigue conservando algunas condiciones favorables, por lo que mantenemos una visión positiva respecto al mismo", añade. En 2024, España superó en crecimiento la media de la eurozona (3,2% anual) y del resto de principales economías (Alemania, Francia, Italia), repitiéndose el patrón de 2023 y 2022. Y la Comisión Europea estima el dato para 2025 en el 2,6%, muy por encima de otros países europeos.

Según explican desde el equipo de inversión en renta variable de Fidelity International: "Hemos sido testigos de un vuelco impresionante desde el mes de abril, cuando la renta variable se acercaba a territorio de mercado bajista, hasta el momento actual, en el que el mercado ha escalado o se aproxima a máximos históricos". Sin embargo, según advierten estos expertos, "los inversores deben ser conscientes de que nos encontramos en un periodo de incertidumbre estructural elevada, algo que la prima de riesgo de la renta variable parece no estar descontando plenamente". Para que las bolsas sigan escalando desde los niveles actuales, añaden, haría falta un giro en la trayectoria de las expectativas de beneficios y eso requeriría, a su vez, unas condiciones económicas favorables, "un escenario ideal".

"Nuestra opinión sigue siendo moderadamente positiva sobre la renta variable, tanto en los mercados desarrollados como en los emergentes, teniendo en cuenta que a pesar del contexto de ralentización sigue habiendo crecimiento positivo y que se esperan recortes de tipos", señala, por su parte, Peter Branner, director de inversiones de Aberdeen. Sin embargo, Branner matiza que "la convicción en torno a esta perspectiva positiva es modesta, especialmente tras el repunte registrado desde la pausa inicial por los aranceles del Día de la liberación, y dado que las revisiones de beneficios en los mercados desarrollados en particular han sido negativas".