Bolsa, mercados y cotizaciones
El 'acelerón en los tipos da alas a una reconstrucción de la banca del 30%
- Santander, la más bajista, es también la que arroja un mayor potencial alcista, del 50%
- La previsión de margen de intereses mejora un 16% para 2023 y 2024
Laura de la Quintana
Dos alzas históricas consecutivas de los tipos de interés en la zona euro, en julio de 0,5 puntos porcentuales y en septiembre de 0,75, han tenido una acogida tibia en el mercado que contrasta con las expectativas que había depositadas en el sector financiero. Pero el temor a una recesión y, con ella, un posible aumento de la morosidad ha destartalado los planes. Sobre el papel, los seis bancos que cotizan en España albergan un potencial de reconstrucción medio del 30% sobre los precios actuales, que va del 52% de Banco Santander hasta el 13% de Bankinter y CaixaBank, que son quienes más han disparado su cotización la última semana. A ello habría que sumar rentabilidades por dividendo que, de media, darán un 6,6% sin contar con posibles (y nuevas) recompras de acciones.
Sin embargo, el sector está lejos de recoger en el mercado el potencial implícito que, teóricamente, tiene a pesar de que en la última semana ha logrado maquillar algo su balance anual. Santander y BBVA son las dos únicas entidades en pérdidas, próximas al 10% de media. CaixaBank recupera un 40% en bolsa y es ya la firma más alcista del Ibex. Le siguen Bankinter y Sabadell con ganancias superiores al 25%.
El problema es que el mar en calma y soleado que divisaban los inversores a comienzos de año ha cambiado radicalmente y lo que antes eran nubes en el horizonte han pasado a descargar agua a espuertas sobre las tímidas ansias de recuperación del sector. El alza de los tipos de interés iba a ser -y será- un viento de cola clarísimo, pero ahora deberán encajar el pago anual de unos 1.500 millones de euros, equivalente al 30% de su beneficio medio, por el impuesto anunciado por el Gobierno sobre los ingresos bancarios. Y tampoco se descarta un alza de la morosidad -primero de las pymes y luego de los hipotecados y el consumo- que impactará sobre las provisiones del sector y sobre sus métricas de capital.
Es por ello que los bancos cotizan en mínimos de valoración -en casos como el de BBVA o Santander desde Lehman-, con un multiplicador de beneficios medio de 6,5 veces, porque la recuperación de los beneficios no está siendo acompañada por el precio de sus acciones. Los dos gigantes financieros son los que cotizan al PER más atractivo, en el entorno de las 5 veces. Y se plantea un crecimiento del resultado neto del 17% de media de 2021 a 2023, año en el que el diferencial entre el dinero que la banca paga por los depósitos y el que cobra por los préstamos alcanzará su culmen.
El dinero recupera su 'valor'
El Banco Central Europeo (BCE) se lanzó a su tono más hawkish el pasado jueves con el anuncio de 75 puntos básicos de subida, lo que coloca los tipos en el 1,25%, en máximos de 2011, y las previsiones se han acelerado. En solo tres meses los analistas han elevado en 150 puntos básicos su previsión de dónde se situará el precio del dinero para el primer trimestre de 2023. Se prevé que los tipos lleguen al 2,3% en el primer trimestre.
Prácticamente todas las entidades han aclarado cuál será el impacto sobre el margen de intereses de una subida de 100 puntos básicos y la mejor posicionada es CaixaBank, teniendo en cuenta su cuota de mercado en hipotecas en España -algo más de una cuarta parte del total- y que, de ellas, un 75% están vinculadas a tipo variable.
Los analistas de Bloomberg Intelligence estiman una horquilla de mejora del 20% al 30% sobre el margen de la entidad que capitanea Gonzalo Gortázar. Para Santander sería del 18%, BBVA del 15% al 20%; del 10-15% en Bankinter y un 14% para Sabadell en la parte alta. Hay que tener en cuenta que el impacto en la parte de ingresos de la banca se produce con cierto retraso, de entre 12 y 24 meses, sobre la cuenta de resultados.
En el caso de CaixaBank las estimaciones sobre el margen de intereses han mejorado un 12% en el año para 2023, hasta los 7.172 millones de euros, y otro 19% en 2024 hasta 7.683 millones. Esto es un 30% superior al margen de intereses que logró Caixa a cierre de 2021 en España y casi un 40% para el año 2024. Unos 2.200 millones de euros más, sin contar comisiones. A ello habría que restar "unos 800-1.000 millones de euros" del pago del impuesto al Estado en el bienio, la más afectada por esta tasa de todo el sector.
No obstante, desde Bloomberg Intelligence creen que todavía queda entre un 5% y un 10% de mejora en las previsiones de margen de intereses de la banca más expuesta a la economía nacional. "Tras la reunión del Banco Central Europeo de septiembre en la que se ha arrojado algo de luz, vemos una clara posibilidad de mejora de las expectativas", concluyen, especialmente positivo para las entidades domésticas, con Caixa, Bankinter y Sabadell. Esto, según el consenso, se traduce en unos 2.000 millones de euros más de mejora en márgenes sobre las previsiones actuales para CaixaBank y Sabadell, las dos firmas más beneficiadas por el alza de tipos.
A esto habría que sumar la mejora de las comisiones -la segunda partida en discordia sobre la que también se aplicará el impuesto a los windfall profits [beneficios caídos del cielo, como los denominó el Gobierno en el anuncio de esta nueva tasa] del sector- y el impacto positivo en las carteras ALCO (de renta fija) de los bancos que se incluyen dentro de la partida de ingresos del sector. Cálculos de Bloomberg reflejan cómo su contribución al margen neto de CaixaBank cayó al 6% en el primer trimestre de 2022 frente al 9% que representaba en 2017.