Bolsa, mercados y cotizaciones
El mercado elige la ciencia ficción tras la pandemia
- La crisis ha acelerado el crecimiento de las negocios verdes, digitales y conectados
- El futuro pasa ahora por el hidrógeno, las baterías, la IA o ¿los viajes espaciales?
Daniel Yebra
Madrid,
La crisis ha acelerado el crecimiento de las negocios verdes, digitales y conectados... y el futuro pasa ahora por el hidrógeno limpio, nuevos tratamientos médicos, la IA o ¿viajes espaciales?, con China muy presente. Temas que hasta hace nada eran terreno de la ciencia ficción.
El Nasdaq 100 apenas tardó 20 semanas en borrar las pérdidas del crash del coronavirus -llegó a perder un 30%- y reconquistar máximos históricos. Es el paradigma de que la pandemia ha funcionado de acelerador de tendencias. Ahora, reconocida la evidencia de que lo verde, lo digital y lo conectado han avanzado cinco años o quizá hasta una década en unos pocos meses, el futuro pasa por el hidrógeno limpio, nuevos tratamientos médicos, la robótica, la inteligencia artificial, los coches autónomos o, incluso, los viajes espaciales. Temáticas que hace no tanto eran terreno de la ciencia ficción.
En este año 2020, único en la Historia, el mercado se rindió pronto a la explosión del comercio online, al crecimiento del streaming en el negocio audiovisual, de los sistemas de videoconferencias, de la necesidad de mayor y mejor ciberseguirdad o de gestionar y almacenar datos. Las FAANMG (Facebook, Apple, Amazon (70% en 2020), Netflix (60%), Microsoft y Google) acumulan una subida del 50% en el año.
Pero fuera de su liderazgo en el sector tecnológico, que las convierte prácticamente en nuevos sectores defensivos que evitan hasta la volatilidad, aparece la escalada del 470% de Zoom, del 100% de Nvidia, del 130% de JD.com, del 475% de Pinduoduo o del 100% de Paypal. Y eso sin rebuscar en empresas más pequeñas y más desconocidas.
Hasta en España hay ejemplos de la aceleración de tendencias, pero en este caso las que tienen que ver con la conectividad que permite el progreso tecnológico -con Cellnex como líder del 5G en Europa con ganancias del 40% en bolsa-, o con la sostenibilidad -con empresas enfocadas a las energías renovables como Iberdrola, Solaria y Siemens Gamesa repuntando un 20%, 190 y 80%, respectivamente-.
Nuevas tendencias
Sobre estos cimientos descansan las nuevas tendencias tras el salto de este 2020, de "cambios colosales que la globalización, la liberalización, la financiarización extrema y la digitalización han impuesto a las sociedades occidentales", reconocen en Julius Baer. "La energía renovable se beneficiará de un crecimiento a largo plazo a medida que el mundo efectúe la transición hacia una economía con menores emisiones de carbono y en vista de que la energía solar y eólica han pasado a ser más competitivas en términos de costes que los combustibles fósiles", explica Mary Jane McQuillen, gestora y directora de inversión ESG en ClearBridge Investments (Franklin Templeton).
"Los esfuerzos encaminados a reducir las emisiones e incrementar la eficiencia energética seguirán apuntalando el crecimiento de los vehículos eléctricos y de sus cambiantes cadenas de suministro y también monitorizamos las tecnologías más recientes –como el hidrógeno ecológico, las baterías de iones de litio y el almacenamiento y captura de carbono– conforme se desarrollan y, eventualmente, transforman el panorama de las energías renovables", continúa la experta.
En el segmento de la movilidad destaca el 2020 de Tesla, absoluto líder del coche eléctrico, pero en cuya vertical subida en bolsa, del 650% en lo que va de año, todos los analistas coinciden que hay implícitas más innovaciones, con el límite de la imaginación de Elon Musk, que podría protagonizar con la salida a bolsa de SpaceX la primera invitación a viajar al espacio como negocio rentable.
También en el terreno del coche eléctrico, las chinas BYD, NIO, CATL, Xpeng, Li Auto o Geely eran compañías que estaban muy lejos de los grandes grupos del sector automovilístico global hace apenas unos años. En el caso de alguna de ellas, incluso hace solo unos meses. Hoy, aparecen entre los fabricantes de coches y componentes más capitalizados del mundo -con el permisto de Volkswagen y Toyota-, tras haber atraído la atención de los inversores por su especialización en el coche eléctrico y su exposición al mercado que más rápido se ha recuperado de la crisis del coronavirus y mejores expectativas tiene en el medio plazo, precisamente el del gigante asiático.
"Si bien es poco probable que la crisis del coronavirus traiga consigo un cambio duradero en los patrones de movilidad, también lo es que las medidas de estímulo que se tomaron como consecuencia adelanten la llegada del mercado de masas de automóviles eléctricos", aseguran en Julius Baer.
Más allá de la sostenibilidad y la movilidad eléctrica, desde el banco suizo destacan dos temas "que creemos desempeñarán un papel destacado en los mercados de capital en la próxima década: el primero es (precisamente) el ascenso de China al estatus de activo de clase fundamental, dado que está saliendo de la crisis del coronavirus con mucha más solvencia que los países occidentales, estamos aún más convencidos de la relevancia de activos chinos en una cartera de ámbito mundial; en segundo lugar, estimamos que el sector de las ciencias de la vida -más concretamente la salud digital y la biotecnología- presenta un considerable potencial de crecimiento en los próximos años".
El hidrógeno limpio
La siguiente afirmación de Bank of America también rozaría la ciencia ficción hace apenas unos meses: "Estimamos que el mercado del hidrógeno crecerá seis veces en 2050 con el coste cayendo en un 90% durante el mismo período de tiempo". Es la última vuelta al todo al verde que el mercado viene entonando sin complejos.
"El impulso global a las regulaciones climáticas respaldará los nombres de las energías limpias a pesar del mejor comportamiento hasta la fecha; los sectores que permiten la transición son los beneficiarios a largo plazo: energía renovable, construcción con eficiencia energética, movilidad alternativa y transporte eléctrico, mientras que los productores de combustibles fósiles, los fabricantes de equipos originales de automóviles tradicionales y la aviación corren más riesgos", afirman en Credit Suisse.
En España, por diferentes motivos y en distintos ámbitos, CAF, Airbus, Enagás, Endesa, Repsol, Iberdrola, Naturgy o Siemens Gamesa están bien posicionadas en la parrilla de potenciales ganadores del hidrógeno limpio, que surge como un factor transversal para el conjunto de la actividad económica.