Bolsa, mercados y cotizaciones
El dividendo del Ibex es el mayor en más de seis años frente al EuroStoxx
- Los analistas advierten de revisiones a la baja en los pagos previstos
- La rentabilidad de la retribución del selectivo español es del 4,6%
Carlos Jaramillo
A falta de solo dos meses para finalizar 2019, el año va camino de convertirse en un nuevo fiasco para el Ibex 35, que se ha quedado rezagado 12 puntos porcentuales frente al EuroStoxx 50, una situación que ya se había vivido antes. Desde el cierre de 2014 el selectivo español sufre un retroceso del 10%, frente al 15% que se anota el índice de la eurozona.
Este comportamiento ha provocado que el diferencial entre la rentabilidad por dividendo entre ambos índices se haya ensanchado en los últimos meses, llegando hasta los 95 puntos básicos y situándose en máximos no vistos desde julio de 2013. En concreto, el rendimiento que ofrece a 12 meses el Ibex 35 es del 4,62%, frente al 3,57% del EuroStoxx 50.
Una de las principales señas de identidad del selectivo español es su rentabilidad por dividendo, algo que es muy apreciado por el minorista. Sin embargo, hasta contando estos pagos el índice se ha quedado sensiblemente rezagado. Desde el cierre de 2014 la rentabilidad total del Ibex 35 habiendo cobrado los dividendos es del 8,5%, frente al 34 que logra su homólogo europeo.
Cuidado con los beneficios
Tanto en España como en Europa el diferencial entre los dividendos y el bono ha sido señalado como uno de los grandes atractivos para la bolsa, pero conviene prestar atención a las revisiones a la baja de los beneficios, que acaban afectando a la baja en muchos casos a los pagos. En lo que va de año la previsión de beneficios del Ibex 35 ha retrocedido un 15% y la de dividendos ha cedido solo el 3%. Y de cara al próximo ejercicio los expertos advierten de que las estimaciones actuales del consenso pueden ser excesivas.
A día de hoy el consenso prevé un incremento del beneficio de algo más del 9% y de los dividendos de más del 6%, unas estimaciones que muchos ven en riesgo. "El beneficio por acción del consenso muestra un crecimiento elevado, si bien se ha revisado a la baja un 2,4% en el último trimestre. En el escenario central aplicamos un ajuste adicional del 5% y en el desfavorable un 10%", avisan desde Bankinter. De hecho, si la desaceleración acabase convirtiéndose en recesión la sangría en las previsiones de los expertos podría ser notable. Según los datos de UBS, en una recesión media los beneficios del Ibex 35 caen un 27% desde su pico. Con respecto al pago de dividendos a nivel europeo tiende a resentirse algo menos de la mitad de lo que ceden las ganancias durante una contracción de la economía.
A día de hoy el porcentaje de beneficios destinado a retribuir de las firmas del Ibex 35 se sitúa para este año en el 59%. Esta cifra está 8 puntos porcentuales por debajo de los mínimos de la crisis, cuando en 2016 esta ratio se quedaba en el 51%.
El caso de España es particularmente sensible a los cambios en los beneficios por el elevado peso del sector bancario, que supone el 26% del índice. Los bancos abonarán pagos con cargo a 2020 con rentabilidades que oscilan entre el 4,8% de Bankinter y el 7,1% de Bankia.
Los expertos advierten de que las ganancias del sector son especialmente vulnerables dado el entorno de tipos de la eurozona y lo cierto es que todas las entidades españolas tienen ligados sus pagos a un un payout (porcentaje del beneficio destinado a retribuir), lo que limita el margen de maniobra para proteger los dividendos.
"Las ganancias en eficiencia tienen dificultades para compensar las presiones en la cifra de negocio en un entorno de tipos negativos mientras que la regulación no es favorable para las fusiones transfronterizas. A pesar de que nuestras previsiones de costes están un 1% por debajo del consenso, todavía vemos un riesgo a la baja del 5% de media en las previsiones", indican en Jefferies.
¿Dividendo alto o creciente?
Con todo, un dividendo elevado no es sinónimo de un buen comportamiento bursátil y hay quien alerta de que los inversores no están vigilando tanto una elevada rentabilidad por dividendo como la capacidad de aumentar los mismos.
"Mirando el MSCI AC World y el pago de dividendos desde el arranque del ciclo de mercado se ve que los dos han estado correlacionados. Seguro que ha habido veces en los que los precios han corrido por delante de los dividendos y otras que se han quedado atrás, pero estas diferencias no se extienden mucho. El mensaje es claro, acierta con los dividendos y lo harás con los precios", apuntan en Citi. El estudio del banco norteamericano muestra cómo la bolsa global ha crecido a un ritmo anualizado del 7% desde 2010, el mismo al que lo han hecho los dividendos. En Europa este se queda en el 4%.