Televisión

Ni Iker Jiménez ni Broncano: el truco de Telecinco para salir del pozo de audiencia

Telecinco atraviesa uno de los momentos más críticos de su historia reciente. La cadena, que durante años lideró con holgura las audiencias en España, ahora se enfrenta a una dura realidad: ocupa el tercer lugar, por detrás de Antena 3 y La 1, y ve cómo La Sexta amenaza con alcanzarla. Ante esta situación, y a punto de tomar el timón de los Contenidos Alberto Carullo como sucesor de Manuel Villanueva, la cadena ha decidido hacer de su capa un sallo y, como habíamos adelantado desde Informalia hace semanas, pactar con Bárbara Rey para que retire la demanda de un millón de euros y convertirla en estrella de su prime time desde el próximo lunes.

Apostar por la amante del Rey Juan Carlos puede ser un golpe de efecto importante para recuperar espectadores: un ciclo de entrevistas exclusivas con Bárbara Rey, devolviendo a la actriz al primer plano mediático con confesiones sobre su vida personal, la guerra con su hijo Ángel Cristo Jr, y su relación con el rey emérito.

Un giro mediático con nombre propio

El regreso de Bárbara Rey a Telecinco no es casualidad. Después de demandar por un millón de euros a Mediaset, a la productora de Ana Rosa Quintana y a varios contertulios, la actriz ha puesto precio a su honor, su imagen y su intimidad y ha optado por pactar con la cadena a cambio de una cifra que se estima entre los 100.000 y los 150.000 euros, y que podría aumentar si se firman nuevas intervenciones en función del éxito de audiencia de las primeras, sin descartar su participación en algún reality. El acuerdo incluye de momento varias entrevistas en las que Rey hablará a corazón abierto, abordando tanto aspectos de su vida familiar como los controvertidos audios relacionados con su supuesta relación con el rey emérito, entre otros asuntos.

Este movimiento, según fuentes cercanas a la cadena, busca generar el impacto necesario para revitalizar la parrilla de Telecinco y atraer a una audiencia que ha migrado hacia otros canales y formatos. La historia de Bárbara Rey, cargada de misterio, poder y polémica, fue narrada en Atresmedia en forma de serie y documental, amén de su paso por programas como el de Pablo Motos. A priori, Bárbara, a pesar de haber contado muchas cosas, representa un contenido irresistible para el público español, habituado al consumo de exclusivas de alto voltaje. Sin embargo, su paso por los efímeros Cuentos Chinos de Jorge Javier, también en Telecinco, donde fue anunciada como colaboradora, aconteció sin pena ni gloria.

El declive de Telecinco

El contexto de esta maniobra es el desplome de Telecinco en términos de audiencia. Tras años dominando con programas de entretenimiento como Sálvame o realities de gran éxito, el desgaste de su fórmula, combinado con decisiones estratégicas cuestionables, como dejar escapar a Broncano para el access prime time, cuando estuvieron negociando con él antes que TVE, ha dejado a la cadena en una posición delicada. Antena 3, con éxitos como El Hormiguero, Vallés, Pasapalabra o ficciones internacionales, y un prime time sólido, ha reforzado su liderazgo, mientras que La 1 ha resurgido gracias a propuestas frescas como La Revuelta o eventos como los Juegos Olímpicos con la Eurocopa.

El panorama para la cadena de Fuencarral empeora si se considera la irrupción de plataformas de streaming como Netflix y Prime Video, que han cambiado los hábitos de consumo televisivo, dejando a Telecinco en una posición vulnerable frente a un público cada vez más exigente y segmentado.

Por qué Bárbara Rey es la apuesta clave

La elección de Bárbara Rey como salvavidas no es casual. Su historia combina elementos que pueden trufar la parrilla mañana, tarde, noche y fines de semana, combinada con algún cara a cara con su hijo o su nuera, y con la sombra de fondo del padre del actual jefe del estado de fondo. Las exclusivas de la vedette han funcionado históricamente para la televisión: un pasado, una vida marcada por dramas, maltratos, sexo, secretos y una relación con una de las figuras más controvertidas de la monarquía española. Los audios sobre Juan Carlos I, que han circulado en las sombras durante años, añaden un elemento de intriga y morbo que Telecinco planea explotar al máximo.

Además, Bárbara Rey despierta interés transversal en diversas generaciones. Para los mayores, representa una figura icónica de una época dorada del espectáculo en España. Para los jóvenes, su conexión con el rey emérito y los escándalos asociados a la monarquía la convierten en un tema de conversación inevitable.

El reto: ¿funcionará esta estrategia?

La omnipresencia de Bárbara Rey promete captar atención, pero no está garantizado que basar la recuperación de audiencia en exclusivas sensacionalistas sea suficiente para revertir la crisis estructural de Telecinco. La cadena necesitará más que golpes de efecto para competir en un entorno donde la calidad, la innovación y el respeto por los gustos del espectador parecen ser la clave del éxito.

Por ahora, Mediaset confía en que esta estrategia genere el ruido mediático necesario para ganar tiempo, detener la caída, dar aire unas semanas a la cadena y devolver a Telecinco al centro de la conversación. El tiempo dirá si Bárbara Rey es la pieza que necesitaban para salir del pozo o solo un parche en un barco que se hunde.

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