Lo de Alfonso Arús en La Sexta podría calificarse como un milagro, porque cerrar la temporada con un 17,8% en una cadena de un 6,5% de media es como multiplicar los panes (share) y los peces (espectadores). Pero todo es mucho más terrenal. Su éxito se apoya en la audacia de alguien que supo innovar con un formato sin precedentes en España, la habilidad de adaptarse al lenguaje fresco de un público que quiere despertar con un poco de información y otra pizca de entretenimiento y, sobre todo, la experiencia de un equipo solvente y engrasado que cada jornada pone en marcha la máquina de Aruser@s.
Con esa receta gana a todos sus rivales entre las 07.00 y las 11.00. Es el líder. El rey. Pero reniega de ese título. "Me autodenomino el búfalo de las mañanas", bromea. Y no le va mal ese sobrenombre si tenemos en cuenta el olfato, el vigor y la fuerza de este creador de formatos -ha ideado todos los que ha presentado, excepto Vídeos de primera- que arranca cada día la programación de una cadena que emite en directo más de 15 horas consecutivas.
¿A qué hora se levanta un presentador que a las 7.00 ya está ante la cámara?
Me levanto a las 02.55, leo todos los medios, empiezo a repartir temas a mi equipo... La verdad es que duermo poco, porque llevo media vida haciendo programas a estas horas. Me voy a dormir a las 22.00.
¿Qué se desayuna a esas horas?
Poca cosa, tostadas con jamón y pavo y un zumo. No mucho. Aguanto menos de noche. Hay grandes locutores nocturnos que se crecen de madrugada. Yo no, me voy apagando a esas horas. Pero a las 7.00 no necesito nada, no tomo ni café, voy como un tiro. Y es gratificante saber que a las 11.00 ya has cumplido. Es un programa que es cansado, pero yo no lo cambiaría por nada.
¿Trabajar con tu familia ayuda a llevarlo mejor?
Ayuda a no tener que hablar del trabajo en casa porque ya está todo dicho. Se me ha tildado, y justamente, de hacer un programa con toda la familia, pero si no estuvieran preparados no estarían. Y no solo no desentonan, sino que todos están preparados. Es un negocio familiar, sí, como hay mercerías que también lo son.
Tienes un equipo muy sólido. ¿Cómo eres como jefe?
Soy demasiado buen jefe porque dejo hacer mucho. No soy de reuniones ni de broncas, pero sí soy exigente y ellos lo saben. Aruser@s tiene alma porque los colaboradores tienen alma, muestran un tono optimista, insuflan moral, no se pisan y no muestran malos rollos. El programa es como un partido de fútbol y no se puede bajar la guardia en ningún momento. Y, como jefe, creo que consigo esa sensación de que el ritmo no caiga nunca y que la intensidad sea alta.
El ritmo es una de las señas de identidad de Aruser@s.
Es una cuestión generacional. Cuando empezamos nos decían que íbamos muy rápido, pero la gente ha cambiado y ahora el público va a un ritmo que no es el mío cuando era joven. Aruser@s se adecua bastante al nuevo consumo y a las generaciones que van a un ritmo muy alto. Esta es la única forma que tiene la televisión generalista de atrapar ese público porque, si no, consumen otros contenidos audiovisuales.
¿Cómo te implicas para estar al tanto de las nuevas tendencias y gustos de los espectadores?
Es mi obligación. Estoy atento a las formas que tienen de consumir mis hijos. A los espectadores de 50 años no los puedes agobiar, pero ya los hemos acostumbrado y ahora tenemos una audiencia buena de esa edad. Ya no les extraña ese contenido tan veloz.
En una cadena pequeña, haces una audiencia muy grande. Cuando se va tan sobrado de share, ¿te permites dejar de mirar las audiencias?
Aunque no me crea nadie, me preocupa más cómo queda el programa que el dato que haga ese día. Me importa mucho la calidad, que yo vea que las cosas fluyen bien. Y si luego hay buena audiencia, mejor. Pero yo nunca he tenido presión en La Sexta, ni con 9% ni con un 20%.
Pero con casi un 20% se vive mejor...
Eso sí, seguro (risas). Pero no nos podemos relajar nunca, porque nuestro programa es en directo y todos los demás, a esa hora, también. Hay que estar muy atento a todo lo que puede pasar en la actualidad.
¿Programas como el tuyo demuestran que la televisión en abierto está más viva que nunca?
También se dijo que la radio estaba acabada. Y aguanta como una campeona. La televisión, igual. Hay muchas plataformas con series y películas, pero cuando pasa algo, la gente va a la televisión generalista. Y cuando el programa es bueno, el público busca la tele como entretenimiento. La gente se entretiene y se informa con la generalista.
¿Te podemos llamar el rey de las mañanas?
No, no. Es un título horroroso. Para mí la reina de las mañanas fue María Teresa Campos. No porque tuviera más o menos audiencias, sino porque inventó un concepto que incluía todos los géneros: mesa política, humor, corazón... Lo mezcló de maravilla y ha servido de referencia a los que han venido después.
Ese título honorífico no me interesa lo más mínimo. Me gustaría más que la gente creyera que yo innové algo, porque creé un formato nuevo, pero no por tener más o menos audiencia. Pepe Navarro inventó un formato nuevo cuando hizo las mañanas -aquello de '¿Tiene usted pelos en la lengua?'- y se le ha reconocido poco. Hermida también ideó muchas cosas. Lo de la reina de las mañanas surge porque antes solo competían mujeres y ahora eso se ha trasladado a las tardes... Me autodenomino el búfalo de las mañanas, como me podría poner el bisonte. Los títulos son transitorios.
Aruser@s mezcla entretenimiento y actualidad. ¿El truco de su programa es ser maleable para adaptarse a a cada situación?
Sí, nosotros tenemos claro que no podemos competir en medios con las tres grandes cadenas, pero sí podemos dar mucha información muy concisa y compaginarlo con el entretenimiento. Esa es nuestra baza. Los demás no pueden hacerlo, porque tratan la actualidad de forma más profunda. Con ese infoentretenimiento hemos encontrado una buena fórmula para que la gente se agobie un poco menos que si ven otros programas.
Empezar el día un poco más relajado, sin la tensión de las tertulias políticas...
Yo empecé en la radio haciendo Arús con leche, que es muy parecido a lo que hacemos ahora. En el año 1985 creé el primer formato de humorning radiofónico, y ahora lo hemos hecho en televisión. Hago el programa que me gusta, donde te enteras de cosas y te lo pasas bien. Yo no sé hacer humor como lo puede hacer José Mota o Martes y 13. Yo necesito actualidad, llevarla a mi terreno y mezclarla con entretenimiento. Me siento cómodo así y eso se nota.
Hay varios magacines 'clásicos' de grandes cadenas que han introducido secciones de vídeos virales, como hace Aruser@s. ¿Sois conscientes?
No solo lo han introducido, sino que han cogido los mismos vídeos. Espero que algún día me envíen un jamón. Cuando el vídeo es muy viral a mí no me gusta. Los pongo a primera hora y me lo quito, pero cuando emites un vídeo muy raro, de algún país lejano, y luego lo ves en otro programa... es sospechoso. Pero el valor diferencial es que muchos programas ponen vídeos sin integrarlos y nosotros sí los justificamos en el discurso del programa. Poner vídeos por ponerlos no me seduce.
En la historia de la televisión de España, algunos han intentado hacer un morning show, como los americanos, per nadie lo había conseguido. ¿Por qué tú sí?
Tengo que agradecérselo a [Javier] Bardají, el consejero delegado de Atresmedia, porque me puse muy pesado. Yo tenía una oferta buena de otra cadena [Mediaset] y Atresmedia pujó por mí. Cuando me preguntaron qué quería hacer, dije Aruser@s y se sorprendieron, porque nadie lo había hecho antes. Me vieron tan ilusionado que me dejaron hacerlo. En España tenemos una gran cultura radiofónica por las mañanas, pero en televisión era impensable.
¿Has quitado oyentes a la radio?
Yo creo que no. Y tampoco he quitado mucha audiencia a otros programas de televisión. Creo que hemos formado una audiencia nueva con un público disperso -unos despistados cachondos- que no tenía un referente claro y los hemos ido aglutinando poco a poco. Son espectadores muy fieles.
Después de seis años y con estos resultados, ¿te ha vuelto a intentar fichar Mediaset u otra cadena?
La verdad es que una oferta directa no. Los contactos siempre surgen de una manera tímida y yo siempre los he intentado evitar porque tengo claro que quiero continuar en Atresmedia. Jugar a tener ofertas para aumentar un caché no va en mi estilo. Lo más honesto es decir que estás bien y que no quieres cambiar de aires.
La convivencia con Ferreras ha sido buena durante estos seis años y os ha respetado el horario. ¿Te esperabas que fuera tan fácil?
Eso fue lo primero que todos me decían. Pero debo reconocer que ha sido absolutamente respetuoso con nosotros. No ha tenido ningún tipo de injerencia en el programa, al revés, nos deja trabajar con naturalidad. Y salvo que haya algo espectacular, hemos mantenido nuestro horario. Y si alguna vez no ha ocurrido así, también ha sido por decisión mía. Cuando ha pasado algo, soy yo el primero que entiende que La Sexta tiene que hacer un especial y darlo. Me costaba más torear con José María García en la radio, porque mi programa iba después del suyo. Tenía que acabar a la 01.00 y a veces terminaba a las 02.15 (risas).
¿Has tenido algún pique con Susanna Griso por la lucha de audiencia?
No, no. Con Susanna tenemos muy buena relación. Por lo que he hablado con los jefes -no hablo mucho con ellos por no molestarles- lo que les importa es la suma de los dos programas, como grupo. Juraría que están encantados, porque sumamos de forma generosa respecto a la competencia.
¿Qué límites os pone Atresmedia a la hora de hablar de temas o personajes de otras cadenas?
Llevo muchos años en esto, empecé con 21 y tengo 63. Soy muy mayor y sé qué puede molestar o qué les puede poner en un compromiso. No hace falta que me llamen, porque yo ya sé lo que les puede perjudicar. Llevo seis años y no he provocado ningún incendio a Atresmedia. Es de cajón. He trabajado en la SER, en Cope y en todos los sitios he sabido cómo van las cosas y nunca he tenido ningún problema. Si estás en la Cope, por ejemplo, lo lógico es no arremeter contra la Iglesia. Eso no es censura, sino pura lógica. Ahora estoy en Atresmedia y entiendo que cualquier cosa relacionada con Mediaset se puede analizar de una forma que puede ser la óptima o no. Prefiero que no me tengan que llamar.
TVE te pilla más de refilón. ¿Cómo ves el fichaje de Broncano?
Además de ser un servicio público, entiendo que TVE quiera ser competitiva. Broncano es una opción para el access, como Carlos Latre para Telecinco, pero El Hormiguero y Pablo Motos llevan muchos años de ventaja como programa de entrevistas. Es lo mismo que pasó con Cuentos Chinos. Creo que para un access hay formatos más diferenciados que igual también podrían funcionar. Como apuesta, creo que TVE tiene que intentar no descabalgarse, a esa hora y otras. La gente sí que pasa por TVE -lo hace con el fútbol- otra cosa es que luego no les interese. Pero es una cadena fácilmente reflotable porque todo el mundo conoce La 1.
Relacionados
- Enigmática despedida de Pablo Motos en su última noche en Antena 3 antes de competir con Broncano: "Ahí lo dejo"
- El apabullante liderazgo de Alfonso Arús en La Sexta: 'Aruser@s' bate récord histórico con la mayor ventaja sobre sus rivales
- Antena 3 encadena tres temporadas de liderazgo total y consigue su mayor ventaja sobre Telecinco en 28 años
- Marina Monzón, la presentadora más madrugadora de Antena 3 Noticias, lo deja: "No ha sido fácil tomar la decisión"