De Anabel Pantoja a Dulceida: las influencers se visten de gala en la boda de Susana Molina

Una finca a las afueras de Madrid ha sido el romántico escenario elegido por la ex concursante de Gran Hermano para darle el "sí, quiero" a su chico, Guille del Valle, este viernes 13 de junio. Hasta allí se han desplazado las influencers más conocidas de las redes sociales, amigas de la novia, como Anabel Pantoja. La sobrina de la tonadillera ha acudido acompañada por su novio, David Rodríguez, y vestida con un diseño negro fluido de escote cruzado y tirantes 'black & white' de pedrería firmado por Rocío Osorno.

En marrón chocolate se ha presentado Nagore Robles, que conducía su propio coche. La tertuliana ha escogido un vestido de escote asimétrico y gran abertura lateral firmado por Miphai. Su novia, Carla Flila, ha optado por un tono burdeos en un diseño de corte clásico que dejaba un hombro al descubierto y cubría otro con un elegante foulard.

La pareja formada por Dulceida y Alba Paul también se encontraba entre las invitadas al enlace. La primera ha desafiado la mala suerte con un bonito diseño hecho a medida de JCPajares con de cuerpo rígido, falda de tubo y escote halter que le ha dado mucho juego gracias a unos detalles de gasa. Su mujer ha optado por una de las tendencias de la temporada: conjunto de pantalón y chaleco en nude con cinturón a juego y mocasines negros.

Marta Rimbau ha lucido un perfecto look de invitada con vestido satinado en corte sirena con un pronunciado escote en la espalda, enmarcado en dos sencillos volantes verticales que aportaban volumen.

Madame Rosa estaba espectacular con un vestido cut-out de inspiración flamenca con chaquetilla y falda de volantes, completamente bordado en pedrería y lentejuelas verdes.

Muy guapa también Melyssa Pinto, con un vestido midi de tubo en rosa pálido con bordados florales y escote lencero de Mango. La modelo ha protagonizado la anécdota del día al llegar al recinto con un chófer de excepción: Mario Casas. Al ver a los fotógrafos, el actor ha dado marcha atrás dejando a su chica a buena distancia y ella, nerviosa, ha terminado el bolso en el suelo y sus pertenencias esturreadas sobre la arena.

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