El mundo entero se conmocionó tras conocer que Liam Payne, ex componente de One Direction, había muerto este miércoles a los 31 años tras precipitarse desde un tercer piso de un hotel de Buenos Aires. El informe preliminar de la autopsia reveló este jueves que el cantante murió debido a "múltiples traumatismos" y padeció una "hemorragia tanto interna como externa". La Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°16 de la capital argentina ha señalado a través de un comunicado que se están investigando las circunstancias del caso como una muerte dudosa. Asimismo, todo parece apuntar que el compositor británico estaba solo durante la caída y que pudo atravesar algún tipo de brote producto del abuso de sustancias. Así las cosas, tras conocer las últimas informaciones del caso, se ha desvelado que Universal Music rompió su contrato con el cantante días antes de su muerte.
La compañía discográfica finalizó su contrato con Liam, ya que consideraban que su carrera en solitario estaba en crisis y no se podía remontar, tal y como han desvelado desde Daily Mail. "El anuncio para Liam fue devastador y no se recuperó. De todos los chavales de One Direction, Liam estaba, musicalmente hablando, en el camino equivocado", han explicado.
Asimismo, el citado diario ha asegurado que el equipo de relaciones públicas de Payne también renunció a trabajar con el cantante a principios de octubre. De momento, Universal Music ha optado por no hacer declaraciones sobre la finalización del contrato con el artista y se han limitado a enviar su más sentido pésame a los amigos y familiares de Payne. "Su legado vivirá a través de su música y de los innumerables fans que ha inspirado y que lo han adorado. Enviamos nuestro más sentido pésame a la familia y seres queridos de Liam", manifestó la compañía.
Días antes de su muerte, el ex componente de la boyband inglesa, que deja en vida a un hijo de siete años con la también cantante Cheryl Cole, también recibió otro varapalo. Maya Henry, exprometida de Payne, ordenó a sus abogados que enviaran una carta de cese y desistimiento al ex vocalista tras intentar contactar con ella reiteradamente. A principios de octubre, la modelo desveló a través de un vídeo de TikTok que Payne había llegado a extremos para ponerse en contacto con ellas después de su ruptura.
