En shock. Así se encuentran la familia y amigos de Caritina Goyanes, que ha fallecido este lunes en Marbella tras sufrir un infarto. Su marido, Antonio Matos, la ha llevado inmediatamente al hospital ante los primeros síntomas pero los médicos no han podido hacer nada por salvar su vida. Tenía 46 años y dos hijos, Pedro (13) y Minicari (10). La noticia ha pillado a su madre en Mallorca, donde pasaba unos días con su hermana Miriam Lapique tras enviudar el pasado 7 de agosto, y a su hermana Carla en Madrid, donde ya retomaba su rutina tras las vacaciones de verano. Los restos mortales de Cari ya se encuentran en el tanatorio de San Pedro, donde hace solo 19 días lloraban el fallecimiento del patriarca, Carlos Goyanes.
Las reacciones a la triste noticia han ido llegando a lo largo de toda la tarde. Amigos de Caritina aún llaman a su teléfono móvil con la esperanza de que todo sea un error, incapaces de creer lo que ha sucedido. "Estoy en shock, es que no tengo ni palabras", ha dicho Eugenia Martínez de Irujo. Igual de desconsolada Charo Vega, íntima de Cari Lapique: "No sé cómo va a poder procesar esto, tras la muerte de su marido. Me quiero morir. ¡Ay!", decía en el programa de Sonsoles.

Otro de los grandes amigos de la familia, Pedro Trapote, adelantaba que su mujer, Begoña García Vaquero, se dirigía a Marbella junto a otras amigas íntimas de Cari Lapique para acompañarla: "Mi mujer va camino del tanatorio, acabamos de despedir al padre e imaginamos cómo deben estar Cari y Carla. Todo el mundo las quiere y las respeta, han sufrido mucho por la muerte de su padre y ahora esto. Estamos anonadados, tristísimos. Cari no se merece este palo tan rotundo. Perder a una hija debe ser algo terrible", ha dicho.
Por su parte, Gunilla Von Bismarck, uno de los personajes más populares y queridos de Marbella, también se ha mostrado desolada: "No sé qué decir, estoy en shock. Me han mandado un mensaje para avisarme. No hay palabras. Cari es una mujer encantadora, ¿cómo se puede encajar dos golpes así tan seguidos? Para mí es mi familia, no tengo ni lágrimas. No sabemos qué ha pasado. Es muy duro, esto es lo peor que puede pasar".

La empresaria Maribel Yébenes, del círculo más cercano de Cari Lapique junto con Nuria González, desvelaba: "Estamos desolados y con una tristeza enorme. No nos entra en la cabeza. ¡Qué disgusto, qué injusto! Lo alegre y buena persona que era Cari, una maravilla de niña, lo tenía todo".

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