Jardineros de Carlos III estallan por las malas condiciones: hasta 11 han dejado de trabajar para él

Cuando el foco sigue puesto en la enfermedad de Carlos III, en la posible reconciliación con el príncipe Harry y otros asuntos que vertebran la actualidad de la Casa Real Británica, se ha publicado un explosivo artículo en The Times que da voz a antiguos jardineros del soberano británico en su casa de campo de Gloucester, conocida como Highgrove House. Varios jardineros que han dejado de prestar sus servicios a la familia real británica en esta residencia lamentan las malas condiciones que dicen haber tenido.

Entre otras cosas, se quejan de que su trabajo estuviera remunerado en solo 8,90 libras la hora. "Es como si dijeran: 'Deberías estar agradecido de que te hayamos dado un trabajo y de que estés trabajando para el rey, la persona de mayor rango del país'", expone uno de ellos, indicando que en otros jardines se cobra mejor que en los de la Casa Real Británica. La cantidad equivale a 10,30 euros.

Otros antiguos empleados también lamentan las formas de Carlos III y sus altas exigencias a la hora de quedarse con un jardinero que fuera de su completo agrado. Uno de estos hombres asegura que el padre de Guillermo de Inglaterra y Harry dijo "quita a ese hombre de mi vista". Este jardinero asegura que no pasó el periodo de prueba por no saber cómo se llamaba una de las flores del jardín. Algo parecido le pasó, supuestamente, a otro de los que ahora alzan la voz. Este denuncia que el monarca tuvo una actitud despectiva cuando indicó mal el nombre de un arbusto japonés de hoja caduca.

Esta, además, no es la primera vez que se habla de las supuestas malas condiciones y las quejas de trabajadores que han pasado por esta residencia de campo, una de las favoritas de Carlos III. Hay que recordar que hace unos cuatros años ya se encargó incluso una evaluación externa ante la escasez de personal y otros problemas en esta residencia. Desde hace tres años, cuando ascendió al trono tras la muerte de Isabel II, 11 de los 12 jardineros del marido de la reina Camila han renunciado a su trabajo o han sido despedidos por estas prácticas mencionadas arriba.