Empresas y finanzas
La banca española ya aplica los créditos a las familias más caros de toda Europa
- El tipo medio de las hipotecas se sitúa en el 1,88%, y el de consumo en el 7,35%
- La banca ofrece el crédito más caro a pesar de la guerra para captar clientes
Fernando Tadeo
El precio de los créditos a las familias en nuestro país se sitúa ya a la cabeza de Europa a pesar de la guerra comercial que está librando la banca para captar clientes y aumentar su negocio. Aunque en el último año el tipo medio ha caído como consecuencia del retroceso del euríbor, en Italia y Bélgica por ejemplo las hipotecas se han abaratado mucho más que en nuestro país y éstas ya son más caras. En consumo, las tasas ya eran las más elevadas de todo el Viejo Continente salvo en Grecia, cuya situación económica y financiera es muy diferente.
El tipo de interés, sin contar comisiones, de los bancos para los créditos para la adquisición de una vivienda se situaban en julio en un 1,88%, mientras que para otro tipo de bienes y servicios, en un 7,35%.
La media de la zona euro, según los datos recopilados por Bankia Estudios a partir de un informe mensual del BCE, sitúan la tasa que reclaman las entidades en el 1,82% para las hipotecas y en el 5,65% para consumo.
Tradicionalmente España siempre ha contado con uno de los sistemas hipotecarios más baratos del Viejo Continente, una circunstancia que ha permitido un mayor acceso de los ciudadanos a una vivienda. Pero, la necesidad de la banca para aumentar su rentabilidad y el impulso de los préstamos a tipo fijo han supuesto un escenario opuesto.
De hecho, el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, reclamó a principios de septiembre al Congreso medidas para acabar con la financiación a tipos variables con el fin de evitar posibles problemas de pago cuando el euríbor suba a pesar de que conlleve un coste superior para los clientes. Se espera que en la primera mitad de 2019 el euríbor vuelva de nuevo al terreno positivo, después de tres años bajo cero.
Una parte de las entidades están apostando por ofertas gancho para atraer clientes en el segmento hipotecario, ofreciendo hipotecas desde el 0,79% y 0,89% más euríbor desde el momento de la constitución o a partir del segundo año de vida del préstamo.
En los últimos doce meses, el tipo medio en España ha bajado como en la zona euro, un 0,06%, pero en Italia y en Bélgica ha descendido 0,28 y 0,26 puntos porcentuales, lo que ha provocado los créditos para pisos tengan un precio inferior que en nuestro país. Alemania es el único mercado donde ha subido, igualando así el 1,88% reclamado por la banca hispana.
Por su parte, los créditos al consumo españoles se abarataron casi el doble que en la zona euro, 0,16 puntos porcentuales, pero aún se sitúan a la cabeza del continente. En Francia, por ejemplo, su coste está a la mitad.
Teniendo en cuanta los segmentos de financiación que más demandan los hogares, sólo Grecia cuenta con los precios más elevados que España, al venderse con un interés del 9,71% para bienes y del 3,04% para vivienda.
Mejorar la rentabilidad
Las entidades están intentando mejorar el rendimiento de las carteras con los nuevos préstamos, ya que las operaciones anteriores a la crisis, sobre todo, están lastrando la rentabilidad, ya que entonces las hipotecas, por ejemplo, llegaron a caer hasta euríbor más un 0,17%.
De hecho, en el saldo vivo el tipo medio hipotecario disminuye hasta el entorno del 1,3%, una circunstancia que está lastrando los ingresos del sector en un momento en que el volumen aún no crece.
Los bancos esperan que a finales de este año o principios del próximo el saldo de financiación a familias crezca al ser superiores los importes de las nuevas transacciones que los vencimientos y amortizaciones de deuda por primera vez desde el estallido de la crisis.
Para incrementar los márgenes y, por tanto, los beneficios, los bancos también han reducido a la mínima expresión los intereses que ofrecen por los depósitos. Con diferencia desde hace tiempo pagan el menor interés de todo el Continente. El tipo medio en nuestro país es de 0,06%, mientras que en la zona euro es del 0,3% por las imposiciones nuevas. En Francia sube hasta el 0,78%.