Alejandra Kindelán, la reina de la banca que rubricaría el 'soy mayor, no idiota'
- Defiende el papel de la empresa para dar solución a problemas sociales
- Afrontará los retos que representan los criptoactivos y el euro digital
- Dejará sus cargos en el Santander para asumir la presidencia de la patronal
Eva Díaz
La Asociación Española de Banca (AEB) se feminiza 45 años después de su nacimiento y con cuatro presidentes a su espalda: Rafael Termes, José Luis Leal Maldonado, Miguel Martín Fernández y José María Roldán Alegre. Llega el turno de Alejandra Kindelán, que será nombrada presidenta de la patronal bancaria el próximo 5 de abril y marcará un antes y un después en la organización al convertirse en la primera mujer al frente de la AEB.
Sin embargo, su aportación a la patronal va mucho más allá del propio hito y le distingue de sus dos últimos antecesores, que tenían un perfil más técnico procedentes del Banco de España, que llega desde dentro de una entidad financiera.
Con 50 años, nació en Caracas en septiembre de 1971, tiene toda una trayectoria profesional vinculada al sector, desde sus inicios como consultora para el Banco Mundial, hasta saltar temprano al Banco Santander (previo paso por el Central Hispano) donde en la actualidad es responsable del Servicio de Estudios, Public Policy y Relaciones Institucionales del grupo financiero y miembro del consejo de administración de Santander Consumer Finance (SCF). Para acceder a su nuevo cargo, dejará todos sus puestos en el grupo bancario.
Kindelán no es una desconocida de la AEB ni la AEB lo es para ella. Como experta en regulación bancaria, ha mantenido una estrecha relación con la patronal en el marco de sus funciones y a través de los comités en los que están representadas las entidades asociadas. De hecho, el propio Roldán, quien le cede el sillón de la presidencia, aseguró ayer, apenas horas después de conocerse la propuesta a su nombramiento, que la conoce desde hace "muchos años" y la elección ha sido la "acertada".
Conciliadora e intelectualmente inquieta, quienes la conocen destacan su capacidad para captar la sensibilidad de los temas desde el punto de vista social. Una visión que coincide con la descripción que la propia Kindelán hace de sí misma en su perfil de LinkedIn donde destaca su apuesta por el diálogo entre personas, instituciones y gobiernos que pueda conducir a una vida mejor. "En mis años en el Banco Santander, he aprendido lo importante que es que las empresas se posicionen en temas que importan a la gente, y el valor de fomentar el talento y el liderazgo femenino", describe.
Los retos que afronta
Defensora de las mujeres reconocido así por ella misma, desde su entorno también destacan que tiene una visión más moderna a la hora de hacer banca, con un enfoque más responsable bajo el prisma de que cualquier decisión de negocio tiene un posterior impacto, también en lo social, y dándole mucha importancia a la reputación del sector. De hecho, ese será uno de los nuevos retos que afronte al frente de la patronal de la banca, como bien se ha evidenciado en las últimas semanas con los planes puestos en marcha por el sector para mejorar el servicio a las personas mayores, tras la repercusión de la campaña encabezada por Carlos San Juan bajo el reclamo de 'soy mayor, no idiota'.
Con una vertiente del capitalismo más responsable, defiende que las cosas se pueden arreglar desde un ámbito de colaboración público-privada. Y aquí entronca con otro de los desafíos actuales del sector, participar en la canalización de los fondos europeos para la reconstrucción para eficientar la inversión y garantizar la capilarización de los mismos. Un reclamo sobre el que el Ejecutivo, de momento, se mantiene de perfil.
Alejandra Kindelán llega a la patronal en un escenario de fortaleza para la banca, tras reconstruir el beneficio perdido durante la pandemia, solidez desde el punto de vista de la solvencia y un futuro que adelanta una mejora de la rentabilidad ante lo que parece una inevitable subida de los tipos de interés ante la pujante inflación. No todo, sin embargo, es optimismo, y la nueva responsable de la patronal también tendrá que lidiar con las nuevas incertidumbres que envuelven al sector, como el impacto que pueden tener los criptoactivos, la puesta en marcha del euro digital o la amenaza de las bigtech para el negocio bancario. Para estos asuntos, fuentes cercanas a la financiera, destacan la importancia de su conocimiento en materia de regulación.
Al tanto de la actualidad, buena haciendo equipos y dispuesta a escuchar, la propuesta de su candidatura ha contado con un amplio consenso entre las entidades asociadas a la AEB, entre las que están el Santander, banco donde procede; BBVA, Sabadell, Bankinter, Abanca o Deustche Bank. Kindelán relató hace escasos tres meses, durante su participación en SantanderWomenNow, que de su paso por Wellesley College, una universidad de mujeres en la costa este de EEUU, se llevó "una mochila" que le ayudó a afrontar la vida como mujer, "llena de sensibilidades y herramientas". Una mochila que le acompañará ahora a la presidencia de la patronal.