Empresas y finanzas

El Sabadell prevé volver a un dividendo prudente y limita al 5% la mora máxima por la crisis

  • La entrada de impagos solo le supondría 1,2 puntos más en su ratio
  • El banco financiará el ajuste de empleo con la venta de una cartera de deuda
El consejero delegado del Sabadell, Jaume Guardiola.

Eva Díaz

El consejero delegado del Banco Sabadell, Jaume Guardiola, ha reconocido este viernes en la rueda de prensa de presentación de resultados de la entidad, que el grupo tiene la intención de recuperar el dividendo en cuanto el Banco Central Europeo (BCE) levante el veto al sector. No obstante, Guardiola aseguró que esta propuesta aún tiene que aprobarla el consejo de administración y, en todo, habría que ser "cauteloso" ante la incertidumbre de la actual crisis económica. A diferencia de sus competidores, el grupo financiero aún no se había pronunciado al respecto.

De momento, el consejo de administración del banco de origen catalán no ha dado luz verde a ninguna propuesta sobre el dividendo, como sí han hecho los equipos gestores del Santander, Unicaja o Liberbank, tras anular el reparto el pasado mes de abril. 

Por otro lado, Guardiola ha señalado que el banco espera la mayor entrada de morosidad por los efectos de la pandemia en 2021. Sin embargo, el consejero delegado considera que aún así el ratio de mora no alcanzará el 5%. El grupo ha cerrado los nueve primeros meses del año con una tasa del 3,8% frente al 4,1% que tenía un año antes.

El número dos de la entidad explicó que el banco ha puesto en marcha un plan de ajustes en España puesto que ha confirmado la aceleración de las tendencias que ya estaban en el uso de las soluciones digitales. "El banco iba haciendo políticas en ese entorno para mejorar la eficiencia, pero ahora ha llegado el momento de dar un paso más", dijo. La entidad tiene la intención de recortar unos 2.000 puestos de trabajo. Guardiola aseguró que aún en están iniciando las conversaciones con los sindicatos, aunque la idea es basar este ajuste en bajas incentivadas y prejubilaciones sin tener la necesidad de lanzar un ERE. 

El banco, que iniciará el proceso este trimestre, prevé que esté finalizado antes del segundo trimestre de 2021, según el director financiero de la entidad, Tomás Varela. El plan de España y la aceleración de los recortes en la filial británica TSB (se reducirán 900 puestos y 165 oficinas el año que viene) se va a financiar con las plusvalías de la venta de parte de la cartera ALCO (deuda pública). El ajuste generará ahorros de 115 millones de euros netos para la entidad de los que ya se le ha descontado la caída de ingresos del portafolio vendido. El 75% de este impacto positivo se conseguirá en 2021, para alcanzar el 100% en 2022.