La reunificación de créditos, un negocio por explorar para los bancos

La reunificación de créditos es un negocio que brinda oportunidades al sector financiero español para aumentar su rentabilidad, evitando que las familias asfixiadas económicamente por sus deudas entren en morosidad. Esta práctica, a la que de momento las entidades se resisten a materializar, gana posibilidades en el nuevo entorno que ha desatado la alarma del coronavirus, cuyas consecuencias son impredecibles pero que, probablemente, disparará los impagos por el parón económico.

Los expertos calculan que la banca podría llevar a cabo sin apenas riesgo reunificaciones crediticias por un saldo de más de 1.000 millones. Desde la Agencia Negociadora, un firma especializada en este tipo de operaciones, se apunta a que con la agrupación de préstamos los bancos podrían incrementar en un 50% la rentabilidad que obtienen por las hipotecas -que serían el grueso de las transacciones-. Y estima que el volumen de las mismas podría alcanzar al menos los 1.200 millones. Durante, estima que durante el confinamiento (en los últimos 30 días) han crecido un 14%.

Según los cálculos de su director general, Luis Javaloyes, por la nueva financiación (en la que se incluirían las deudas derivadas de tarjetas de crédito y para adquisiciones de bienes de consumo), las entidades podrían exigir de media un tipo de interés del 3%, frente al 2% de media que reclaman por una hipoteca media a 30 años.

A cambio, eso sí, tendrían que renunciar a cobrar tasas de hasta el 20 o más por ciento que piden por las tarjetas, pero la cuantía de estas operaciones es residual frente a la de un crédito para la compra de una vivienda.

A juicio de Javaloyes, solo el 40% de los grupos financieros están dispuestos a negociar las reunificaciones con sus clientes. Sostiene que la agrupación es una alternativa para estas entidades, ahora que la ley hipotecaria facilita el cambio o robo de los préstamos inmobiliarios, ya que podrían captar actividad y con unos retornos mayores.

El director de Agencia Negociadora, que ha visto incrementar la intermediación de estas operaciones en un 30% en 2019, recalca que la reunificación ayuda a las familias a afrontar sus compromisos y que la morosidad es de tan solo el 0,5%, muy inferior a la de cualquier tipo de préstamos.

El importe de las reunificaciones dirigidas a personas que aún están al corriente de los pagos ronda los 98.000 euros y el esfuerzo financiero posterior se reduce hasta el 25%.

Menos de 100 millones al año

Se estima que la agrupación de préstamos que la banca realiza de manera anual oscila solo entre los 50 y 100 millones, una cantidad que resulta poco apreciable, ya que ni todas las entidades analizan casos ni no todos los casos son aprobados por los comités de riesgos. En las operaciones en las que participa la Agencia Negociadora únicamente el 2% son aprobadas. Estas conllevan la anulación de una financiación de 7.500 euros, que corresponde principalmente a las denominadas tarjetas revolving.

Precisamente, estos plásticos están en tela de juicio, por los intereses que han venido aplicando los bancos. El Tribunal Supremo ha calificado recientemente de usurarias las tasas de estas visas por encima del 20%. Las entidades ya están modificando los intereses, como es el caso de Wizink.