Situación de corto plazo:
Las bolsas europeas se mostraron ayer incapaces de seguir la estela alcista de Wall Street y de revolverse al alza de un modo contundente, que es lo que exigíamos de cara a poder confiar en la posibilidad de una reestructuración alcista fiable.
Si esto le sumamos el deterioro que supone que el Eurostoxx 50 (SX5E.ST) haya perdido la zona de soporte clave de los 3.300 puntos y que el DAX (DAX.XE) haya comenzado a ceder soportes clave de 11.830 puntos, nos encontramos con un contexto en el que ha aumentado exponencialmente el riesgo de seguir viendo una continuidad de la corrección bajista de los últimos meses, algo que nos invita a reducir la exposición recomendada a bolsa para protegernos de esa posibilidad.
Nuestra intención es seguir reduciendo esa exposición a bolsa si el deterioro va a más y para ello es preciso que soportes análogos a los del DAX y el Eurostoxx 50 sean perdidos por el resto de principales referencias europeas, como son el CAC (PX1.PA) y el Mibtel (I945.IT), donde también tenemos abiertas sendas estrategias alcistas. Estos soportes son los 5.000-5.050 puntos del CAC 40 y los 21.300 del Mibtel italiano. También estamos pendientes de ver si al otro lado del Atlántico los principales índices norteamericanos logran salvar una situación complicada y para ello no deberían de perder los mínimos del año.
Situación tendencial:
La tendencia que define la principal referencia europea en el largo plazo es alcista pero llama la atención el nuevo fracaso del Eurostoxx 50 en su versión total return (SX5T.ST) tras alcanzar su resistencia creciente de medio/largo plazo que discurría por los 7.500 puntos. Desde ahí las ventas vuelven a presionar al índice y estamos viendo durante los últimos meses una corrección que, de momento, tiene visos de ser una simple fase de ajuste de la última gran subida, tras la cual lo más probable es que la tendencia alcista principal vuelva a retomarse.