Deporte y Negocio

La justicia da la razón a la RFEF por el partido de Miami: el Girona-Barcelona no debía jugarse en EEUU

  • Un juzgado mercantil asegura que la RFEF no fue desleal por prohibirlo
  • Recuerda que la organización de partidos debe estar coordinada por LaLiga y RFEF
Foto: EFE.

Sergio de la Cruz
Madrid,

La justicia ha dado la razón a la Federación Española de Fútbol (RFEF) en el contencioso con LaLiga por la negativa federativa a permitir el Girona-Barcelona de la temporada 18/19 en Miami. El juzgado de lo Mercantil número 12 de Madrid ha estimado oportuna la acción de la RFEF al considerar que no sobreactuó y que tampoco fue desleal con la patronal cuando decidió rechazar que el partido se disputase en EEUU.

En un comunicado, el Poder Judicial informa de la decisión del juzgado y asegura que la RFEF "no incurrió en conducta ilícita de competencia desleal al no autorizar de inicio su celebración". La magistrada titular del juzgado dictamina que la organización de los partidos de LaLiga corresponde a la patronal, pero siempre en necesaria coordinación con la RFEF.

Aunque la postura de la RFEF, expresada en multitud de ocasiones por su presidente, Luis Rubiales, fue clara en su rechazo a la disputa del partido en EEUU, el juzgado sí aclara que la negativa de la federación no llegó a ser oficial, dado que el Barcelona renunció de manera unilateral a jugar el encuentro en Miami.

Se trata del segundo revés en una semana para LaLiga, después de ver cómo la FIFA rehusara avalar los partidos de competiciones ligueras fuera de las fronteras nacionales.

La sentencia resuelve, por el momento, un litigio que acumula un año y medio de capítulos de tensión entre LaLiga y RFEF. Tras firmar un acuerdo con la empresa Relevent enfocado a la disputa de un partido en EEUU, la patronal comunicó que el primer encuentro elegido era el Girona-Barcelona. La respuesta de la federación fue un contundente 'no' que provocó el comienzo de un largo desencuentro entre Luis Rubiales y Javier Tebas, con duros cruces de acusaciones y una petición de inhabilitación de Rubiales por parte de LaLiga respondida con una querella desde la entidad de Las Rozas.

Desde el primer momento, LaLiga encontró una fuerte oposición a su propuesta. Pese a la voluntad de los equipos contendientes, la patronal recibió el rechazo de RFEF, AFE (sindicato mayoritario de jugadores) y de la FIFA, que guarda buenas relaciones con la federación. También se especuló con el interés del Gobierno en que el partido no tuviese lugar, dadas las implicaciones que podría tener con el conflicto independentista en uno de sus momentos de mayor tensión.

De hecho, la del Girona-Barcelona fue la primera intentona, pero no la única. El pasado octubre, LaLiga anunció su objetivo de llevar el Villarreal-Atlético a Miami, pero la justicia tumbó esta propuesta al no conceder a la patronal la cautelar necesaria para que el partido se pudiese jugar.

LaLiga anuncia que recurrirá la decisión judicial y que luchará por que el sueño de jugar fuera siga vivo

LaLiga ha anunciado que recurrirá una decisión que respeta pero no comparte. Tendrá que hacerlo en la Sección 28 de la Audiencia Provincial, donde prolongará un litigio para defender lo que, en su opinión, es su derecho y el de todos los clubes: "Jugar un partido de LaLiga en el extranjero, como ya hacen otras ligas de otros deportes como la NBA o la NFL".

"Sabemos que no es un camino fácil, pero consideramos que debemos seguir en la línea marcada para, no solo crecer, si no también defendernos de la gran competencia global", han asegurado desde la patronal.

Por su parte, la RFEF ha reaccionado con satisfacción a la medida, una "extensa, rigurosa y documentada resolución judicial, por cuanto reconoce las competencias federativas y el hecho de que la RFEF ha actuado siempre con arreglo a derecho y lealmente".