Altamira doValue entra en Angeco para posicionarse en el negocio del recobro

Altamira doValue se ha adherido a la Asociación Nacional de Entidades de Gestión de Cobro (Angeco) cuando ha redoblado su apuesta por el negocio de recuperación de deuda. La entrada de este servicer en una organización donde, sobre todo, hay empresas de recobro (cuenta con 75 asociados) podría ser preludio de otras adhesiones de compañías que, a pesar de ofrecer también servicios de recuperación de deuda, están más posicionadas en el mercado por la gestión de activos y carteras inmobiliarias.

En Altamira doValue explican la asociación como un "paso natural", ya que siempre han realizado gestión de préstamos. En la actualidad, el servicer se está posicionando de forma clara en la gestión del crédito corporativo con especial foco además en las pymes.

Su grupo gestiona más de 137.000 millones de euros en activos financieros e inmobiliarios en cinco países, con un peso muy superior de la gestión de deuda mientras que en España "los activos financieros e inmobiliarios se han distribuido de forma equilibrada en los últimos años".

Fuentes de la compañía indicaron que en el nuevo ciclo que se abre "todo apunta a que el peso de la gestión del crédito va a ganar relevancia", y Altamira doValue lleva "meses" posicionándose ahí "con servicios muy especializados, tanto en corporativo como de manera específica en el segmento pymes".

El paraguas de Angeco ofrece otras oportunidades en estos momentos. El Gobierno debe transponer la directiva que regulará por vez primera la actividad de la recuperación de deuda en España y la asociación cuenta con el respaldo de sus asociados para defender los intereses de la industria en su elaboración.

A falta de regulación, Angeco adoptó hace años un código de autorregulación que establece protocolos y criterios de actuación que dan confortabilidad además a las entidades para contratar los servicios de recuperación de deudas.

Antes de la entrada de Altamira doValue, las firmas asociadas a Angeco empleaban a 20.500 personas que el pasado año gestionaron 115 millones de expedientes y recuperaron 10.598 millones de euros, equivalente al 1% del PIB.