Moody's rebaja la calificación crediticia de Grifols pese a la venta de Shanghai Rass
- Baja su nota de B2 a B3, deuda con clasificación de grado de especulación
- La deuda de Grifols es elevada pese a su reciente desinversión
elEconomista.es
Moody's ha rebajado la calificación crediticia de Grifols, según el rating que ha publicado este miércoles la agencia. Esta ha colocado a la farmacéutica en un escalón inferior al que se encontraba, pasando de tener una nota de B2 a B3. En todo caso, su deuda ya estaba bajo la clasificación de grado de especulación.
La firma de rating puso a Grifols en revisión en marzo y este miércoles ha confirmado que baja su nota. Ni siquiera la venta del 20% de Shanghai Raas a Haier por parte de Grifols ha evitado el 'tijeretazo' de Moody's. "La rebaja a B3 refleja el todavía elevado apalancamiento de la compañía, incluso teniendo en cuenta la reducción derivada de su reciente venta de activos, y una menor recuperación de la esperada de su flujo de caja", explica el informe.
Pero este no es el único riesgo que ve la calificadora, que también cita entre las razones de la rebaja la mala gobernanza de la compañía y su opaca estructura. Moody's detalla que hay dudas sobre el desempeño financiero de la farmacéutica, su gestión del riesgo o con las transacciones entre las distintas sociedades. También pone en cuestión el reciente cambio en la dirección de la compañía.
En febrero, la firma española presentó sus cuentas anuales sin el sello del auditor. Por otra parte, hace tres meses, Nacho Abia se estrenó en el cargo de consejero delegado, en un intento de la compañía de aplacar la crisis abierta en enero por el informe de la bajista Gotham City Research.
Moody's también explica que, pese a que la firma ha emitido deuda y podrá con ello hacer frente a sus vencimientos, además de la venta de Shanghai Raas, su liquidez solo está asegurada para los próximos 12 meses. "Más allá de ese plazo, el mantenimiento de una liquidez adecuada dependerá la vuelta a una generación de caja positiva, algo que todavía no se ha materializado", señala la nota, que considera que Grifols no lo logrará este año, sino en 2025.
A finales de abril, Grifols levantó 1.000 millones en una colocación de deuda garantizada. La perspectiva de la deuda de la compañía es estable, ya que la de rating espera que los beneficios de la española y su flujo de caja libre vayan recuperándose en los próximos 12 a 18 meses.