PSOE y Podemos no acercan posturas: las posiciones siguen "muy alejadas" de un pacto de gobierno
- Con todo, los Iglesias siguen siendo "socios preferentes"
Eduardo Ortega Socorro
Según han desvelado fuentes socialistas, el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, recibió en la tarde del lunes en el Palacio de la Moncloa al líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias. La reunión iba encaminada a negociar los apoyos para la investidura del candidato del PSOE. Sin embargo, el encuentro solo sirvió para contrastar la lejanía de ambas partes.
Así lo indican fuentes conocedoras del encuentro, que confirman la cita entre los líderes de ambos partidos, pero también que "las posiciones están muy alejadas".
Fórmula
No es difícil imaginar el por qué. Para empezar, está la fórmula del futuro ejecutivo. Los portavoces de la formación morada insisten, en todas sus intervenciones públicas, en que quieren formar parte de un gobierno de coalición con los socialistas, con miembros de Unidas Podemos en él. Una reclamación que desde el PSOE se ha denegado reiteradamente, optando por un gobierno de cooperación o colaboración, en el que se podrían introducir independientes.
Además, están las diferencias programáticas. Iglesias y los suyos quieren llevar a cabo profundas reformas fiscales y laborales, yendo mucho más allá de las propuestas del PSOE sobre todo en el mercado de trabajo.
Socio preferente
Sin embargo, parece que Unidas Podemos ha rebajado sus peticiones en este campo para intentar limar asperezas con los socialistas. Esta sería la lectura de que hayan renunciado a la derogación total de la reforma laboral y hayan decidido conformarse con la supresión de los aspectos más lesivos.
En cualquier caso, los socialistas aseguran que "se sigue con la máxima disposición de entendimiento" y Unidas Podemos es "socio preferente".
Negociaciones discretas
Mientras, desde la formación morada precisan que tanto Sánchez como Iglesias "ser reunirán y hablarán mucho en estas próximas semanas" y reiteran que su intención es que las negociaciones sean lo más discretas posibles.
Ocurra lo que ocurra en estas negociaciones, el PSOE no se plantea que los baches que puedan surgir retrasen la investidura, que se debe celebrar "en breve", posiblemente en julio. De hecho, según indicó el propio José Luis Ábalos, 'número 3' de los socialistas, Sánchez se presentará al debate de investidura aunque no tenga garantizados los apoyos.