Opinión
Energía: los altos precios persistirán
elEconomista.es
El Foro de Energía de elEconomista volvió a reunir, con motivo de su sexta edición, a los principales protagonistas de este sector en nuestro país. En este año lo hace además en el momento más oportuno, cuando prosigue la crisis provocada por los altos precios de la electricidad, y el Gobierno acaba de anunciar nuevas acciones contra este problema.
No puede extrañar el escepticismo que estas últimas iniciativas del Ejecutivo despertaron entre los participantes en el Foro. Las futuras subastas de renovables o la reactivación del mercado a plazos, para que comercializadoras y clientes industriales tengan acceso a la electricidad a precios menos volátiles, sólo tendrán efectos en el largo plazo. Por el contrario, en las próximas semanas, seguirán actuando con la misma intensidad los grandes culpables del fuerte encarecimiento del recibo de la luz: los altos precios del gas y de los derechos de emisiones de CO2. No hay paliativos en ninguno de los dos casos. En lo que respecta al gas, el Foro de elEconomista dejó claro que nada se avanzó en los últimos años para reducir la alta dependencia española respecto a este hidrocarburo. De hecho, esta última amenaza es tan real que Enagás ya se moviliza para elevar los permisos de descarga (slots) con objeto de que puedan llegar más buques cargados de gas a nuestras costas y se evite la escasez en invierno. En cuanto a la subida de los derechos de emisión, es inevitable si se considera el alto coste que trae aparejada una transición ecológica tan acelerada como la que la UE está ya acometiendo, a un ritmo mucho más alto que todas las demás grandes áreas económicas.
Las nuevas medidas del Gobierno nada pueden contra los factores que a corto plazo provocan el encarecimiento
En el sector energético, por tanto, se da por descontado que los altos precios de la electricidad se mantendrán hasta la primavera. Un periodo tan largo de precios altos en un suministro básico plantea así un desafío de primer orden para una recuperación económica que aún está muy lejos de haberse consolidado.