Opinión
Pedro, ¿tú sabes lo que es una nación?
- Iceta fue quien llamó a Ferraz para incluir la referencia al Estado plurinacional
José María Triper
Día de San Isidro de 2017. Transcurría el debate de las primarias del PSOE entre los tres aspirantes a suceder a Alfredo Pérez Rubalcaba al frente del partido cuando Patxi López se dirigió directamente a Pedro Sánchez, con Susana Díaz, de testigo, para espetarle: "Pedro, ¿tú sabes lo que es una nación? Pregunta ante la que el interpelado, tras unos momentos de duda respondió entre balbuceos que es "un sentimiento que tiene muchísima ciudadanía, por ejemplo en Cataluña, por ejemplo en el País Vasco, por razones culturales, históricas o lingüísticas".
Momento este en el que quien fuera lehendakari en el Gobierno vasco aprovechó para explicarle, como hace un profesor ante un alumno deficiente, la diferencia entre la "nación política, que conlleva soberanía y la consecución de un estado independiente, y la "nación en términos culturales" que es la pertenencia a una lengua, a una historia o a una tradición, que no lleva a la consecución de ningún estado. Recordándole, además, que en el caso de Cataluña "los socialistas estaremos siempre radicalmente en contra" de la primera de las acepciones.
Pues bien, transcurridos dos años y medio de aquel episodio, Pedro Sánchez sigue sin saber lo que es una nación. O lo que es más grave, no quiere o no le interesa saberlo, mientras escucha y se doblega ante los sofismas y caprichos del veleidoso Miquel Iceta, que, como apuntaba recientemente Pablo Casado, y corroboran algunos socialistas de la llamada "vieja guardia", no sólo manda en el PSC sino que "parece que es quien manda también en el PSOE en toda España".
Los mismos socialistas que confirman que fue Miquel Iceta quien llamó el pasado martes a Ferraz para exigir que se volvieran a incluir en el programa electoral las referencias a las declaraciones de Barcelona y de Granada, en las que el sanchismo reconoce el "estado plurinacional" de España y se pronuncia a favor de una reforma constitucional para instaurar un Estado federal. Un retorno a esa equidistancia que el socialismo ha mantenido siempre en Cataluña y un guiño a los independentistas catalanes por si Sánchez vuelve a necesitar sus votos para seguir en La Moncloa y "para que el propio Iceta se postule como paladín de un nuevo Tripartito en esa comunidad".
El jefe del Ejecutivo mintió en la entrevista que concedió a Susana Griso
Y mientras en Ferraz se apresuraban a cumplir las órdenes que llegaban desde Barcelona, Pedro Sánchez le mentía a Susana Griso en televisión atribuyendo el cambio programático a la filtración de un borrador incompleto y a la transparencia del PSOE.
Un presidente en funciones que se ha convertido en el más fiel discípulo de Maquiavelo en eso de considerar la política como "el arte de engañar". El mismo Sánchez que prometió convocar "elecciones inmediatas" en la moción de censura que le llevó a La Moncloa y que las convocó año y medio después y tras ver como sus socios le tumbaban su proyecto de Presupuestos. El Sánchez que plagió su tesis doctoral, el que colocó a su mujer por el dedo en una institución en la que no se sabe qué hace y cuyo sueldo es tan opaco como las maniobras para aplazar la sentencia de los ERE, el mismo que ha nombrado a un comisario político para controlar los informativos de TVE en la antesala de las elecciones según denuncian los profesionales, el que ha colocado a la mitad de la Ejecutiva del PSOE y a casi todo su comité electora la frente de empresas y organismos con sueldos públicos, y el mismo que pasará a la historia no por sus méritos sino por ser el primer presidente del Gobierno expedientado por la Junta Electoral por violar la Ley Orgánica del Régimen Electoral al convertir, el su ministra portavoz, la sede del Gobierno del Estado en el escenario de la propaganda socialista.
El mismo Sánchez, en fin, que ha puesto al chef Tezanos al frente de la cocina del CIS cuya última encuesta electoral es contraria a las que publican al resto de las instituciones y empresas privadas de investigación sociológica, y que volvía a ser desmentida este viernes por el tracking que resume la totalidad de los sondeos y que da 120 escaños al PSOE, tres menos de los que tenía y muy lejos de los 150 que le da Tezanos, 98 al Partido Popular que roza el centenar y supera en casi 30 escaños a los que le atribuye el CIS; 40 a Vox que doblaría el pronóstico del CIS y 33 y 14 a Podemos y Ciudadanos, respectivamente. Nos merecemos un Gobierno que no nos mienta.