Motor
Probamos el Cupra León VZ e-Hybrid, deportividad con 'cero emisiones'
- Combina un interesante motor de gasolina de 150 caballos con otro eléctrico de 115 CV y aporta la etiqueta "0 emisiones"
- Esta versión VZ es la enchufable más deportiva, con 245 CV pero hay otra con los mismos motores y 204 CV más tranquila
Carlos Cancela
La marca Cupra tiene un modelo exclusivo, el Formentor, que acumula el 90% de sus ventas, pero tiene otros modelos como el Ateca o el Leon que probamos ahora en su versión híbrida enchufable y por supuesto el Born, su primer eléctrico.
La prueba de esta semana corresponde al Cupra Leon, pero en una versión muy especial ya que combina la deportividad propia de los modelos de la marca premium de Seat con la etiqueta "0 emisiones". Una buena combinación si se adapta a nuestras necesidades concretas, si tenemos un enchufe para el día a día y si buscamos una etiqueta para movernos por la ciudad con libertad.
Un vehículo muy interesante porque aporta esa etiqueta, que facilita la movilidad en el centro de las ciudades. Pero sobre todo porque permite recorrer cada día hasta 59 kilómetros en modo solo eléctrico según los valores homologados. Con ello se convierte en un primer paso razonable para poder acceder a la movilidad eléctrica, que en pocos años será obligatoria en toda Europa. Un primer paso que nos evitará dejarnos tirados al quedarse la batería a cero.
El Seat Leon original, y mucho más las versiones de Cupra, son modelos muy deportivos, con un dinamismo y un estilo de conducción propio de conductores muy dinámicos. Y es que sobre la base de la plataforma MQB Evo, en la que se basan los Golf, Audi A3 o Seat Leon, esta variante Cupra aporta su firma propia y más exclusiva. Eso significa que dispone de una suspensión más dura y carrocería rebajada en altura, con un bastidor retocado para buscar ese dinamismo máximo. Y también un chasis activo, el denominado DCC que incorpora este modelo y que aporta aún más deportividad.
Un vehículo impresionante
El resultado es un coche impresionante, tanto visto por fuera como cuando nos sentamos al volante para conducir. Exteriormente juegan a su favor esa menor altura de la carrocería, lo que unido a su anchura de vías ya nos indica esa deportividad. Y si a eso sumamos, como en nuestra unidad de pruebas, una carrocería terminada en el color gris mate característico de la marca o sus llantas de 19 pulgadas terminadas en color negro con un toque de cobre, su exterior llama la atención.
Lo mejor es que cuando ponemos en marcha el coche, los resultados superan ampliamente las expectativas previas. El Cupra VZ e-Hybrid tiene un dinamismo excepcional, se mueve con una soltura con la que solo querremos tener que hacer muchos kilómetros para disfrutar. Y además lo hace con el mayor silencio, sin ruidos ni vibraciones, lo que nos transporta a otro mundo. Porque normalmente un coche de este tipo, un compacto muy deportivo, destaca por su elevado nivel de ruido de su motor y también por vibraciones, sobre todo cuando rodamos más deprisa de lo normal. Pero en este caso no hay nada de todo eso.
Con el Cupra VZ tenemos un coche que va muy fino, con el que se puede ir muy deprisa. La precisión de su volante es magnífica y eso unido a unas suspensiones muy firmes y su altura muy escasa hace que incluso rodando deprisa por carreteras viradas los movimientos de carrocería sean casi nulos. Eso puede quizá ser un defecto, como la falta de vibraciones, para alguien que busque un coche muy "guerrero" en el que haya que trabajar mucho con el volante. Pero en este caso, aunque vayamos muy rápido, es siempre fácil de conducir.
La versión PHEV más deportiva
Este Cupra incorpora el acabado VZ, el más deportivo en la gama de Cupra. Y eso significa que tiene algunos detalles importantes que hacen que este modelo marque diferencias. Por ejemplo su interior más deportivo en el que destaca un volante con dos botones, como los de los deportivos de verdad, Porsche o Ferrari, por ejemplo.
Un botón para la puesta en marcha del motor y un segundo botón para seleccionar los modos de conducción. En este caso, a los habituales de Comfort o Sport se añade un tercer modo que es el exclusivo de "Cupra". Este modo se activará si buscamos una conducción más radical, sin buscar confort y apostando todo a rodar al límite. Y también hay un modo individual.
Este botón en el volante es un gran paso adelante con respecto a otros modelos del grupo Volkswagen, entre ellos el Seat Leon, en el que para seleccionar el modo de conducción hay que hacerlo desde la pantalla de la consola central. Y eso es un error. En este caso es muy fácil cambiar de un modo a otro en función de las circunstancias. Y con las levas del cambio, el conductor tiene todo al alcance de la mano
Y gracias al chasis activo, el DCC, también podemos ajustar el grado de dureza de las suspensiones en nada menos que 14 posiciones diferentes. Con ello, tenemos una manera muy precisa de ajustar cómo queremos que actúe la suspensión de nuestro coche en cada momento.
Pero además de todo esto que les contamos hay un aspecto diferenciador en esta versión PHEV de 245 CV, y es que tiene un motor de gasolina o otro eléctrico que trabajan de forma conjunta o por separado. Por ello, es un vehículo realmente interesante porque es una opción válida cada día para un mayor número de usuarios, pero tiene sus claras limitaciones.
Un enchufe accesible
Hay personas que, al menos de momento, no tienen la posibilidad de enchufar el coche en su casa o en el trabajo cada día. Y para ellos, no tiene sentido adquirir un coche más caro, más pesado, solo para conseguir esa etiqueta "0 emisiones". Pero para todos los que si tienen esa opción de enchufar de forma regular su vehículo, es una muy buena alternativa.
Básicamente se trata de un vehículo que combina un interesante motor de gasolina, de 150 caballos, con otro eléctrico de 115 CV. Pero curiosamente con estos dos motores hay dos opciones diferentes de potencia combinada en la gama Cupra. Una variante de acceso, que ofrece 204 caballos y para los que quieren un poco más hay una opción de 245 caballos. Ambas versiones solo se diferencian en la gestión del sistema híbrido y la entrega de electricidad al motor eléctrico.
No hay ninguna diferencia más entre ambas opciones, tienen la misma batería de iones de litio de 12,8 kWh, tiene la misma capacidad de carga en un enchufe de hasta 3,7 kW. Todo es igual menos el software de gestión del sistema híbrido. Y por ello, la diferencia de precio es también pequeña, solo 1.700 euros entre ambas y a cambio el VZ de nuestra prueba tiene algo más de equipamiento.
En este sentido, el equipamiento es bueno, tanto en su aspecto estético como en su interior. Y en cuanto a tecnología, tiene los principales sistemas de ayuda y un completo equipamiento al que se pueden añadir los faldones laterales Cupra y los asientos bucket similares a los de competición, que le aportan un estilo increíble a su interior.
Más de 45 km reales
Haciendo una conducción mixta entre ciudad y autovía, y sin excesos al pisar el acelerador, lo normal es superar los 45 km reales con el motor de gasolina apagado sin problemas. Pero sin duda este vehículo está pensado más para una utilización 100% urbana, en cuyo caso podemos superar fácilmente los 55 km. Teniendo en cuenta que al ser una batería bastante pequeña, su recarga es razonablemente rápida, con el Cupra León VZ e-Hybrid tendremos un coche con el que poder funcionar cada día en eléctrico por la ciudad, pero sin limitaciones a la hora de hacer un viaje.
El coche tiene dos modos de conducción para la gestión del sistema eléctrico del vehículo. Tiene un modo hybrid y el modo eléctrico e-mode. En condiciones normales el coche siempre arranca en el modo eléctrico y permite una suficiente agilidad gracias a sus 115 caballos de potencia de este motor sin emisiones. Pero sobre todo por esa entrega inmediata de par al acelerar, propia de los motores eléctricos. Es la forma ideal de moverse por la ciudad siempre que podamos recargar nuestras baterías cada noche en casa o cada mañana en la oficina.
El Cupra León es un magnífico coche, un compacto de 4,37 m, que ofrece una buena habitabilidad interior, aunque sus plazas traseras se ven limitadas en visibilidad por los asientos delanteros bucket de nuestra unidad de pruebas. En cuanto a su maletero es demasiado justo. En este caso de la versión híbrida enchufable éste se ve reducido en más de 100 litros por el posicionamiento de las baterías y el cambio de posición del depósito de gasolina. Por ello no hay un doble fondo y los 270 litros de capacidad se quedan algo justos.
Libertad en la ciudad
Este Cupra eHybrid, como ocurre con la mayor parte de los vehículos híbridos enchufables, es una opción muy buena, pero solo para un tipo de cliente muy concreto al que no le importa gastar más dinero. Para ese usuario que utiliza el coche todos los días para moverse por la ciudad y para hacer algún desplazamiento interurbano más pequeño, pero que también necesita poder hacer viajes más largos con el coche y con la familia, los fines de semana por ejemplo.
Por lo que se refiere a su dinamismo, proporciona una muy buena agilidad de marcha. Ofrece una mayor capacidad de aceleración gracias a la entrega de par del motor eléctrico desde el mismo momento en el que pisamos el acelerador. Todo ello pese al incremento de peso, de 253 kilos, por las baterías y el motor eléctrico adicional. Su capacidad de aceleración de 0 a 100 km/h es de 6,7 segundos, mientras que su velocidad máxima se sitúa en 225 km/h.
Un coche magnífico al que solo le pondría dos pegas. La primera la gestión de todos los sistemas del vehículo, salvo los modos de conducción si nuestra unidad incorpora el volante Cupra, con la pantalla central. La selección de la gestión del sistema eléctrico y sus opciones e-mode o eléctrico, la gestión de la dureza de la suspensión (hasta 14 opciones) y demás, solo se puede hacer con la pantalla táctil y después de buscar en varios menús diferentes. Pero hay que ir acostumbrándose a las nuevas tecnologías.
La otra pega es la de maletero muy justo, porque los 270 litros son muy poco maletero, sobre todo si queremos un coche para viajar de vez en cuando. Pero a cambio tendremos un vehículo dinámicamente maravilloso en carretera y con el que moverse en la ciudad es un placer, gracias a su etiqueta "0 emisiones" y a sus desplazamientos sin ruido ni vibraciones.
Ficha Cupra León VZ e-Hybrid
Motor térmico: 4 cilindros en línea
Potencia máxima: 150 CV desde 1.500 rpm
Par máximo: 250 Nm desde 1.500 rpm
Cilindrada: 1.395 cc
Combustible: gasolina
Motor eléctrico:
Potencia 115 CV
Par motor: 330 Nm
Potencia combinada: 245 CV
Par motor: 350 Nm
Capacidad de la batería: 12,8 kWh
Velocidad máxima: 225 km/h
Aceleración de 0 a 100 km/h, 6,7 segundos
Caja de cambios: automática de doble embrague DSG de 6 marchas
Tracción: Delantera
Consumos homologado WLTP en ciclo combinado 1,3 litros
Autonomía eléctrica homologada: 59 km
Dimensiones (longitud/anchura/altura), 4,37 x 1,80 x 1,46
Capacidad maletero: 270 litros
Peso en vacío: 1.625 kg
Precio: sin descuentos 44.600 euros