Motor

Ford aplaza las inversiones en electrificación y siembra más dudas sobre Almussafes

Factoría de Ford en Almussafes.

Ángel C. Álvarez
Valencia,

El futuro de la factoría de Ford en España vuelve a estar rodeado de incertidumbre. Después de que haya pasado más de un año y medio desde que el fabricante anunciase la elección de la planta de Almussafes (Valencia) para montar una de sus plataformas de coches eléctricos, la marca ha optado por "aplazar cualquier decisión que tenga que ver con las inversiones relacionadas con la electrificación", según ha informado UGT tras una reunión con el director de Operaciones de Ford Motor Company, Kumar Galhotra.

La visita de los ejecutivos de la sede de Ford en Detroit ha confirmado los peores presagios de los trabajadores de las instalaciones valencianas, que han visto como el anuncio de los nuevos modelos eléctricos y de las inversiones para poder adaptarse a ellos no se terminaban de concretar en los últimos meses. A la vez, la producción de la planta no deja de recortarse por el final del ciclo de vida de la mayoría de los modelos que produce la planta española.

Ford de hecho ya llegó a renunciar a las ayudas del primer Perte del Vehículo Eléctrico y Conectado el año pasado al considerar que no llevaría a cabo las inversiones necesarios en los plazos que exigía ese programa con fondos europeos.

En su comunicado a la plantilla, UGT, el sindicato mayoritario en la factoría, asegura que los representantes de la marca han justificado este cambio de paso por "el retraso que está experimentando el mercado del vehículo eléctrico". Para el sindicato, esta decisión sitúa "en el alambre" tanto a la planta valenciana como al conjunto de Ford en Europa, cuyo futuro considera que vuelve a estar en cuestión después de que la multinacional ya haya adelgazado su tamaño en el viejo continente en los últimos años.

En el caso de la planta valenciana, la falta de fechas para decidir las inversiones agrava la falta de carga de trabajo actual. La filial española ya acometió un importante recorte de plantilla, con un ERE para 1.124 trabajadores este año, pero con el proyecto de electrificación que garantizaba la continuidad de la producción frente a los sucedido en la planta alemana de Saarlouis, abocada al cierre tras elegir Ford la planta valenciana.

Falta de carga de trabajo

A corto plazo, Ford Almussafes dejará de producir en abril la Transit Conect, con lo que sólo mantendrá un modelo, el Kuga, lo que anticipa nuevos ajustes laborales en la factoría que emplea actualmente a 4.800 personas.

Ante esta situación y la falta de fechas para las inversiones en eléctricos, desde UGT reclaman que se garantice la producción de modelos híbridos para ese periodo de transición. Desde el comité de empresa se considera que el nivel mínimo de producción para garantizar la plantilla se debe situar en unas 200.000 unidades anuales.

También reclama una fecha de revisión del plan de electrificación y desde el sindicato además se rechaza negociar más medidas de flexibilidad, ya que considera que la empresa no ha cumplido con el acuerdo de electrificación alcanzado y en que se garantizaban las condiciones laborales que reclamaba la compañía.