Bolsa, mercados y cotizaciones
Telefónica aprovecha el 'pinchazo' de Vodafone: la supera en bolsa 10 años después
- Este lunes llegó a valer más que la británica, pero al cierre se quedó a 200 millones
- Los problemas a los que se enfrenta Vodafone han sido clave en el adelantamiento
Carlos Simón García
Madrid,
Comenzaba el año 2010, España todavía no era campeona del mundo, Nadal sólo había ganado cuatro veces Roland Garros, el Ibex cotizaba por encima de los 12.000 puntos y estaba a punto de estallar una gran crisis de deuda soberana en el Viejo Continente. Hasta ese momento, Telefónica era el líder absoluto del sector de las telecomunicaciones en Europa y sólo la norteamericana AT&T la superaba en valor bursátil. No obstante, todo cambió en enero de ese año, ya que fue la última vez que la española valía más que la británica.
Este lunes, casi 10 años después, se volvieron a girar las tornas y el mercado situó de nuevo por encima a la compañía ahora presidida por José María Álvarez-Pallete, aunque no para ser líder ya que en 2016 la alemana Deutsche Telekom superó a ambas y se mantiene desde entonces en lo más alto del ránking a nivel continental, con una capitalización de más de 73.000 millones de euros, casi el doble que sus dos grandes competidores.
Este adelantamiento ha llegado más por el castigo que está sufriendo Vodafone que por una buena evolución de Telefónica. Sobre la británica, además del Brexit, están pesando otros factores como el coste que están pagando en las distintas subastas de espectro, "que está siendo mayor al esperado", apunta Javier Borrachero, analista de Kepler Cheuvreux. "Está sufriendo todavía por las compras que ha hecho y por la excesiva competencia que está encontrando en sus mercados clave, donde no es el líder", añade Borrachero.
El Reino Unido solo supone entre un 12 y un 13% de la valoración de Vodafone, sin embargo, la caída de la libra ha pesado sobre la capitalización si se compara en euros. Desde los máximos de 2015, la divisa británica se ha desplomado más de un 22%, aunque si se atiende al cruce que había hace una década, apenas se ha movido.
Ese año, 2010, fue una fecha histórica para Telefónica ya que fue la única vez que superó los 10.000 millones de euros de beneficio. Este ejercicio, según el consenso de analistas que recoge FactSet, lo cerrará con unas ganancias de 3.750 millones, un 63% menos que hace nueve años. Esto estaba también reflejado en su acción, que cotizaba en torno a los 18 euros (ha perdido casi un 60% de su valor en este periodo sin contar los dividendos pagados).
Expansión internacional
Aunque los males de Telefónica han sido compartidos por todo el sector, Deutsche Telekom se ha mantenido ciertamente estable "gracias a la calidad de sus activos en Europa y por su exposición a Estados Unidos, que ha sido su mejor baza para crecer", arguye Borrachero. Andrés Bolumburu, analista de Banco Sabadell, añade que "allí el regulador es más benévolo y, de hecho, están en un proceso de consolidación entre T-Mobile y Sprint". Está consolidación, que los expertos señalan que sería la gran solución para el sector, no tiene visos de darse ya que "aquí, por contra, el regulador ha estado, hasta ahora, más por proteger al consumidor que al operador", se lamenta el analista de Kepler.
Telefónica y Vodafone salieron a la conquista de otros mercados menos desarrollados, como América Latina en el caso de la española y África y Asia en el caso de la británica. "Esta expansión, en vista de los resultados, no ha sido todo lo beneficiosa que se esperaba", explica Bolumburu. "En estos años, Telefónica se ha visto afectada por la evolución de las divisas en Centroamérica y Sudamérica", agrega Borrachero.
El otro gran viento de cara ha sido la irrupción de los pequeños competidores, fragmentando aún más el mercado. "Han surgido gracias a la protección regulatoria y a un entorno de financiación asequible", explica el experto de Kepler.
Este año, no obstante, la gran teleco española está aguantando mejor que ninguna el tirón y, de hecho, es a la única del sector a la que los analistas no le han recortado las estimaciones de beneficio y se las han elevado incluso un 2%. También se ha comportado en bolsa algo mejor que el resto de la industria y se anota algo más de un 1% en 2019 frente al punto y medio que se deja el sectorial europeo en el periodo.
Esta luz al final del túnel de Telefónica tiene su reflejo en la recomendación que recibe, que es la mejor desde 2011, aunque aún es de mantener, mientras que en la británica es de comprar.
La losa de la deuda
Aparte del débil crecimiento previsto para el sector, la principal losa que pesa sobre el mismo es el endeudamiento en una industria que es muy intensiva en capital por las continuas inversiones que tienen que llevar a cabo. En los últimos años, "Telefónica ha tenido que acelerar la convergencia y el despliegue de la fibra, además de digerir alguna adquisición", apunta Bolumburu. Su ratio de apalancamiento para este año se sitúa en 2,6 veces su ebitda -beneficio antes de impuestos, intereses, amortizaciones y depreciaciones-, el mayor de entre las grandes.
Sin embargo, esta cifra supera las 3,2 veces puesto que "no contabilizan ni los gastos laborales pendientes ni los bonos híbridos", advierten desde Mirabaud, que no esperan que esta situación mejore "teniendo en cuenta los planes de capex que están previstos y las subastas de espectro que se celebrarán en los próximos meses y años". Bolumburu, por su parte, sí cree que las necesidades de inversión de Telefónica en el futuro serán menores que las de su competencia ya que su despliegue en España es mayor".