Bolsa, mercados y cotizaciones
Un euro en 1,15 anula el 'efecto Draghi'
- La divisa comunitaria se ha apreciado más del 6% en lo que va de año
Cristina García
Mario Draghi juega un partido importante, debe ganarle la partida a la deflación y conseguir la estabilidad de precios. Para lograrlo está dispuesto a usar cualquier técnica, hasta las menos convencionales, pero con lo que no contaba el presidente del Banco Central Europeo (BCE) era con la llegada de un rival inesperado: el euro, que por encima de 1,15 dólares dificulta ya la recuperación de Europa.
A pesar de que la lógica económica invitaba a pensar en que una mayor oferta debería conducir a su depreciación, la divisa comunitaria se ha apreciado ya más de un 6% en lo que va de año, alejándose de la paridad que muchos vaticinaban y poniendo en peligro el objetivo que persigue la institución.
"No se puede ver al mercado como un economista, porque desde un punto de vista de oferta y demanda el euro debería depreciarse. Verlo así es un error porque en el momento en que Mario Draghi anunció más estímulos, ya estaban descontados en el precio y es lo que llevó a los inversores a recoger beneficios ante la expectativa de que ya no hay más", explica Víctor Alvargonzález, director de inversiones de Tressis.
Esa simple lógica -y también los planes de la Fed de pisar el freno de cara a futuras subidas en los tipos de interés- podría truncar ahora los planes de Mario Draghi, que no cesa en sus intentos de consolidar el anémico crecimiento económico de la eurozona, de buscar la fórmula para que el crédito fluya, además de intentar que los precios se acerquen al 2%, que en definitiva es el objetivo último que persigue la institución.
La explicación de por qué el repunte de la divisa podría neutralizar el efecto Draghi es que un euro fuerte es deflacionista, continúa Alvargonzález, porque todo lo que se compra sale más barato. No hay que olvidar que, hasta hace unos meses, su debilidad era uno de los vientos de cola a favor de las empresas europeas, que vieron de repente cómo eran más competitivas gracias a un euro depreciado y eso, a su vez, se dejaba notar en sus beneficios. El otro era el bajo precio del petróleo, que acumula también un alza del 20% en el año. Ahora los dos soplan en contra.
Pero, ¿hasta qué punto un euro fuerte puede quitar gas al repunte de la economía europea? "Todo depende de a qué nivel suba", aclara Sergio Miguez, director de relaciones institucionales de Efpa. En opinión de Alvargonzález, de Tressis, a partir de 1,15 dólares ya empezaría a ser problemático. "El grueso del comercio europeo es intracomunitario, pero el daño vendría por la parte que atañe a Estados Unidos, Reino Unido y emergentes", añade. Hoy el euro ya cotiza en 1,16 dólares.
El escenario con más probabilidades para los expertos
Sin embargo, el escenario más probable para los analistas no es ese. "El mercado sospecha que el Banco Central Europeo ha renunciado a demostrar sus agallas como guerrero de las divisas, debido a las limitaciones inherentes a perseguir tipos de interés cada vez más negativos. Al mismo tiempo, las nuevas medidas de QE se han recibido con un encogimiento de hombros, ya que el crédito fácil no necesariamente estimula la demanda. No está claro dónde deja todo esto al euro de cara al segundo trimestre, excepto un poco lateral y con riesgos bajistas importantes, al rebufo de un posible Brexit", argumenta John J. Hardy, director de estrategia de divisas de Saxo Bank.
En la misma línea, José Luis Martínez Campuzano, estratega jefe de Citi en España no espera que la subida del euro vaya más allá de 1,145 dólares. "Considero más razonable que vuelva a retroceder a niveles de 1,11 dólares en los próximos días", añade.
El hecho de que la Fed haya pasado de hablar de cuatro a dos subidas, apuntan desde Morabanc y "la actualización de nuestros modelos, nos hace subir el rango para el cruce euro-dólar de 1,00-1,05 a 1,05-1,10. Y seguimos opinando que el próximo gran movimiento para este par de divisas es bajista".
Sus estimaciones están en línea con las que manejan los economistas encuestados por Bloomberg. El consenso de mercado estima que un euro se intercambiará a 1,1 dólares tanto a final de año como en 2017, lo que implica una corrección del 3,5% desde los precios actuales. No es hasta 2018 cuando visualizan al euro en la zona de los 1,15 dólares.
Sin embargo, algunas firmas como HSBC o GrowthAces son contrarias con esta postura y en su opinión el euro podría escalar hasta los 1,2 euros este mismo año. Otras van incluso más allá, como UFS Finance Invest, que sitúa el cruce en 1,43 dólares a final del ejercicio o Raiffeisen, que estima que lo terminará en los 1,3 dólares.