Bolsa, mercados y cotizaciones
¿Es Francia el nuevo peligro de la deuda europea? Los bonos galos ya superan en rentabilidad a los españoles, italianos y griegos
- El rendimiento de los bonos galos a dos años sube más que la de sus pares
- La dificultad de Francia para alcanzar el objetivo de déficit tensa su deuda
- También se estrecha la brecha en los plazos más largos
Sergio Fernández
El mercado de deuda europea es un carrusel de rentabilidades desde que la Unión Europea anunció a los inversores su plan de rearme que elevará el déficit de los Estados miembro. Pero no todos los países parten de la misma base ni están igual de preparados para incrementar su carga fiscal. Y eso que el Banco Central Europeo está en pleno recorte de tipos de interés. La deuda francesa refleja mayor presión en las últimas semanas en el mercado de renta fija, lo que eleva la rentabilidad de sus bonos soberanos por encima del de sus pares. De hecho, el rendimiento de la deuda francesa a dos años ya supera a la de sus respectivos homólogos, elevando el riesgo para el conjunto de los bonos soberanos del Viejo Continente.
En las últimas semanas varios expertos vienen avisando del riesgo que plantea el déficit fiscal para la economía francesa en particular. El propio FMI pidió recientemente más esfuerzos a Francia para cumplir con sus objetivos y controlar su endeudamiento. Ahora son los inversores los que alertan del peligro poniendo precio a los bonos franceses. Y es que estos ya son más baratos que los españoles, los griegos o los italianos para el vencimiento a dos años. (menor precio implica mayor rentabilidad en el mercado secundario).
Al cierre del mercado europeo, la rentabilidad de la deuda soberana gala a este plazo supera el 2,16%. Es más del 2,1% de los títulos italianos, que han sido los colistas en la renta fija soberana del Viejo Continente de los últimos meses. La primera sorpresa la dieron la deuda portuguesa que actualmente ofrece una rentabilidad del 1,88%. Después la de los griegos y la de los españoles que actualmente se sitúan en el 2%. Así, la mejor situación fiscal en los conocidos peyorativamente como PIGS (acrónimo de cerdo para los países periféricos europeos) culmina su sorpaso dejando a Francia como el nuevo colista para uno de los vencimientos que más reaccionan a las políticas monetarias del Banco Central Europeo.
Que los bonos del gobierno galo cotizan ligeramente por debajo del de sus homólogos por precio en el mercado secundario es algo que ocurre en buena parte de los tramos más cortos de la curva de deuda. En concreto, en los vencimientos a tres meses, dos años y cuatro años.
No obstante, también estrechan la brecha en la parte de mayor duración, donde la incertidumbre se presupone mayor. Para el analista del mercado de deuda para Bloomberg, Huw Worthington, la solvencia de Francia podría estar en riesgo, ya que las agencias de calificación amenazan con rebajar la calificación a la zona 'A', que se sitúa en la mitad baja de la tabla de la zona de grado de inversión. Es decir, al estar los inversores situando a los bonos franceses más baratos que los italianos "podría ser una señal de que el mercado se está adelantando a las agencias", explica Worthington.
"Este tipo de inversión en la curva, inusual en un país considerado núcleo del euro, responde al deterioro en la percepción del riesgo asociado a la deuda francesa. Los factores detrás de este fenómeno son claros: un elevado nivel de déficit público, una dinámica de deuda creciente y, sobre todo, una incertidumbre política que lastra la credibilidad del país ante los mercados", comenta el responsable de Mutualidad, Pedro del Pozo.
Por lo pronto, a partir de los vencimientos a cinco años sigue siendo la deuda italiana la que más preocupa al mercado. Que sea a partir del 2029 donde el déficit fiscal galo no supone un problema para el mercado coincide con las expectativas que recoge el FMI, al ser el ejercicio a partir del cual la institución ve más probabilidades de que Francia se alinee con los objetivos de endeudamiento.
En los plazos ultra largos, de más de diez años, la diferencia entre los franceses y los italianos todavía están a favor de los franceses en alrededor de 20 puntos básicos. Por otra parte, las coberturas ante incumplimiento del pago de deuda en Italia siguen siendo superiores a los de la economía gala a partir de los cinco años. Los CDS (credit default swaps) italianos están sobre los 48 puntos básicos frente a los 33 de la deuda gala. Es decir, asegurar 1.000 euros en bonos soberanos italianos supone pagar un 0,48% (24 euros si se compraran bonos con vencimiento a cinco años).
Francia, de 'core' de Europa a periférica
La deuda nacional gala supera en la actualidad el 113% del producto interior bruto nacional. Es una cifra que superan o han superado otras economías europeas en ocasiones anteriores. La propia Italia ronda un 135% de deuda sobre crecimiento real. No obstante, que Francia haya pasado de bandera para la deuda europea a ancla para la eurozona amenaza con arrastrar al resto de los países del Viejo Continente. Más aún cuando el déficit estructural elevado y con las reformas presentadas hasta la fecha que no son suficientes a juicio del Fondo Monetario Internacional.
Sin embargo, por el momento no hay indicios de que la deuda periférica europea se esté viendo arrastrada por Francia en la actualidad, según recogen fuentes del mercado, por lo que la actual situación de la deuda francesa puede representar una oportunidad para el inversor que busca rentabilidad en bonos de calidad sin asumir un riesgo excesivo.