Bolsa, mercados y cotizaciones
Puig aspira a entrar al Ibex 35 en los próximos meses y arrebatar su plaza a Meliá
- La colocación de 2.500 millones deberían garantizarle liquidez
- Buscará este capital en una OPV y OPS para debutar en mayo
- El índice no recibe a ninguna empresa nueva desde diciembre de 2022
Isabel Blanco
El Ibex 35 tendrá una nueva candidata clara a entrar al índice por primera vez en mucho tiempo. Puig ya ha arrancado oficialmente su salida a bolsa que podría culminar con su debut en torno al 3 de mayo, según señalan fuentes cercanas a la operación, y podría convertirse pronto en una de sus componentes. El índice de la bolsa española no recibe a ninguna empresa nueva desde hace más de un año; 2023 fue el primer ejercicio de su historia en el que no se produjo ningún cambio en su composición. La última vez que se renovó fue en diciembre de 2022, en una revisión extraordinaria en la que se incorporó Unicaja.
Las caídas en los volúmenes de negociación de muchas empresas y la falta de salidas a bolsa están dejando al índice sin aspirantes. Entre las candidatas a ser excluidas está precisamente otra firma familiar, Meliá Hotels, que lleva tiempo en la cuerda floja. Es la empresa del Ibex con menos negociación e incumple, además, el mínimo de capitalización. Este mínimo, imprescindible para que una empresa entre, ronda ahora los 1.500 millones (esta es la cifra actual con la que el valor ajustado al capital que circula libremente en bolsa o free float llega el mínimo requerido del 0,30% del total del índice).
La familia Puig quiere mantener el control del grupo de marcas de lujo de moda y cosmética. Aunque no ha especificado aún el porcentaje que sacará a bolsa, los 2.500 millones de euros que espera captar con su colocación -la mayor en España desde la de Aena en 2015- a través de una oferta pública de venta (opv) y una ampliación de capital (ops) ya pasan el baremo de capitalización y deberían garantizar una liquidez suficiente para su incorporación.
Hay ejemplos de empresas dentro del Ibex que tienen un free float pequeño y que consiguen una negociación elevada. Se trata de Endesa (29,9%), Naturgy (12,9%) o Acciona Energía (16,3%). Alguna de ellas incluso con un tamaño inferior al que tendrá Puig, que podría rondar los 10.000 millones de euros tras la ampliación. Acciona Energía se ha movido con una capitalización media inferior a los 8.000 millones en los últimos seis meses, por lo que solo se intercambian libremente unos 1.300 millones. Aun así, se sitúa en el puesto número 22 en el ranking de negociación (ver gráfico al final). Acciona lanzó a bolsa a Acciona Energía el 1 de julio de 2021 (captó unos 1.500 millones en ella) y la compañía logró una plaza en el Ibex un año más tarde, tras la reunión de junio de 2022.
¿Cuánto puede tardar la entrada de Puig? Las normas que sigue el comité que cuida del Ibex fijan unos tiempos mínimos para que una empresa recién estrenada en bolsa pueda entrar al índice. Lo habitual es esperar a que lleve seis meses cotizando, aunque si las "características" de la firma "recomiendan su presencia en el índice" es suficiente con solo dos meses en el parqué. Es más, se puede realizar una revisión extraordinaria antes siempre que "la capitalización flotante de cómputo en el índice Ibex 35 se sitúe entre los veinte primeros del mismo". Para ese cómputo existen unos coeficientes, que en el caso de Puig puede ser del 20% o del 40% en función de cuánto capital venda, por lo que no lograría ese puesto. Así, lo normal sería que deban pasar al menos dos meses para incluirla en el Ibex, o esperar a esos seis más habituales.
La próxima reunión del comité está prevista para el 12 de junio, por lo que seguramente haya que esperar a la de septiembre o diciembre para la posible entrada de la firma que engloba marcas como Carolina Herrera o Rabanne, salvo una revisión extraordinaria.