El algodón cae un 21% en el año y la próxima producción de la India puede agravarlo

Una cuarta parte del tejido utilizado en el mundo es algodón. Y el precio de esta materia prima se ha visto afectado desde que arrancó la recuperación tras la pandemia. Los cuellos de botella provocaron un repunte de la demanda que llevó el algodón a máximos nunca vistos. Pero desde su máximo tocado en 2022 su valor en el mercado ha perdido más de un 40%. Y podrían corregirse aún más si se cumplen las proyecciones para los próximos años.

Las malas condiciones climáticas (sequía en Estados Unidos e inundaciones en India o Pakistán) de este año han causado un repunte de los precios. Pero para la temporada que viene se espera que India aumente su producción en un 12%, según las autoridades de agricultura del país. En los dos últimos años China adelantó en producción al histórico titán del algodón mundial que recortó su superficie cultivada desde la pandemia. Ahora el país prevé volver a ser el líder, lo que contribuirá a corregir aún más los precios.

El resto de grandes productores correrán la misma suerte. De hecho, las previsiones del mercado apuntan a que para 2026 se superarán los 28 millones de toneladas de algodón por primera vez, según Bloomberg. Y el 75% del total saldrá de los campos de cinco países: India, China, EEUU, Pakistán y Brasil. Con la volatilidad del mercado actual, los almacenes se llenan mientras la demanda se resiente ante una eventual recesión global.

El departamento de agricultura de EEUU es consciente de ello y en su último informe ya recogieron que los precios en el país pueden seguir cayendo, aunque en proporciones inferiores a India. Los precios han saltado tanto en tan poco tiempo que la asociación de países productores, el Comité Consultivo Internacional de Algodón (ICAC, por sus siglas en inglés) ha decidido dejar de hacer previsiones del precio del algodón. "El algodón se enfrenta a un futuro incierto en los próximos meses", según publicaron en su último informe en el que también recogen que el temor a una recesión está provocando el mismo efecto que una recesión global en sí misma.

Se puede ver el mismo efecto en los contratos de algodón negociados en la bolsa de Nueva York: la principal referencia para el mercado. El fardo (de 225 kg en EEUU) ha caído más de un 20% en el año hasta situarse por debajo de los 74 dólares por unidad. Y en este caso el dólar ha sido el que ha acelerado la corrección. La fortaleza de la divisa ha afectado a las negociaciones de la mayor parte de las materias primas que cotizan en dólares. Y, además, la subida de tipos de interés ha encarecido el transporte de las mercancías, aunque aquí también se aprecie una contracción de los costes por mover un contenedor si se compara con los últimos doce meses.

Como ejemplo, Pakistán ha sido un exportador histórico pero tras las inundaciones se habría visto en la necesidad de comprar para satisfacer la demanda industrial interna. Esto encarece el precio de fabricar hilo de algodón en el país, según el analista de Bloomberg, Robert P. Antoshak. No obstante, el precio del algodón ya cotiza por debajo de la media de los últimos 12 años, sobre los 80 dólares por fardo. Y eso contando con el efecto disruptor de los precios en 2022.

El peor mes desde 1986

El algodón se encamina en octubre a cerrar su mes más bajista desde 1986. Ahora falta ver si un precio más bajo de la materia prima permitirá reducir los costes a la industria textil o si las malas previsiones de consumo evitarán aprovecharse de este contexto. Hay que entender también que el poliéster (de origen sintético) o la lana (animal) son las otras grandes materia primas de la industria textil y tienen su propio escenario.

Lo que sí que está claro es que los altos niveles de inventario de los minoristas han amplificado el impacto de la desaceleración en la demanda del consumidor, según Nicholas Gentile, director financiero de la firma de inversión en materias primas, NickJen Capital Management. "Es probable que las tasas de interés más altas reduzcan el gasto de los consumidores en ropa", apuntó también Gentile. Y en el otro lado, uno de los mayores proveedores del mundo de algodón virgen, Plexus Cotton, estimó que solo en EEUU hay más de 13 millones de fardos de algodón almacenados a la espera de un comprador. "Las fábricas están cargadas de inventarios y funcionan a un ritmo más lento de lo habitual", reflejaron en su último informe de octubre.

Que también existe un problema de oferta lo reconoce el responsable de estrategias de materias primas en Hilltop Securities, Walter Kunisch. "El mercado del algodón está ignorando el evidente déficit de oferta estructural en EEUU", según el experto, como consecuencia también de la sequía y del huracán Ian en Carolina del Norte, del Sur y de Texas (California) donde se concentra la mayor parte de producción algodonera del país.