Bolsa, mercados y cotizaciones

El desplome del beneficio lleva al Ibex a niveles de endeudamiento de 2009

  • Superará las 3 veces por primera vez desde Lehman
  • El sector turístico, el más castigado
Foto: Archivo.

Carlos Simón García
Madrid,

Desde el inicio de esta crisis casi todos los expertos se han apresurado a medirla, compararla y ponderarla con la de 2008 al ser esta la que está más fresca en nuestras memorias. Sin embargo, hay grandes diferencias debido a la propia naturaleza de esta crisis y al contexto de uno y otro momento. Como prueba, que la deuda, algo que preocupaba y mucho al mercado hace 11 años hoy no lo hace tanto, según argumentan varios expertos.

Y es que los analistas ya sitúan su previsión de apalancamiento (deuda neta entre ebitda) para 2020 en las 3,2 veces, por encima de las 3,1 veces a las que llegó en aquel ejercicio y que supuso un verdadero quebradero de cabeza para empresas e inversores. Desde aquel pico, el endeudamiento del selectivo nacional se ha situado siempre entre las 2 y las 3 veces su ebitda, cayendo hasta las 2,2 veces del año pasado.

Víctor Peiró, director de análisis de GVC Gaesco Valores, cree que "esta vez no es tan peligroso porque el coste de la deuda es muy bajo y la liquidez está asegurada por los bancos centrales, por lo que no es tan preocupante como en 2009". "Las compañías tienen balances sólidos con mucha liquidez en caja o disponible", añade. "Hay sectores con impactos casi nulos, como las utilities, el consumo básico y la farma mientras que hay otros que tardarán muchos años en recuperarse", agrega Natalia Aguirre, analista de Renta 4. "En 2009, la media del bono a 10 años se situó por encima del 4% mientras que en lo que va de 2020 está en el 0,55, por lo que los costes financieros para las empresas no tienen nada que ver", añade la experta.

De hecho, este fuerte repunte del apalancamiento viene, sobre todo, de una caída drástica de los beneficios empresariales y no tanto de un aumento del pasivo corporativo. El consenso de analistas que recoge FactSet prevé un descenso del beneficio bruto del 22% hasta los 60.900 millones de euros y en dos años la expectativa es que recupere sobradamente los niveles de 2019.

Por el lado de la deuda, la previsión solo la eleva en algo más de un 12% hasta situarla por encima de los 194.000 millones de euros, cifra inferior a la que pesaba sobre el Ibex entre 2009 y 2011. Además, Peiró indica que "este aumento viene principalmente por inversiones de compañías en crecimiento, como puede ser Cellnex, y no por refinanciaciones".

El mayor de Europa

Hay que tener en cuenta que todas estas cifras no incluyen al sector bancario, "que ha sido el verdadero lastre de la bolsa española en esta crisis", incide Peiró, "y que es lo que no ha permitido al Ibex cerrar la brecha con el resto de índices europeos".

Así, mientras el EuroStoxx lleva perdido en el año un 12,8%, el Ibex ha cedido casi el doble. Sin embargo, los expertos coinciden en que esto no debería suponer un lastre adicional para la bolsa española. "Lo cierto es que tenemos una composición del PIB muy ligada a sectores con muchos problemas y tampoco nos ha ayudado la exposición a Latinoamérica, ni por la divisa ni a nivel operativo", arguye Aguirre.

Y es que en el resto de plazas del Viejo Continente, aunque también se han elevado considerablemente las previsiones de apalancamiento, estas no llegan a los niveles del Ibex. El EuroStoxx pasará de las 1,6 veces del año pasado a 1,9, el Cac de 1,2 a 1,5 y el Dax alemán superará las 2 veces por primera vez en los últimos 20 años.

Aunque el mal pueda ser el mismo que el de hace 11 años, las causas han sido muy distintas y el diagnóstico (y tratamiento) diferente. "Hay que tener un especial cuidado con el apalancamiento de algunas empresas de sectores más cíclicos con escasa visibilidad", apunta Andrés Aragoneses, analista de Singular Bank. "Hay que poner un ojo en la solvencia pero sin descuidar la liquidez y el acceso a financiación", concluye.

En este sentido, donde más se ha elevado la previsión de deuda ha sido en IAG, donde se ha doblado, y en Meliá, con un 67%, que deja la ratio deuda/ebitda en casi 33 veces este año. En Inditex se ha reducido la caja un 26% hasta los 5.500 millones de euros y en ACS y Siemens Gamesa la estimación de tener caja neta a final de año se ha diluido y ahora se prevé deuda, aunque contenida. Por contra, hay tres firmas del selectivo que pese a la crisis pueden reducir su pasivo, como son Ferrovial, Endesa y ArcelorMittal, aunque esta última haya realizado una ampliación de capital.

Dónde ha caído más la previsión de 'ebitda'

El repunte del apalancamiento en el índice español ha venido más por la vía de la caída de las previsiones de ebitda (beneficio bruto) que por la de un ascenso de la deuda, aunque también haya habido casos. En este sentido, también han sido las más perjudicadas las compañías ligadas al turismo. IAG, Meliá y Amadeus han sufrido los mayores desplomes en sus estimaciones mientras que en Iberdrola se han mantenido intactas y en MásMóvil, Endesa, Viscofan y en Cellnex incluso se han incrementado en 2020.