Elisa Mouliaá, estrella remunerada del prime time de Telecinco este viernes, protagonizó uno de los momentos más tensos de la emisión. Contratada para hablar sobre su denuncia de acoso sexual contra Íñigo Errejón, Mouliaá sorprendió a todos al cortar en seco a su propio abogado, Alfredo Arrién, en medio de una acalorada conversación sobre los hechos que rodean su acusación.
El pasado 24 de octubre, Íñigo Errejón, cofundador de Podemos y diputado de Sumar, anunció su dimisión mediante un comunicado en el que explicaba que necesitaba "abandonar la política institucional" para centrarse en su proceso personal y psicológico. Poco después, Elisa Mouliaá utilizó sus redes sociales para acusar al político de acoso sexual, generando una ola de reacciones mediáticas.
Con este contexto, la actriz acudió al plató de ¡DeViernes! para abordar la polémica en profundidad, acompañada de su abogado. Sin embargo, lo que debía ser una conversación enfocada en la denuncia, se tornó en un inesperado roce entre ambos.
Durante la intervención de Alfredo Arrién, el abogado de Mouliaá expuso algunas dudas y observaciones sobre la dimisión de Errejón, insinuando que el político había anticipado su renuncia porque sabía que "iban a venir procedimientos penales" en su contra.
Ante estas declaraciones, Elisa Mouliaá interrumpió bruscamente a su abogado: "¡Que no! ¡Que no! La sucesión de hechos es que saltan los testimonios por Cristina Fallarás y él dimite", afirmó con vehemencia. Su negativa parecía dirigida a corregir el planteamiento de Arrién, quien insistía en que Errejón "sabía que tendría que enfrentarse a la justicia" a pesar de no haberse formalizado aún una denuncia penal en su contra.
El incómodo intercambio dejó al resto de los colaboradores sin palabras. Terelu Campos, presente en el plató, intentó mediar preguntando: "¿Cómo puede saber eso si no hay ninguna denuncia?", pero las tensiones entre Mouliaá y su abogado continuaron marcando la conversación.
Finalmente, Arrién intentó cerrar el tema aclarando que, aunque no existía un proceso penal en curso, "las denuncias anónimas y los testimonios públicos apuntaban a que Errejón sabía que tendría que presentarse ante la justicia". Sin embargo, la actitud de Mouliaá dejó claro que no compartía esa línea argumental.
A pesar del revuelo mediático generado por la presencia de Mouliaá y las acusaciones contra Errejón, ¡DeViernes! no logró traducir la polémica en cifras de audiencia. El programa obtuvo un discreto 10,7 % de cuota de pantalla y una media de 875.000 espectadores, muy lejos del liderazgo de la noche, que quedó en manos de El Desafío de Antena 3, con un 15,6 % de share y más de 1,5 millones de espectadores.
Elisa Mouliaá no solo utilizó el programa para reiterar su postura sobre la denuncia, sino que también dejó patente su carácter firme y su determinación de controlar el relato. La inesperada confrontación con su propio abogado en directo añadió una capa de tensión a una emisión ya de por sí polémica después de desvelarse que la actriz cobró por asistir al show después de haberlo negado.
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