Gente

Elisa Mouliáa admite haber cobrado por sus intervenciones televisivas tras negarlo en redes y cuenta qué va a hacer con el dinero

Solo un día después de declarar ante el juez por el presunto delito de agresión sexual por el que denunció a Iñigo Errejón el pasado mes de octubre, la actriz se ha sentado en el plató de Santi Acosta y Bea Archidona para contar su versión de lo que pasó aquella noche de septiembre de 2021. Elisa Mouliáa ha añadido algunos detalles al relato que ha mantenido públicamente hasta ahora y ha admitido algunas de las informaciones publicadas estas semanas y que ella misma, a través de las redes sociales, había desmentido. Por ejemplo, que está cobrando dinero por sus intervenciones en Telecinco.

Vaya por delante que Elisa tiene todo el derecho de hablar donde quiera, cuando quiera y donde quiera, y por supuesto a cobrar por ello si lo desea, pero llama la atención que negara dichas informaciones, publicadas en este digital el pasado mes de noviembre, para ahora admitirlas. "Es mentira", aseguró tajante entonces. Ahora dice: "Cualquier retribución económica que yo o mi abogado podamos obtener a raíz de esta exposición será donada íntegramente a una asociación para apoyar a las mujeres maltratadas, el próximo 8 de marzo ante notario". Un gesto que la honra y que aplaudimos.

Al margen de esto, Elisa ha relatado su encuentro con Iñigo Errejón y ha trasladado al plató de Telecinco las declaraciones que ofreció este jueves al juez Adolfo Carretero. La actriz mantiene que se sintió violentada, invadida y abusada por parte del político e incide en que tiene testigos de todo lo sucedido: "Yo se lo conté a mis padres, mis hermanos y algunas amigas". Entre las pruebas que maneja, un intercambio de mensajes con sus amigas y también con el propio Errejón, con el que continuó chateando después de los hechos: "El contacto fue breve, escueto. Él me hablaba y yo contestaba. Me daba miedo no hacerlo", ha confesado. "¿Por qué? Por ser quien era. Por el poder que tenía".

Elisa ha querido aclarar algunos de los puntos más contradictorios de su relato, como el hecho de que subiera a la casa de Errejón tras recibir la llamada de su padre, informándole de que su hija estaba enferma: "Yo no quería subir pero él me convenció. Me dijo que me daría su libro firmado y nada más, pero en cuanto entré por la puerta se me lanzó". Ante el juez, el cofundador de Podemos aseguró que entraron en su casa, tomaron unas cervezas y puso música antes de intimar: "No es cierto, yo soy celíaca y no tomo cerveza, la gente no suele tener cerveza sin gluten en su casa", ha dicho ella.

Sobre la comentada sumisión química que pudo sufrir aquella noche, Elisa ha asegurado que no lo descarta porque tiene muchas lagunas: "Desde que me puso la chupa en la fiesta hasta que estoy en el coche hacia su casa, no recuerdo absolutamente nada. Y no me explico cómo subí en el coche con él. No me lo perdono". Aunque también admite: "Es verdad que iba muy borracha porque llevaba mucho tiempo sin tomar alcohol y aquella noche bebí mucho".

La actriz ha asegurado que revivir todo lo sucedido aquella noche es un auténtico infierno para ella y que cayó en una depresión de la que todavía no se ha recuperado: "Llevo dos años medicada. Me costó darme cuenta que había sido víctima de un delito", ha confesado. "Quería hacerme la fuerte, como que no había pasado nada, por eso dije al principio que no me había afectado, pero no es cierto". Y asegura que dio el paso de denunciarlo al saber que podía haber más víctimas: "Una chica iba a denunciar pero se ha echado atrás al ver lo que me está pasando a mí", lamenta. "Dicen que me estoy aprovechando pero ¿de qué? Si a mí esto solo me ha traído problemas".

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBeloudBluesky