Ana Terradillos lleva casi cuatro meses al frente de La mirada crítica en Telecinco. Estas Navidades ha seguido moderando una tertulia -"acabamos de empezar, así que este año no hay vacaciones"- que se está asentando en las nuevas mañanas que la cadena estrenó a comienzos de temporada. La periodista hace balance del tiempo que lleva al frente del formato y se muestra satisfecha con las audiencias que está consiguiendo. "Me da la sensación de que tenemos larga vida por delante", explica, aunque reconoce que afrontó su nuevo proyecto en Mediaset "con respeto, porque la sombra de Ana Rosa es alargada".
¿Eres de las que celebra mucho la Navidad? ¿Qué planes ha tenido?
Me encantan estas fechas, sobre todo Nochebuena y Navidad. En mi casa somos muy familiares y mis padres son los que nos han metido en este mundo navideño. Ellos lo viven de forma muy especial. Mi hermana y yo vivimos fuera y aprovechamos para volver a casa, así que solo somos cuatro. Además, me reencuentro con amigas de San Sebastián y de la universidad. Como tengo a los dos [padres], la Navidad es muy positiva y alegre. Sin hacer grandes jolgorios, lo disfrutamos mucho.
¿Olentzero o Reyes Magos?
Somos de Reyes, porque es una tradición por parte de mis padres. En Navidad siempre nos cae un pequeño regalo, pero de toda la vida en mi casa los regalos los traen los Reyes Magos.
Has cerrado un gran año profesional como presentadora de La mirada crítica, ¿qué valoración haces?
Era un programa que lo cogí con mucho respeto, no miedo, porque la salida de Ana Rosa era algo importante y su sombra es alargada. Me daba mucho respecto saber cómo iba a responder la audiencia y qué tipo de suelo íbamos a tener. Llevamos muy poco tiempo, pero la audiencia nos ha recibido muy bien. Estoy muy contenta y tengo la sensación de que tenemos larga vida por delante. Las mañanas de Telecinco van a bien, aunque todos los días son una pelea, luchamos por cada décima de una forma exagerada y el combate diario es muy intenso.
¿El resultado es mejor de lo que te esperabas?
Teníamos muchas dudas sobre el suelo de audiencia que íbamos a tener. No sabíamos si nos íbamos a quedar en un 7% o en un 14%. Queda mucho recorrido, pero nos estamos moviendo entre el 11,5%-13% y eso es muy buen dato para La mirada crítica. Nos hemos llevado una sorpresa positiva, aunque queda mucho trabajo por delante. Esto es un pico y pala. La casa está contenta y creo que Ana [Rosa] también.
¿Cómo es Ana Rosa como jefa? [La mirada crítica está producido por Unicorn]
Es muy inteligente y generosa. Sabe reunirse de los mejores, capta enseguida el talento y consigue que todos rememos en el mismo sentido. Y es generosa a la hora de sacar el mayor rendimiento a las personas, les deja que se luzcan y eso también le hace brillar a ella.
¿Pensabas que acabarías presentando un programa cuando empezaste a colaborar con Ana Rosa?
Nunca. Nunca. He estado muy contenta en la Cadena SER, donde he sido corresponsal, reportera... y todo ese bagaje ha sido muy bueno para lo que estoy haciendo ahora. A la hora de presentar una tertulia puedes ser una simple moderadora o una periodista moderadora, y eso se nota. La gente ve si controlas los temas y te sabes mover.
¿Se puede hablar de política en las cenas familiares de Navidad? ¿Qué consejo darías, tú que moderas una tertulia?
En el País Vasco nunca ha sido posible. Ahora, afortunadamente, podemos hablar un poco más, pero no mucho. Y eso siempre nos ha hecho ser más cautos. Esta situación la viven ahora en otros sitios, como Cataluña e, incluso, Madrid. Hay temas que en Navidad es mejor no tocar y hay que ser más banal para tener la fiesta en paz.
¿A 2024 le pides que te de una entrevista con Pedro Sánchez? Porque a Ana Rosa le costó hasta que la consiguió...
La estamos pidiendo, pero en este caso se la ha hecho Pedro Piqueras [le entrevistó hace unos días]. El presidente ha venido a Mediaset, que era lo importante, pero ha ido al informativo porque era lo que tocaba. Piqueras siempre ha sido el gran entrevistador de la cadena, junto con Ana Rosa Quintana, y en este caso estaba claro. Pero confío que en cuanto pasen las Navidades lo tenga sentado en La mirada crítica.
¿Qué le dirías a Sánchez si te dice que falta pluralidad política en las tertulias?
Ana Rosa empezó a tirar de gente muy joven experta en distintos ámbitos y creó una mesa muy dinámica en la que hay gente que defiende lo suyo de un lado y de otro. Le diría que tenemos una mesa muy plural y a los mejores colaboradores de la televisión. Y esto es una muy buena herencia de Ana Rosa.
¿Qué pronosticas para 2024 en el terreno político?
Va a ser una temporada de alto voltaje y muy crispada porque los dos [partidos] han sacado el hacha. Esto lo van a complicar de forma exagerada los independentistas catalanes, que no se lo están poniendo fácil al presidente del Gobierno y tampoco al PP. Va a ser una legislatura de encaje territorial muy crispada. Vamos a ver cosas que no son nada edificantes. El insulto por sistema y el 'no' por sistema es algo de lo que voy en contra, porque no beneficia a nadie. Creo que provoca un distanciamiento entre la sociedad y los políticos que va a ser complicado de salvar. Yo soy una defensora a ultranza de la política, pero esas distancias son difíciles de recuperar y provocan desafección.